- ELENA CASTRO SOLER; JOSÉ RODRÍGUEZ GUERRERO, "Luis de Centelles y las Coplas de la Piedra Philosophal", «Azogue», nº 4, 2001, URL: http://www.revistaazogue.com

 

Elena Castro Soler
José Rodríguez Guerrero

LUIS DE CENTELLES Y LAS COPLAS DE LA PIEDRA PHILOSOPHAL

 

 

 

I. - Introducción

 

En un primer acercamiento la Edad Moderna española llama la atención dentro de la alquimia por el reducido volumen de su literatura en comparación con otras naciones. El número de ediciones impresas sobre esta materia en Alemania entre los siglos XVI y XVIII se aproxima a las tres mil, en Francia supera las dos mil, mientras en Italia e Inglaterra se sitúa en torno al medio millar (1) . Fuera de nuestro país la alquimia suscita el interés más variado en el cuadro de un debate extenso sobre las operaciones naturales y artificiales que se aviva desde los dominios de la cultura del Renacimiento para prolongarse en las centurias posteriores. La encendida actividad literaria de los alquimistas y la notable solicitud de textos invitó a los tipógrafos de esos países a estampar extensas colecciones especializadas con los tratados más apreciados por los aficionados a la ciencia transmutatoria (2) . Sin embargo, la "actividad alquímica" de las imprentas en España es extremadamente rara. Incluso se da el caso de que algunos editores foráneos, cuyos volúmenes buscan proyección internacional, excluyen voluntariamente en sus prólogos las posesiones españolas de entre aquellas a las que ofrecen sus obras (3). Ciertamente hasta hoy no se ha llevado a cabo una catalogación precisa del fondo impreso español dedicado a la alquimia aunque, personalmente, el número de obras que conocemos no supera unas pocas decenas, aumentando notablemente si añadimos los libros de materias habitualmente afines como la espagiria o la iatroquímica (4) , pero siempre muy lejos de las cifras referidas para otros países en lo concerniente a la transmutación metálica (5). Si nos detenemos en la obra manuscrita, el intercambio de códices, pergaminos o legajos ha dejado extensos fondos en las bibliotecas extranjeras que contrastan igualmente con la muy apreciable carestía de las españolas. Es evidente que la letra alquímica de nuestro país ha sido en esa etapa de la historia sensiblemente menor respecto al conjunto de otras nacionalidades, o al menos la que ha llegado hasta nosotros. Queremos señalarlo porque en nuestro acercamiento a la obra de los alquimistas españoles nos hubiera gustado poder llevar a cabo un estudio general de su obra poética para analizar sus estilos y tendencias generales, sin embargo en el estado actual de las investigaciones el material conservado resulta insuficiente (6).

Vamos pues a centrarnos en una de las escasas composiciones líricas puestas en castellano que nos ha legado la alquimia. Son un conjunto de octavas (entre 27 y 32, según las versiones) tituladas "Coplas de la Piedra Philosophal", cuyo autor parece ser un alquimista valenciano llamado Luis de Centelles.

 

II. - Ediciones Precedentes dedicadas a Luis de Centelles o a las "Coplas de la Piedra Philosophal"

 

Las "Coplas" se imprimen por primera vez como apéndice final en la última obra del médico boloñés Leonardo Fioravanti (1517-1588), dedicada al monarca español Felipe II (7) . El volumen aparece como un legado personal en el que Fioravanti realiza una exposición general de sus teorías sobre terapéutica, elaborando más que en textos precedentes su visión de la Filosofía Natural.

Los estudios más recientes nos revelan un Leonardo populista, avisado comunicador, dedicado a reunir antiguos remedios medicinales tomados de exóticas fuentes, centones, recetarios, con el fin de venderlos hábilmente (8). Los textos alquímicos son para él compendios de los cuales extracta fórmulas e información sobre las operaciones necesarias para la producción de medicamentos, igual que hace con manuales de las disciplinas más variopintas. Su labor se alinea con la de los "libros de secretos" muy en boga en Italia durante el siglo XVI y la primera mitad del XVII. En diversos momentos de su vida este proveedor de prodigiosos "secretos medicinales" entrará en el comportamiento de un charlatanismo manifiesto en sus reclamos a la "Magia Natural", a lo supersticioso y al curanderismo popular (9). En España permaneció entre 1576 y 1577. Es precisamente en el libro cuarto de su tratado "Della Fisica..." donde comenta sus amistades con personas vinculadas a la alquimia en tierras españolas. Entre la gente que conoció destaca a un "caballero italiano" llamado Lorenzo Granita al cual robó, según declaración propia, una receta escrita en versos castellanos que le servía para transmutar todos los metales en oro de veintidós quilates. Esta fórmula es, precisamente, el conjunto de veintisiete octavas que conforman las coplas atribuidas a Luis de Centelles, aunque la copia hurtada por Fioravanti no indicaba el nombre de su autor original (10) . Tendremos tiempo más adelante para detenernos en el manuscrito de Lorenzo Granita.

La primera vez que las "Coplas de la Piedra Filosofal" se dan a conocer bajo la atribución a Luis de Centelles es en una noticia que figura en la "Historia Crítica de la Literatura Española" del señor Amador de los Ríos (11) . Se basa en una copia conservada en la Biblioteca Nacional de Madrid sobre la que haremos una descripción más detallada en su momento (12) . No se apunta dato alguno sobre otras versiones. Centelles es presentado como un poeta dedicado a describir la obra alquímica, y todo ello sin buscarse referencias en lo tocante a su identidad o a la tradición manuscrita de la composición, cuya traslación madrileña presenta, como veremos, bastantes alteraciones respecto a los textos más antiguos.

En 1871 Eugenio Maffey creyó haber localizado cinco nuevas octavas de finalidad alquímica que atribuye a Luis de Centelles (13). Las editó por considerarlas "asaz curiosas". Nosotros las trasladamos aquí respetando la sintaxis y gramática originales:

estos versos me inviaron de Madrid por muy buenos
año de 1568 á ocho de enero

materia

Son tres hermanos en una natura
los dos de ellos fixos: del sol ya perfetos
cuerpos se dizen luciendes y netos
vestidos de noble y real vestidura
el otro, no fixo: de materia pura
de quien estos otros por línea descienden
de aquí los estraños secretos dependen
si el cuerpo y el alma hizieren mistura

preparacion

quan hizieres el tal juntamiento
pa destruir la virtud furibunda
corrompe los cuerpos en agua pudibunda
y el ánima pasa por tal lavamiento.
mas abre los ojos del entendimiento,
si hazerte quieres gentil practicante;
que en vaño se lava y se purga el infante;
por que allí cuece su buen autrimento.

disolucion

por tal regimiento dizen casados
el cuerpo y el alma que ansi praeparaste
despues que en su talamo los encerraste
en sus propias fuerzas se son eforzados
y á la primera materia tornados
abraza el esposo a su dulce esposa
y queda de un fijo tan noble preñada;
que venze la fuerza de los dos velados.

Fixation

en medio de los fuegos de mucha templanza
el niño recibe entera firmeza
tanto se hace mas fortaleza
quanto en el fuego hiziese tardanza
reitera siempre la disolution
después de la setima congelacion
veras una obra de mucha pujanza.

Aumento

quando ya vieres salir coronado
al Rey christalino vestido de albura
mezclale el vino con mucha mesura
con muy poca parte de lo ya fixado.
Sea ansi todo el baño tornado
asta que en oleo lo veras desatar
y muy poco tiempo veraslo fixar
con el magisterio que ya es acabado

 

Ni entre las estrofas impresas por Fioravanti ni en la nota de Amador de los Ríos aparece ninguno de estos versos. De hecho, el único argumento esgrimido por Maffey para sostener su atribución es que el códice del cual los ha tomado incluye un mensaje personal bajo el nombre de Centelles (14). La confusión de Maffey resulta comprensible si tenemos en cuenta que el manuscrito con el que trabajó venía marcado en los antiguos catálogos de la Biblioteca Nacional con el nombre genérico de "Luis de Centelles" u "Obras de Luis de Centelles". La base para tal identificación por parte de los bibliotecarios estuvo precisamente en la epístola de los primeros folios, que interpretaron como un texto original autografiado "...en Valencia a XVIII de Setiembre de 1552. Suidor de v. m. don luis de Centelles". Sin embargo ha de aclararse que se trata de una versión posterior. El propio copista, que lo es del resto del manuscrito, no se declara autor de la carta y puntualiza que le fue proporcionada por un cura llamado Francisco Ortiz desde el pueblo burgalés de San Pedro de Saelices. El mismo volumen está formado por tratados de los autores más diversos: "Epistula Raimundi Lullii Regi Ruberto de acurtatione lapidis philosophorum" (ff. 25r-35r), "Hortulani philosophi comentariolus i tabulam smaragdinam Hermetis Trimegisti" (ff. 36v-41v), "Rosarius minor de cognitione rerum metallorum" (ff. 42r-60v), "R. Bacon de alquimia libellus seu speculum alquimiae" (ff. 64v-75r), "Codicilio sive vademecum o cantinela Raimundi Lullii" (ff. 85r-130r), etc. Dentro de las obras anónimas en verso destaca un "Romance de Mercurio por otro nombre Hermes trimagisto" (15) . El actual "Inventario General de Manuscritos" de la Biblioteca Nacional ya rectifica el antiguo error y señala el Ms 7443 de forma más general con el epígrafe: "Varios tratados y apuntes en español y latín sobre Alquimia y materias similares" (16). Así pues, al margen de la carta al Dr. Manresa no podemos afirmar que sea Centelles el autor de estas cinco estrofas ni de ningún otro contenido de este códice.

En el tomo inicial de su obra "La Alquimia en España", aparecido en el año 1889, José Ramón de Luanco establece la primera valoración de la pequeña producción literaria asociada a Luis de Centelles apoyándose en la reunión de informaciones diversas. En un primer capítulo se hace eco de las octavas encontradas por Maffey, las transcribe y niega la autoría propuesta por su colega considerando que deben catalogarse como un poema anónimo (17) . En el apartado siguiente reproduce la epístola dirigida por Centelles al Doctor Manresa y advierte con cautela que no es la versión original sino una copia posterior. A continuación hace referencia a las "Coplas de Don Lvis Centellas" descubiertas por José Amador de los Ríos en el manuscrito 2151 de la Biblioteca Nacional y realiza una transcripción completa (18). Creyendo haber localizado así el original de las "Coplas" observa también que se trata de la misma composición impresa por Fioravanti en su tratado "Della Fisica", aunque estima la edición del italiano como secundaria y cargada de alteraciones (19). Tal y como veremos, las conclusiones de Luanco son equivocadas a la hora de establecer una versión fiable de las "Coplas" y, no obstante, serán asumidas como válidas por la mayoría de comentaristas posteriores. El número de copias manejado, apenas dos, es muy escaso, lo que le impide poder trazar la historia del texto y distinguir sus modificaciones. Hubiera sido recomendable una aproximación a la identidad del autor y una posición más prudente a la hora de definir la versión madrileña como la más fiable y cercana al poema original. Al margen de estos detalles el aporte de Luanco es hasta la fecha el más significativo. Sus faltas son comprensibles en un trabajo pionero dentro del estudio de la historia de la alquimia española que, además, no pretende formar una opinión muy elaborada sino proporcionar unas serie de apuntes que puedan servir de base a investigadores posteriores (20).

En 1976 Juan García Font recupera la figura de Centelles dentro de su libro "Historia de la Alquimia en España" para ubicarlo entre los alquimistas destacados en tiempos de Felipe II (21) . Desde el punto de vista de las fuentes no hay ningún aporte respecto a las manejadas por José Ramón de Luanco casi un siglo atrás. La contribución de García Font se limita a un comentario de la carta al Dr. Manresa y de algunas partes de las "Coplas" sobre todo en base a teorías junguianas, partiendo de la versión establecida por Luanco. Tomando el contenido epistolar destaca a Centelles como "...alquimista valenciano que vivió a mediados del siglo XVI" y lo califica de "adepto de la filosofía oculta" (22). Igualmente se deja apuntada la sospecha de que los conocimientos de este aficionado a la alquimia se limitasen a un terreno puramente teórico (23).

En el año 1979 las "Coplas" son vertidas al francés por la revista belga "Le Fil d'Ariane" (24). La traducción corre a cargo de dos comentadores llamados Julio Peradejordi y Laura Robecchi. Es evidente que la fuente utilizada es la versión impresa por Luanco, aunque no se cita al químico asturiano. El corte hermetista de la propia publicación envuelve las pautas de esta edición francesa. Como resultado se hace patente un descuido total de las normas críticas en el manejo de los datos. En poco más de veinte líneas de presentación se deslizan un número extraordinario de errores. Se da la fecha del "...18 de Noviembre..." a la carta enviada al Dr. Manresa. A pesar de las dudas y las advertencias manifestadas por Luanco se le atribuyen las cinco estrofas localizadas por Eugenio Maffey, argumentando simplemente que su "...estilo se asemeja mucho al de las que aquí publicamos", todo ello sin aportar un análisis sobre los usos estilísticos de Centelles. La revista belga nos asegura que ha querido dar sus lectores "... la oportunidad de leer uno de los pocos textos herméticos españoles que hayan escapado a la Inquisición, cuyo manuscrito se halla en la Biblioteca Nacional (cod. 122, vol. 147)". Estas observaciones resultan más extrañas cuando vemos que no se proporcionan datos o documentos relacionados con esta supuesta persecución inquisitorial sobre Luis de Centelles o sobre sus obras. Respecto al manuscrito citado basta decir que la larga cota indicada no le ha sido nunca asignada en la Biblioteca Nacional, pues la antigua signatura era simplemente L-122 y en la actualidad lleva el número 2151.

En 1983 Antonio Cruz Casado, especialista en la literatura del Siglo de Oro, publica una transcripción diferente de las "Coplas", localizada por él mismo en un manuscrito del Archivo de la Catedral de Córdoba (25). El original viene atribuido explícitamente a Luis de Centelles. La estructura interna del poema suministra datos importantes sobre las alteraciones en el orden estrófico y la libre adición de octavas por parte de los copistas. Son todos temas que abordaremos al describir el códice cordobés. El trabajo de Cruz Casado representa una contribución muy destacada, ya que es prácticamente el único investigador del siglo XX que se ha preocupado por facilitar una nueva fuente a las ya notificadas por otros autores en la centuria precedente.

Una nueva edición en castellano aparece en la revista "La Puerta", en su número de otoño de 1984 (26) . Se trata de una reedición del artículo aparecido varios años atrás en "Le Fil d'Ariane" y del que ya hemos hablado (la línea editorial de ambas publicaciones es muy similar). Está íntegramente traducido al español por S. d'Hooghvorst.

En 1987 Juan Eslava Galán confecciona una transcripción reuniendo una serie de documentos anteriores (27). Toma como base la versión de Luanco, comentando simplemente que: "...parece, por diversos indicios de prolija enumeración, estar más cerca del hipotético original que los otros que conocemos". Señala en notas a pie de página las diferencias con el texto localizado por Cruz Casado y afirma "...haber tenido en cuenta todas las variantes significativas desde el punto de vista alquímico [?] que presentaba el códice cordobés. El de Madrid sólo tiene 28 estrofas; el de Córdoba añade cinco más, especie de recapitulación o resumen final...". La versión de Fioravanti es mucho peor considerada, declarando que: "...salpicada de voces italianas y con orden estrófico algo alterado, interesa menos". Tales juicios parecen guiarse solamente en las opiniones de Luanco y, por ejemplo, es dudoso que Eslava Galán realizase una consulta directa del poema reproducido por Fioravanti, ya que no hay referencias bien concretadas del mismo, de hecho incluso apreciamos ciertos problemas para señalar bien su año de edición (28) . En la breve presentación añade un comentario personal sobre aquellas octavas que más le han llamado la atención. En sus sugerencias no hay argumentos apoyados en testimonios explícitos debidamente contextualizados en el entorno de Centelles, bien al contrario nos habla vagamente de lo que él denomina "sentido alquímico". Por todo ello hemos de considerarlo una libre interpretación personal sin intención crítica. Sirva de muestra su conclusión acerca del diferente orden estrófico entre la versión madrileña y la cordobesa, según su opinión: "...desde el punto de vista alquímico [?], cabría modificarlos a favor de varios ordenamientos distintos si seguimos distintas vías y procedimientos. Quedan pues las coplas como un mazo de visiones abiertas a diversas lecturas y combinaciones para que su orden sea un enigma más...".

 

III. - Estudio y Análisis de las Coplas Alquímicas de Centelles

 

III. 1. - Origen y Difusión

 

Exceptuando los apuntes de Luanco y el aporte de Cruz Casado, del apartado anterior se desprende un escaso interés en comentarios o ediciones a la hora de profundizar sobre el origen, elaboración y posterior suerte del poema. Como consecuencia realizaremos un análisis autónomo, buscaremos agrupar el mayor número de datos con el fin de trazar la historia de las "Coplas", intentando establecer un texto original y señalando las posteriores modificaciones así como reconstruir el proceso de su difusión. Para ello comenzaremos por detallar las copias de las que tenemos noticia.

 

- Ms A1 : Universidad de Yale, Mellon Collection, Ms 34, Siglo XVI, ff. 151r-153r.

El primer ejemplar, al que denominaremos en este artículo Ms A1, se encuentra en la Biblioteca de la Universidad de Yale, en los Estados Unidos.

Incipit: f. 151r: "Lapis Ispanus - Como la dama che mova nel ciello che es ijxa del sol...".
Explicit: f. 153r: "...che moncho las encubres. pues a lo tales non me es defendido. Finis".

El título del poema es "Lapis ispanus", aparece anónimo, con un total de veintisiete estrofas, manifiesta en abundantes palabras y giros una traducción parcial al italiano que rompe ocasionalmente la métrica original del verso de arte mayor, aunque no el esquema de la rima.
Centrándonos en el códice que lo contiene, se trata de una compilación con variedad de escritos alquímicos en latín, italiano y castellano, la mayoría no indican sus autores originales. Se aprecia un cierto interés por las composiciones líricas, entre las que encontramos: una "Canzione" en italiano atribuida a Regino Danielli
(29) , unas estrofas anónimas en castellano tituladas "Lapis" (30) y una composición sin firmar en italiano con el encabezamiento "Lapis Volgare" (31).
En las primeras hojas del códice vemos un largo título en inglés añadido por una pluma del siglo XIX que fecha el contenido general en las cercanías del año 1530 sin aportar datos sobre tal conclusión
(32).

 

- Ms A2 : Universidad de Yale, Mellon Collection, Ms 36, Siglo XVI, ff. 104v-107r.

Un segundo ejemplar es el de la misma Biblioteca de la Universidad de Yale, Mellon Collection, Ms 36.

Incipit, f. 104v: "Lapis ispanus alius - Como la dama che mova nel cielo che es Yxia del sol sin duda ...".
Explicit, f. 107r: " ...che moncho las encubres pues a lo tales non me e defendido. Finis".

Su datación es muy cercana a la del Ms A1 y el cuerpo del poema es el mismo. El encabezamiento de las coplas es "Lapis ispanus alius" y se halla precedido de otra poesía también en castellano titulada "Lapis ispanus" (f. 104) (33) que ya encontramos en el manuscrito A1 (f. 94v), aunque allí simplemente tenía el encabezamiento "Lapis". Como particularidad, el códice luce una extensa serie de dibujos de vasos y aparatos del laboratorio.

 

- Ms A3 : Londres, Wellcome Institute, Ms 383, Siglo XVI, ff. 295r-298r.

Una tercera copia presenta los versos con la misma estructura, orden y forma que las anteriores.

Incipit, f. 295r: "Lapis ispanus alius - Como la dama che mova nel cielo che es Yxia del sol sin duda ...".
Explicit, f. 298r: " ...che moncho las encubres pues a lo tales non me e defendido. Finis".

 

- Ms A4 : Londres, Wellcome Institute, Ms 385, Siglo XVI, ff. 288r-290v.

Esta cuarta copia es de idénticas características que las ya citadas.

Incipit, f. 288r: "Como la dama che mova nel cielo che es Yxia del sol sin duda ...".
Explicit, f. 290v: " ...che moncho las encubres pues a lo tales non me e defendido. Finis

Estos cuatro manuscritos, junto a otros dos más que no incluyen las coplas (34) , conforman un conjunto de seis volúmenes transcritos por un mismo puño, si bien se aprecian variaciones significativas en la letra de algunos textos, con trazos mucho mejor construidos y definidos, por lo pudiera haberse recurrido en algunos momentos a un escribano profesional. En los tomos que conservan las primeras hojas el copista se identifica con las siglas "J. B. F.", interpretables como "Johannes Baptista Fratris" autor de varios de los tratados que podemos encontrar dentro de la larga colección (35) . El códice que hemos marcado como A2 resulta especialmente interesante, pues en su primer folio exhibe un escudo franciscano de la misma factura que el resto del contenido y debajo se puede leer: "Liber quartus J:B:F:", similar presentación también aparece en otros ejemplares completos (36). Respecto a la localización geográfica, el autor dice estar estrechamente vinculado a Génova en comentarios de dos de sus obras: "Experimenta extracta de libris medicorum et philosophorum" (37) y "Apologia Jo[annis] Ba[ptis]tae contra Jo[annem] Bracesco [sic] pro erroribus per ipsium fatis [sic] in espositione Geberis" (38). A la hora de intentar fijar una datación, y siempre considerando que el tipo de letra es del siglo XVI, hay que ponderar varios factores. En primer lugar, llama poderosamente la atención que los diferentes manuscritos repitan muchos de los textos, aunque no de forma idéntica, de manera que en varios de ellos se añaden datos nuevos acerca de los autores, prólogos o detalles sobre la obra en cuestión y las circunstancias de su composición (39). Comparando de este modo los seis manuscritos parece evidente que se han transcrito consecutivamente pero durante un periodo de cierta extensión. El Ms 35 de la Mellon Collection ("Liber primus" en su inicio, formado en su mayoría por textos anónimos) sería la compilación más temprana, mientras que el resto de manuscritos parecen los más tardíos, pues exhiben un tipo de letra de trazo más rápido y una palmaria dependencia en la selección de los textos con la "Verae alchemiae artisque metallicae..." publicada por Guillermo Gratarolo en 1561. La orden exacto de su redacción sería: 1º Mellon Ms. 35; 2º Wellcome Ms. 383; 3º Wellcome Ms. 384; 4º Mellon Ms. 36; 5º Wellcome Ms. 384; 6º Mellon Ms. 34. A partir de todos estos elementos creemos correcta una fecha de redacción para los seis tomos que se situaría entre 1560 y 1570. Nunca anterior, pues aunque la mayoría de los autores reunidos son medievales (Geber latino, Khalid, pseudo-Arnau de Vilanova, Ferrarius, Odomarus, John Dastin, pseudo-Ramón Llull, Hortulanus, Rosinus, Alphidius, etc.), hay también escritos tomados del humanista y astrólogo Giovanni Nani de Viterbo (1432-1502) y de alquimistas de la primera mitad del siglo XVI como Johannes Baptista Montanus (1498-1551) o Johannes Pantheus (40) . El texto más tardío que se alude es "La Espositione di Geber Philosopho" de Giovanni Bracesco da Orzi Nuovi (1482-1555?), natural de Brescia y vinculado al priorato de San Secondo (41). La referencia aparece en un tratado del copista titulado "Apologia Jo[annis] Ba[ptis]tae contra Jo[annem] Bracesco [sic] pro erroribus per ipsium fatis [sic] in espositione Geberis" (42). Este escrito se introduce en la polémica agitada a mediados del siglo XVI por Giovanni Tauladano y Gaudenzio Merula como firme oposición a las teorías de "La Espositione" de Bracesco que proponían el hierro metálico como materia básica de la obra alquímica (43) . Con una base argumental similar a la de nuestro copista le recriminan el carácter quimérico de su investigación y la gran obscuridad de su lenguaje.
Otro aspecto que nos ha interesado es comprobar el tipo de textos reproducidos y la forma en la que se hizo la transcripción. Las obras medievales son multitud en los dos tomos más tardíos y seguramente tienen como fuente a Gratarolo, no obstante en los otros cuatro ejemplares previos hay abundantes tratados sin firmar en italiano, alguno en latín, y varios muy poco conocidos de finales del siglo XV y de la primera mitad del XVI. El progresivo incremento en los datos que aporta sobre las plumas italianas siempre que puede, códice a códice, demuestra que el compilador se dedicó a buscar información en su entorno sobre los textos. ¿Cuál fue ese ámbito sociocultural en el que localizó los originales?. En este sentido debemos señalar que en los seis manuscritos destaca una forma inusual de deletreo, evitando en muchas palabras latinas e italianas la utilización de las grafías "x" y "c" (esta última substituida a veces por la "s"), lo que plantea su posible ciudadanía en alguna región de fuerte influencia castellana, esto es, Nápoles, Cerdeña o Sicilia
(44). Tenemos noticia de un Johannes Baptista Fratris de origen napolitano y residente en varias ciudades del norte de Italia, autor de un tratado preventivo contra la peste editado en Venecia en 1575 (45). La publicación de este manual se asocia con la terrible epidemia que asoló Palermo y Nápoles en ese mismo año. Su contenido lo incluye entre los libros de recetas y secretos medicinales cercanos a las ciencias ocultas vendidos por los ciarlatani en las plazas de las ciudades italianas (46). Nuestro copista parece coincidir también con este autor en su aproximación a la formación médica (47) y en un evidente interés por el tratamiento de la peste (48). Creemos que en ambos casos pudiera tratarse de la misma persona.
Toda esta familia de cuatro copias nos resulta de gran importancia ya que representan los primeros testimonios de las "Coplas", distribuidos en tierras italianas de influencia española y fechables entre 1560 y 1570.

 

- Ms B : Barcelona (España), Col. Priv. Jordi Puig, Leg. 15, Siglo XVI (1571), ff. 134v-137r.

Una quinta reproducción, ligeramente posterior a las anteriores, se conserva en la librería particular del coleccionista catalán Jordi Puig.

Incipit, f. 134v: "Son agora las Coplas de la Piedra Philosophal compuestas por Luis Carroz | Toma la dama que mora en el çielo...".
Explicit, f. 137r: "...pues a los tales no me es defendido | Finis | + | Laus deo semper et ubque gloria".

Pertenecen a un conjunto de poesías transcritas en Palermo en 1571 por alguien que firma "Guiliolo Alderoti" (49) . Ninguna de las otras obras guardan relación con la temática transmutatoria. La mayoría son sonetos alegóricos escritos bajo la influencia de Virgilio, Horacio y Petrarca (50). Entre los autores italianos nos topamos con composiciones de Giambattista Amalteo (1505-1573), Agnolo Bronzino (1503-1572) pintor y poeta florentino, Laura Battiferri (1523-158?), esposa del arquitecto y escultor Bartolomeo Ammanati (1511–1592), así como varias letras del célebre humanista Leon Battista Alberti (1404-1472) (51). Las rimas castellanas son escasas. Se reducen a dos fragmentos del "Cancionero de Estuñiga" recopilado originalmente en Nápoles entre 1460-1463; varias estrofas de genio dantesco pertenecientes al "Cancionero de Baena" formado por Juan Alfonso de Baena entre 1445-1453 y finalmente nuestras "Coplas", que destacan por su verso largo de rasgo castellano. Se trata, en resumen, de un compendio poético donde se refleja un interés del compilador por las formas alegóricas en la lírica y no por la alquimia en si.

Centrándonos en nuestras coplas, el primer elemento a destacar es un dato sobre su autor en el encabezamiento cuando dice que fueron: "...compuestas por Luis Carroz ". Hablaremos más adelante sobre su posible identidad. El contenido del poema es introducido por el copista italiano con la frase: "Amirabi discorso nel quale si contiene oculti secreti chimici". Un detalle significativo son las tachaduras de los tres versos que evocan una dama de origen celeste: (1:1) "Toma la dama que mora en el çielo ", (2:3,4) "mas es una dama que mora en el çielo | de alli nos la baxan esta Obra rreal". Respecto al texto, es la reproducción más temprana redactada completamente en castellano. Aparece prácticamente sin acentuar y con un escaso uso de los signos de puntuación. Apenas se aprecia alguna vírgula con el significado de pausa breve. Es un relato compuesto por veintisiete octavas, las mismas y en el mismo orden que en los manuscritos anteriores. Se respeta siempre la rima consonante. Respecto al tipo de estrofas, se trata de unas coplas de arte mayor, de gestación y florecimiento típicamente castellano.

 

- Ms C : Manuscrito de Lorenzo Granita, Siglo XVI (?).

Citamos en un apartado anterior la versión de las "Coplas" editada por el médico boloñés Leonardo Fioravanti (52) . Como ya detallamos se trata de una redacción en un castellano peculiar lleno de voces italianas:

Incipit: "Toma la dama che mora nel cielo...".
Expicit: "...pues a los tales non me e defendido ".

Gracias a las informaciones del propio Fioravanti tenemos referencias sobre el manuscrito original (hoy perdido) a partir del cual realizó la transcripción. Explicando la forma en la que obtuvo la poesía comenta: "...io hago saber como una vez yze una faita mui grande en mi honra y fue que siendo io en la Corte del Católico Rei Feiipe en Ispagna, vn Cauallier Italiano me ha mostro la orden con que se puode azer la piedra de los Filosofos para con ella azer todos los metallos del mundo, en purissimo oro de veinte y dos chilates, el meyor que se pueda allar, y ansi como el dicho cauallier me vuo dado su discurso sobre tal materia, me alze con ello, y se lo hurte, y haora porque el mundo se pueda tambien aprouechar dello lo e quiso escreuir á comun beneficio de todos con esta condicion de todos los que haran horo y plata sean tenidos dar de cada diez vno al Cauallero á quien hurte la receta, lo cual se llama el Señor Lorenzo Granita, que esta en Madrid al Carmeno y esto lo quiero dir claro..." (53) .
El boloñés define el texto como una "receta" para preparar cierta "piedra de los filósofos" que transmutaría todos los metales en oro con una pureza aproximada de veintidós quilates. Dice haberla obtenido durante su estancia en la Corte española, lo que nos sitúa entre los años 1576 y 1577
(54) . No menciona el autor, aunque sí su propietario: un miembro de la nobleza media de Salerno llamado Lorenzo Granita afincado por aquellas fechas en Madrid. Este Granita debía pertenecer sin duda al grupo de aficionados a la alquimia que pululaban entonces por el espacio geográfico hispano-italiano, entre los que menciona Fioravanti a varios personajes más (55) , aunque lo coloca en un grado superior por su habilidad en la preparación de la "piedra filosofal", llegando a decir que su capacidad era igual a la de Ramón Llull, Arnau de Vilanova o Johannes de Rupescissa (56) .
Estamos ante la primera copia emplazable en tierras peninsulares de manos de un Salernitano. Aunque la versión presente numerosas palabras italianas no resulta extraño que Fioravanti la defina como "escrita en castellano", ya que estamos en un periodo de formalización de la lengua, que no cuajará hasta bien entrado el siglo XVII, en el que los textos incorporan sin pautas establecidas palabras originarias de tantos idiomas como contactos políticos tenía el imperio español. Esta versión, en fin, entronca con la familia de Mss A por su idéntica organización interna, su ruptura de la estructura de arte mayor en algunas de sus estrofas y sus rasgos italianizantes.

 

- Ms D : Biblioteca Nacional de Madrid, Ms 2151, siglo XVII (1612), ff. 147r-150v.

Incipit, f. 147r: "Toma la dama que mora en el çielo...".
Explicit, f. 150v: "...y te hallaras del todo burlado | Finis veritatis ".

Es la versión más conocida (57) , sobre todo desde la transcripción que hiciese José Ramón de Luanco en 1889 (58) . Está redactada completamente en castellano, aunque su gramática no presenta los rasgos de mayor antigüedad del Ms B. Así, por ejemplo, no se emplea la grafía - rr - para representar la alveolar vibrante múltiple en posición inicial ni tras consonante nasal. En el caso de la fricativa prepalatal - x, y, j, g - se observa un avance en el ensordecimiento de la sonora. De igual modo, aunque el copista trata de conservar los antiguos vocablos que emplean la -x- en posición intervocálica y que suelen proceder de una evolución normal del latín, se desliza un ensordecimiento de la sonora hacia la -j-, por ejemplo: "roja" (19:5) frente a "roxo" (22:6).
La estructura interna incluye notables variaciones respecto a sus precedentes. Lleva una atribución explícita en su encabezamiento que dice: "COPLAS DE DON LVIS DE ÇENTELLAS | SOBRE LA PIEDRA PHILOSOPHAL SON 28 COPLAS". Añade al final una estrofa nueva para completar un total de veintiocho:

No quiero me culpes en lo que e hablado
pues çierto te digo que es çierta verdad
ni en estos mis verssos no ay contrariedad
ni como los otros lo digo doblado
procura entender con mucho cuydado
el vaso y materias en que se a de obrar
y no lo haciendo tu te as de engañar
y te hallaras del todo burlado.

El orden estrófico se ve alterado al permutar las coplas 6, 7, 8, 9, 10 y 11 por la 12, 13, 14, 15, 16 y 17 respectivamente. Sabiendo que los ejemplares del siglo XVI presentan las octavas en grupos de cinco o seis en cada página creemos que la transposición estrófica se debe a un error del copista al saltar en su transcripción una carilla que decide recuperar más tarde como continuación.
El manuscrito al que pertenece está integrado por otros tratados de alquimia y mereció una descripción más pausada del propio Luanco
(59) y sobre todo de Francisco Javier Puerto Sarmiento (60). Fue transcrito en la ciudad de Sevilla en 1612 (61). Muestra dos tipos de letra del siglo XVII. La primera llega hasta el folio 50r y el nombre de su transcriptor aparece en el folio 31r ("Cosmus Damianus Vantalloli Tarrachonensis") (62); la segunda continúa hasta el final del códice, incluyendo las "Coplas", y deja su firma en el folio 146v : "Francisco de Ancona napolitanus, medicus et chirurgus, philosophus et chimicus". Ancona fue un médico procedente del Reino de Nápoles. Obtuvo cierto reconocimiento como terapeuta en la ciudad de Sevilla, donde residió largo tiempo. Redactó una pequeña "Apología médica", dedicada al Duque de Alcalá Don Hernando Henríquez de Ribera, en la que defiende el provecho rehabilitador del argento vivo aplicado por vía externa (63).
Prácticamente todos los contenidos del códice madrileño añadidos por Francisco de Ancona tienen origen en manuscritos de tradición italiana, tanto los discursos de Cristoforo Parisiense
(64),  como los "Dicta et enigmata philosophorum sapientis" (65) , o la "Obra de Celidonia" y el texto "Virtudes de la Piedra Filosofal" (66). Por esta razón parece lógico deducir que Ancona recogiese las "Coplas" de fuentes similares a las del resto de los tratados alquímicos, unas fuentes distribuidas en la Italia renacentista con amplias zonas vinculadas a intereses políticos, económicos y territoriales de España.

 

- Ms E : Archivo de la Catedral de Córdoba, Ms 162, med. siglo XVII, ff. 27r-31r.

Incipit: "Toma la dama que nace en el cielo...".
Explicit: "...con el magisterio que aquí se ha acabado | Laudetur Xtus ".

Se trata de una versión descubierta y editada por el profesor Antonio Cruz Casado (67) . Es la copia más tardía. Se conserva junto a diversas obras seudo-Arnaldianas en un códice sobre alquimia transcrito a mediados de siglo XVII (68).
En primer lugar destaca la referencia desde el mismo encabezamiento a "Don Luis de Centelles". El orden estrófico es el mismo que en los Mss A, B y C. No obstante, su contenido no se limita a 27 octavas, bien al contrario, también incluye la copla número 28 que figura en el Ms D y otras cinco más como cierre del poema, cada una con un encabezamiento propio: "Materia", "Preparacion", "Disolucion", "Fijacion", "Augmentatio". Este nuevo añadido no nos es en absoluto desconocido. Son cinco versos en castellano que circulaban de forma independiente desde la segunda mitad del siglo XVI. Lo podemos comprobar en el manuscrito 7443 de la Biblioteca Nacional donde aparecen como una poesía anónima que el copista dice haber recibido desde Madrid en el año 1568
(69). También se encuentra en el manuscrito 2151, aunque intercalado entre varias obras de Cristoforo Parisiense y sin señalar tampoco el nombre de su autor (70). Ya hemos argumentado que en el estado actual de las investigaciones no puede serle atribuido a Centelles, algo ya advertido por José Ramón de Luanco, si bien queremos dejar indicado aquí un nuevo detalle que respalda esta tesis: ha de tenerse muy en cuenta que tanto el Ms 7443 como el Ms 2151 contienen escritos asignados expresamente a Luis de Centelles mientras que estas cinco estrofas figuran en ambos de forma independiente y sin atribución explícita por parte de los diferentes copistas.

 

- Conclusiones sobre el Origen y la Difusión del poema

 

Las ocho copias localizadas nos permiten trazar una tradición textual que queda representada en el siguiente esquema.

 

(En rojo las versiones cuya existencia suponemos aunque no hemos logrado localizar)

 

Habría que comenzar por separar dos estratos claramente diferenciados: las versiones del siglo XVI (A1, A2, A3, A4, B, C) de las del siglo XVII (D y E). Las seis primeras, más tempranas, concuerdan plenamente en el orden y número de los versos. Parece evidente que estamos ante la estructura inicial de la composición.

Hemos marcado como Ms O la versión original, no encontrada por nosotros. Basándonos en las variantes del siglo XVI estaría formada por 27 coplas de Arte Mayor. Su idioma sería el castellano tal y como se desprende de la norma métrica seguida. Figuraría con el nombre de su autor, "Luis Carroz", "Luis de Centelles" o tal vez el más extenso "Luis Carroz y de Centelles", luego abreviado, incluso suprimido, por los posteriores copistas (71) . Considerando la datación de los códices más antiguos que conocemos (1560-1570) establecemos tentativamente para este original una fecha de redacción en torno a 1550-1560, nunca anterior, ya que carecemos de testimonios documentales o indicios técnicos que nos permitan remontarnos más atrás en el tiempo. A partir de la obra primera se producen dos recensiones posteriores.

Por un lado tenemos la familia de Mss A. Sus alteraciones se hacen patentes al comprobar que la introducción de voces y giros italianos quiebran la métrica, apreciándose un desajuste mayor entre molde estrófico y materia poética. Este tipo de versos que mezclan palabras italianas en un esquema métrico netamente castellano se dieron en algunas regiones de amplia influencia española como Nápoles y Cerdeña (72). El manuscrito de Lorenzo Granita (Ms C), editado por Fioravanti pertenece a esta rama italianizada en el vocabulario, aunque se trata de una reproducción ligeramente posterior a los Mss A tal y como denota la grafía algo más actualizada de algunas palabras castellanas. Todo este conjunto de copias nos habla de una distribución temprana del poema en tierras de Italia.

De forma paralela a esta rama italiana se encuentra otra netamente castellana plasmada en el Ms B. Consideramos esta copia la más cercana al original por mantener un mayor respeto a los aspectos métricos. De igual modo, su gramática es la más arcaica y no comparte con otras copias unos claros síntomas de renovación en los grafemas propios del último tercio del siglo XVI (73) . Entre las grafías vocálicas tenemos el fonema vocálico velar de abertura mínima -u- en posición interior de palabra tanto para el uso vocálico como consonántico, como sucede en (24:8) "acauado", (17:3) "enueuiçion", (8:3) "causa", y aunque se nota una marcada tendencia a emplear la grafía "v" para la posición consonántica inicial, (16:2) "vida", (16:8) "vez", (9:7) "vestidos", también hay claras excepciones: (11:6) "uieres". Se emplea la grafía latinizante para la labiodental fricativa sorda con representación "ph" en latín, (6:6) "Philosophía", (título) "Philosophal", algo que no se correspondía con la fonética de la época y que empezaba a ser criticado por algunos preceptistas como Valdés y Nebrija. Encontramos la grafía "rr" para representar la alveolar vibrante múltiple en posición inicial. Hay una inclinación etimologista y latinizante en la conservación de grupos consonánticos latinos como "sç" en (5:8), "conosçer", y el grupo "cç" en (11:2) "perfecçion", (18:3) "resurrecçion", (26:5) "proyecçion" (74) . Se hace evidente una total confusión entre la bilabial oclusiva sonora y labiodental fricativa sonora -b- y -v-, dos fonemas medievales que pierden todos su rasgos distintivos a finales del siglo XV. Se demuestra un predominio de la grafía "ç" en posición intervocálica para representar la fricativa sorda y sonora -s-, -ç- y -z-. Se utiliza grafía "x" para la fricativa prepalatal sonora -j- en posición intervocálica como evolución normal del fonema en latín y no en el castellano del momento: (2:4) "baxan", (3:3) "exerçiçio", (5:4) "muxer". Son, por lo tanto, numerosos los detalles que, reunidos, hablan de que estamos ante una versión más cercana al original, tal y como confirma la fecha del códice que lo incluye (año 1571).

Las otras dos copias castellanas que conocemos (Ms D y Ms E) pertenecen ya al siglo XVII. Al añadir ambas un verso final idéntico y totalmente nuevo suponemos que debió existir una fuente anterior que lo incluyera libremente y que no hemos podido localizar (Ms Z). El Ms D estaría basado en esa versión de 28 coplas, aunque como hemos visto altera erróneamente el orden estrófico. Por otra parte el Ms E sí respeta la disposición de los versos pero incorpora libremente cinco octavas a modo de complemento.

Una vez trazada la tradición textual podemos añadir que los manuscritos recopilados nos advierten también sobre el tipo de ambientes en los que el poema fue inicialmente distribuido. En el siglo XVI, hemos visto que las cuatro copias de la familia de Mss A son obra del napolitano Johannes Baptista Fr, el contenido del Ms C es utilizado y exhibido por el salernitano Lorenzo Granita como una receta secreta para la obtención de oro, mientras, la primera versión impresa corre a cargo del boloñés Leonardo Fioravanti con idénticos fines. Todos estos personajes pertenecen al conjunto de los popularmente denominados "professorini di secreti" entre los que se podrían citar también a Isabella Cortese, Gabriele Falopio, Giovanni Battista Zapata, Girolamo Ruscelli, Pietro Bairo, Giovanni Ventura Rosetti... (75) . La obra desarrollada por estos autores está formada por algunos de los llamados "libros de secretos", manuales desde los que se pretendían transmitir a los posibles lectores procedimientos reservados que producirían un beneficio práctico. La avalancha de este modelo de compendios desde el siglo XVI, prolongada durante la primera mitad del XVII, traslada un tipo de literatura singular y muy poco estudiada que implica un particular modo de entender lo que sería el desarrollo de un conocimiento considerado real y efectivo. En la gran mayoría de los casos están lejos de la idea de la "sciencia" como la búsqueda de una demostración lógica a los procesos naturales. Se inclinan por recoger, comentar, en algunos casos ampliar o "reinventar", antiguas recetas y técnicas a las que definen como "secretos de la naturaleza". Son manuales en los que se conglutinan prescripciones o procedimientos expresados bajo un evidente sentido pragmático y funcional, por lo que sus autores pretenden explotar una imagen de experimentadores o de "nuevos filósofos" empíricos. Las disciplinas que abarcan pueden ser de lo más variadas: cosmética, cocina, metalurgia, alquimia, botánica, aunque generalmente destacan las dedicadas en grado variable a la medicina y la terapéutica. Son libros de patente vocación populista, vendidos en las plazas de las ciudades italianas por los "montibanchi" y los "ciarlatani" con gran farándula. Algunos conocieron bastantes ediciones no sólo en Italia, sino también en Francia, España y Alemania (76) . En los casos de Fioravanti y de Lorenzo Granita hemos visto explícitamente su exhibición de las "Coplas" de Centelles como uno de los secretos prácticos reunidos por ellos. En el caso del boloñés confiesa haberlo robado para hacerlo público en su impreso con el objetivo, según dice, de dar una oportunidad a toda aquella persona que quiera conocer la forma de fabricar oro.

 

III. 2. - Contenido: el estilo, las fuentes y las teorías alquímicas.

 

Para un análisis de la forma y contenido de los versos nuestro patrón será el Ms B al mostrarse como la copia que parece más fiel al original no localizado.

 

III.2.a. - Métrica, estructura estrófica, disposición léxica y sintáctica.

El verso es largo (6+6), de rima consonante, típico de la poesía narrativa de tema didáctico y doctrinal (77) . Sigue una estructura binaria de la octava y salvo muy raras excepciones es posible separar mediante una pausa significativa las estrofas, pues cada una se dedica a una sola incidencia en la transformación alquímica. Desde el punto de vista de la estructura estrófica se trata de unas coplas de arte mayor, esto es, ocho versos dodecasílabos de esquema ABBAACCA. Aunque esta forma poética llega a su punto más alto con la obra de Juan de Mena y es típica del siglo XV continúa también en la centuria siguiente como reivindicación de una tradición lírica solemne en lengua castellana, pensemos, por ejemplo, en "Las Trecientas" de Luis Hurtado de Toledo (c.1523-1598), obra elevada cuyo lugar en la literatura renacentista de nuestro país está todavía por determinar y valorar en detalle (78).

Queda clara la intención de nuestro autor por mostrar una fidelidad a la métrica y unidad estrófica medievales. No entra para nada en experimentar los grandes hallazgos que Boscán y Garcilaso estaban llevando a cabo en la primera mitad del XVI implantando nuevos metros y originales letras italianizantes con el endecasílabo como protagonista.

La elección de las coplas de arte mayor debe haber sido bastante meditada por nuestro autor, pues es un tipo de versificación mayestática y muy complicada (79). Lo importante es su esquema acentual, es decir, cada hemistiquio debe tener dos hiptus (dos acentos separados por otras tantas sílabas átonas). Su rígida poética obligaba a llevar a cabo toda una serie de duras manipulaciones de la materia lírica para respetar la norma métrica. Por esta razón nos vamos topando con decisiones por parte del poeta que pueden desconcertar en un primer vistazo, como la repetición de palabras en un mismo verso (3:7): "el hijo mas noble y mas prinçipal", o la continua alteración del orden sintáctico colocando el verbo al final de muchos de los versos, p. ej. (2:7): "y los imperfettos perfettos tornamos", lo que resulta un indicio de menor criterio estilístico en el autor y una razón directa de reproche para lectores posteriores, ya que se trata de una posición conscientemente evitada desde antiguo en la lengua castellana (80) . Por lo general no toda pausa versal coincide con una pausa morfosintáctica y le resulta imposible evitar bruscas alteraciones en forma de encabalgamientos que quiebran unidades sintácticas complementarias. Algunas muestras pueden ser:

(3:7,8)
el hijo mas noble y mas prinçipal
que el padre, y la madre, aunque es muy preçiossa

(18:1,2)
Despues que al cuerpo ya hubieres cobrado
su Alma, perfetta por la imbebiçion

(20:1,2)
Mas esto ocultaron los sabios que fueron
con mucha cautela en sus escrituras

(27:1,2)
Con esto que escauo, se muestra cumplida
la Obra que e visto con mucha verdad

Las expresiones bimembres, típicamente renacentistas y que cuentan con una larga tradición en la literatura desde la Antigüedad, son otro recurso sintáctico relevante. Resulta ser un modo eficaz y sencillo para ajustar la materia poética en el complejo molde métrico elegido. La bimenbración coordina la introducción de vocablos de contenido léxico muy similar que habitualmente parecen prescindibles, p. ej. (9:6): "do siempre a destar y permaneçer"; (6:3): "no se te oluide y aquesto procura"; (9:3): "miralo mucho no muera y peresca". También se acusa el empleo de voces y expresiones que se adjuntan a los sustantivos sin modificar su alcance significativo y cuyo fin es esencialmente amplificativo. No en vano la "amplificatio" es la herramienta idónea en la versificación de arte mayor al estirar un concepto hasta completar el patrón métrico.

La complicación explícita del tipo de estrofa hace patente una cierta preocupación de Centelles por el tono de su discurso, básicamente por elegir para su tema un metro considerado noble, aunque lo elabora con poca habilidad, de tal modo que si contemplamos el conjunto final desde un punto de vista puramente estilístico hay evidentes errores ya señalados (81) y desde luego no se puede decir que sea una composición que destaque por su belleza formal. Pensamos que con su verso mayor y sus atavismos medievales el poeta persigue dar a su obra un estilo antiguo propio de la lírica tradicional castellana, y por ende establecer un vínculo con la personalidad de lo noble y de lo pretérito, siempre respetada entre los alquimistas (82) .

Es muy importante reparar también en el hecho de que el otro metro habitual en castellano antiguo, el octosílabo, tenía entonces en tierras de España un tono popular y cancioneril que nuestro autor declina a favor de una composición más difícil pero que él considera idónea por su atmósfera grave y doctrinal, igualmente escogida, recordémoslo, en la otra gran poesía alquímica castellana de los siglos XV y XVI: "El Libro del Tesoro" (83).

Tras lo analizado en este apartado hemos de concluir que, desde nuestro punto de vista, el fondo argumental y el contenido didáctico es la parte más trabajada por el autor. Por el contrario, la calidad estilística es baja y la composición resulta bastante bronca en los aspectos formales, ajena a la tendencia general de la literatura y la teoría poética del Renacimiento que concibe cada vez más la obra literaria como objeto substancialmente artístico (84). Bien es cierto que entre las composiciones de tema alquímico siempre destaca el didactismo del arte frente al cultivo de la obra literaria como un todo soberano cuyo ideal es el de la belleza poética, no obstante es evidente el esfuerzo de muchos alquimistas por adentrarse en la nueva concepción literaria de la lírica renacentista basada en el valor autónomo de lo artístico. Ejemplo paradigmático en la búsqueda del preciosismo argumentativo y formal son los "Chrysopoeiae libri III" de Augurello; redactados en un latín elegante y con gran virtuosismo métrico, su belleza poética radica en la elección de los vocablos, en la composición argumentativa del poema (inventio y elocutio) y en la reactivación de temas mitológicos, elementos todos que lo convirtieron en un clásico para sus contemporáneos (85) .

Las "Coplas" de Centelles, aun apareciendo como una obra áspera, muy breve y modesta, es sin duda muy densa en contenidos, con gran cantidad de imágenes que, como veremos a continuación, persiguen en su reunión una coherencia respecto a los tratados clásicos de alquimia con el fin de resultar grata a los ilustrados en el tema. El resultado acarrea una difícil comprensión para los lectores ajenos a una materia que verán fundamentalmente como un obscuro y complejo programa alegórico de tipo técnico (86). Veamos la temática.

 

III.2.b. - La temática, las teorías alquímicas y sus fuentes.

Respecto a la trama, en líneas generales se puede incluir entre los poemas de tipo alegórico, en este caso sería la figuración de un proceso alquímico. Se puede considerar de nuevo deudor de los versos de arte mayor del siglo XV que incorporaron las formas alegóricas italianas a la poesía castellana (87) .

La devoción ejemplar de nuestro compositor hacia su dama-lapis es el motivo central, se trata de un sentimiento que le provoca un ímpetu ascensional, un acercamiento a lo que es su tema y sobre todo su anhelo. Se nos muestra siempre al servicio de esa doncella, operando sobre ella con gran veneración con el fin de hacerla: (23:8) "lapis perfetto y muy fino". En todos estos puntos se atisba una síntesis de los viejos temas medievales del amor cortés, como la perfección y el encanto supremo de la dama o las pautas codificadas del enamorado (en este caso el redactor del poema) con algunos de los nuevos tonos postrados surgidos en el "dolce stil nuovo" y en la filosofía neoplatónica del amor de la que Picco della Mirandola o Marsilio Ficino pueden servir de ejemplo. Este lenguaje poético, desarrollado con talento y grandes innovaciones estilísticas en la primera mitad del siglo XVI por Boscán, Garcilaso, Gregorio Silvestre, Hernando de Acuña, mantiene en el caso de Centelles todas las reticencias métricas de los autores apegados a los viejos hábitos formales de la poesía castellana: coplas reales, pie quebrado, canciones y glosas, "decires" y la tópica cancioneril que sigue cultivándose con vitalidad y que se difunde ampliamente desde 1511 como práctica cortesana de la poesía en el "Cancionero General" de Hernando del Castillo. Desde el escenario de la nobleza grande y pequeña (con la que nuestro autor pudiera estar vinculado de algún modo) se asoman estas cortas producciones tradicionales en forma de cancioncillas, romances o, como en nuestro caso, coplas, pequeñas obritas todas transmitidas en pliegos sueltos o en manuscritos misceláneos.

El amor cortes como modo argumental para describir la elaboración y las propiedades de la piedra filosofal persigue convertir la materia del alquimista en un elemento idealizado, superior, al cual el versificador rinde culto detallando sus transformaciones y sus virtudes finales. Característico de este estilo cortés es evitar hacer alusión al nombre de la dama, aunque sí se la describe profusamente, se indica el lugar donde podemos encontrarla (1:1) "...que mora en el çielo", se cita a su parentela (1:2) "ques hija del sol sin duda ninguna". El origen de estos recursos estilísticos está en la poesía provenzal del Bajo Medievo, y ya aparece en importantes estrofas alquímicas del siglo XV. En "La Fontaine des Amoureux de Science" de Jean de la Fontaine vemos a la "Naturaleza" loada a modo de dama ejemplar (88) :

Celle fontaine de valeur
Est à vne dame d'honneur,
Laquelle est Nature appellée,
Qui doibt estre moult honorée
Car par ell' toute chose est faicte,
Et s'elle y fault, tost est deffaicte.
Long temps ha que fust establie
Celle Dame, ie vous affie :
Car aussi tost que Dieu eut faicts
Les Elemens qui sont parfaicts,
L'Eaue, l'Air, la Terre et le Feu,
Nature en tout parfaicte feu.
Sans Nature, ne peut plus croistre
Dedans la mer la petite oistre;
Car Nature est mere à la ronde
De toutes les choses du monde.
Noble chose est que de Nature.
Moult y bien appert à figure
De l'homme, que Nature ha faicte;
En quoy de rien ne s'est meffaicte.
Aussi fait-il en plusieurs choses
Qui par Nature sont descloses :
Oyseaux, arbres, bestes, fleurettes,
Du tout par Nature sont faictes;

Marcadas ya las sencillas vetas estéticas manejadas por el poeta entramos ahora en el análisis del contenido alquímico en sí, señalando las fuentes doctrinales en materia de alquimia. Para ello nos resultará de gran utilidad apartarnos un momento de las coplas y centrar nuestra atención en la carta de Centelles al Dr. Manresa (89) . En esta correspondencia privada es sobresaliente el gusto de nuestro autor por apoyarse en numerosas autoridades. Encontramos en su disputa epistolar con Manresa un evidente esfuerzo por realizar un amplio despliegue bibliográfico con el fin de afirmar sus teorías presentándose como un buen conocedor de numerosos tratados medievales, registrando sus lecturas, parafraseando y citando en abundancia. Su comportamiento nos viene muy bien ya que nos ayuda a conocer sus obras más apreciadas. Alude varias veces al pseudo-Arnau de Vilanova, especialmente su "Rosarium philosophorum", y añade en cierto momento que la enseñanza de este libro se sigue: "...en todas sus obras". Esta última afirmación indica que debía manejar otros tratados de menor extensión atribuidos al médico valenciano. Desafortunadamente no nos detalla los títulos. Si atendemos a las indicaciones de Antoine Calvet sobre la obra pseudo-Arnaldiana divulgada en el siglo XVI hemos de considerar otros cinco textos de importante eco: "Epistola de alquimia ad regem Neapolitanam"; "Nouum Lumen"; "Perfectum magisterium et Gaudium ad Aragonum Regem sub titulo Flos Florum..."; "Cathena aurea" y el muy breve "Testamentum" (90) . Otra "....famosa autoridad..." reivindicada es la del pseudo-Llull, más concretamente recomienda la atenta lectura del complejo "Testamentum" y del "Codicillus". Aparece también el nombre de Morienus Romanus junto a una frase extractada del "Liber de Compositione Alchimie". De igual modo encontramos la mención de "...S. Thomas in libro de ese et essencis...", esto es, del tratado "De esse et essentiis" falsamente atribuido desde finales del siglo XIV al Santo Tomás de Aquino. En otro momento echa mano de la "...autoridad de hermes qui fuit pater omnium alkimistarum que dize quod materia vilis est hoc est quod parui precij emitur et venalis vbique reperitur sed est magne potentie et virtutis et eciam dicit quod preciosus est ex vestibus siricum, ex vermibus, et mel, quod est sanitas homninum, ex apibus margarite...". Finalmente tenemos las citas de Aristóteles que podemos dividir en tres clases: una primera, cuando habla de "Aristotelis 4º metheorum", ha sido tomada del último de los "Aristotelis meteorologicum libri IV", reconocida obra cosmológica del filósofo estagirita que indicaría un interés de Centelles por ahondar en las disposiciones sobre la transmutación metálica desde las teorías de la filosofía clásica (91) ; en segundo lugar tenemos dos notas sobre cierto "Libro de secretis secretorum...". Se trata de la famosa traducción latina de un texto pseudo-Aristotélico árabe denominado "Sirr al-asrâr", presentado originalmente por Yuhanna Ibn al-Batrîq al califa abbasí al-Ma’mûn bajo la forma de un epístola sobre el arte de gobernar supuestamente enviada por el filósofo Aristóteles a su pupilo Alejandro Magno (92) . Finalmente tenemos una tercera cita, "Aristotiles dice sciant artificis alkimie non posse unam speciem in alteram transformare loquitur de speciebus in vniuersali...", perteneciente al tratado pseudo-Aristotélico "De congelatione et conglutinatione lapidum" (93). Tal y como veremos las pautas especulativas de algunos de estos tratados también están presentes en las coplas.

Centrándonos ya en el poema, la primera estrofa se refiere a la necesidad de tomar una dama, hija del sol según afirma, cuya morada es el cielo. Esta señal es posiblemente una de las más singulares de toda la composición y nos interesa ayudar a poder determinar su origen. La imagen de una dama celeste en los tratados alquímicos no es muy habitual antes del siglo XVI. En la centuria del XVII puede encontrarse como personificación alegórica de conceptos generales o abstractos como "La Naturaleza", "La Sabiduría" o "La Filosofía", caracterizada por medio de distintos accesorios (un libro en su mano, sentada en un trono) tal y como vemos en obras de Robert Fludd o Atanasius Kircher. No obstante, el valor semántico determinado por Centelles en su relato es muy diferente, ya que define un elemento concreto extraído y sometido a diversas manipulaciones durante el proceso de obtención de la piedra filosofal.

En el "Livre de la Sainte Trinité" redactado entre 1414-1418 podemos apreciar la coronación de la Virgen María por la Santísima Trinidad (94) , desafortunadamente para nosotros el sentido de la escena no tiene nada que ver con el precisado en la primera octava de Centelles, ya que describe una operación y no una substancia, concretamente trata la recomposición de los elementos aislados en una destilación previa (95). Mucho más interesante resulta otra pequeña representación del mismo libro en la que aparece una figuración clásica de la Inmaculada Concepción, de cuya cabeza surge una cruz en forma de lis en la que encontramos a Cristo crucificado (96). La efigie de una Inmaculada Concepción nos traslada una nítida visión medieval de la dama celeste, a saber, cubierta con un gran manto azul, con la luna bajo sus pies, envuelta en rayos de sol y con su cabeza rodeada de estrellas (97). Según el manuscrito se trata de una referencia a cierta materia, denominada "argento vivo" (lat. argentum vivum) que contiene en abundancia la materia primera o quintaesencia de los cuerpos metálicos (98). Con este dibujo parece que se han querido plasmar algunos principios tomados del "Testamentum" pseudo-Luliano, célebre tratado fechado en 1332, muchas veces citado en el "Livre de la Sainte Trinité", que defiende la existencia de una primigenia substancia pura, a la que denomina quintaesencia, en la que originalmente habría estado comprendida toda la naturaleza. El "Testamentum" toma diversos principios de la idea del éter aristotélico para proponer la teoría de que Dios creó los ángeles, los cuerpos celestes y el mundo elemental a partir de esta quintaesencia primera o materia esencial de todas la criaturas y substancias de la esfera natural, de tal forma que todas participarían de ella (99). Continuando así su planteamiento cosmológico el "Magister Testamentum" defiende la existencia de un espíritu de esta quintaesencia en las substancias naturales, comentando que en algunas se puede encontrar en mayor cantidad (100). Según se nos explica, se difundiría bajo una forma lumínica y la denomina "Luz", "Claridad" y "Luminosidad" (101). La quintaesencia así descrita sería una materia incorruptible, pura, muy sutil, etérea, que al encontrarse en todo pondría en contacto lo superior y lo inferior (102). Estamos ante una definición profundamente asimilada por los alquimistas de la Edad Media y del Renacimiento. La figura femenina audazmente innovada por el "Livre de la Sainte Trinité" corresponde a esa quintaesencia y la cruz en forma de lis pintada sobre su cabeza a la materia que la contiene en las condiciones ideales para el alquimista (103). Su virtud sin mácula, celeste e incorruptible ha sido definida por el autor del tratado planteando una libre analogía con la Inmaculada Concepción.

 

Nuremberg, Germanisches Nationalmuseum, Ms 80061, f. 76r.
Imagen procendente del "Livre de la Sainte trinité" (1414-1418).
Según el autor original, el Cristo crucificado, como en otras representaciones de esta misma obra,
es la imagen de cierto argento vivo identificado con la raíz o quintaesencia de los metales.
La Inmaculada Concepción que aparece en su base figura su pureza

 

Ha de matizarse que este concepto del "espíritu de la quintaesencia" alquímica se ve muy influenciado desde comienzos del siglo XVI por elementos platónicos y neoplatónicos desde las obras filosóficas de Masilio Ficino (1433-1499), más concretamente en su planteamiento acerca del denominado "espíritu del mundo" (lat. spiritus mundi) (104) . Esta aspiración ficiniana, concebida en un terreno fundamentalmente filosófico, atrajo vivamente a los alquimistas posteriores que decidieron asimilarla para sus textos con el fin de ampliar el esquema medieval sobre la quintaesencia alquímica. Desde Pierre Borel, quien recoge el "De Vita coelitus comparanda" en su catálogo como si de un escrito alquímico se tratase, hasta Andreas Libavius que lo inscribe entre las fuentes básicas de su "Examen sententiae Parisiensis scholae contra Alchymiam latae", son gran cantidad los alquimistas del siglo XVI que recurren a la teoría del spiritus mundi relacionándolo con el Spiritus quinta essentia (105) . Dentro de esta tendencia, y buscando imágenes similares de una mujer celeste en tiempos de Centelles, el "Liber de Arte Chymica" pseudo-Ficiniano dedica todo su capítulo sexto a hablar sobre el argento vivo "...que es el segundo componente de la Piedra..." y compara el espíritu que contiene con la imagen de una Virgen María en "plena gracia" (lat. gratia plena), esto es, Inmaculada (106). De igual modo, el médico alemán Leonhard Thurneisser (1531-1596) habla de dos substancias excepcionales a obtener por procedimientos alquímicos, una sulfurosa a la que denomina "azufre" y otra mercurial llamada "argento vivo". Thurneisser representa la quintaessencia contenida en el argento vivo como una dama celeste, virgen y luminosa (107) .

 

Representación de la quintaesencia del mercurio o argento vivo
según el tratado "Quinta essentia..." (1570) de Leonhard Thurneisser

 

Este tipo de disquisición continúa con David de Planis Campy (1589-1644) quien, en su "L'Ouverture de l'ecolle de philosophie transmutatoire metallique" habla también de esta virgen que, según sus palabras: "...n'est autre que l'Esprit Universel qui est dit en ce lieu Vierge, parce qu'il ne s'est point encore spécifié" (108).

Centelles parece comprenderse con esta corriente que interpreta, en grado variable según el autor, cierto "argento vivo" como el componente ideal que guarda en las condiciones adecuadas un supuesto "spiritus quinta essentia" o "spiritus mundi", principio esencial y común en todas las substancias, de forma pura y sutil, absolutamente necesario en la obra alquímica. El alquimista debería reconocer qué substancia cumple estas condiciones y tomarla como ingrediente básico en la elaboración de la piedra filosofal. Una vez identificada bastará una operación superficial para hacerla apta de cara a las siguientes operaciones, de ahí que Centelles mencione una preparación: (1:3,4) "...en bagno de Luna | do lave su cara de su negro velo". Esta teoría concuerda con la encendida defensa que hace en su carta al Dr. Manresa sobre la presencia de tal constituyente universal en los metales y la necesidad de aprender a extraerlo. El hecho de que abra su poema exigiendo precisamente la utilización de este agente nos recuerdan sus afirmaciones en la epístola cuando asevera que: "...lo primero que se a de buscar es esa materia prima que dicitur materia omnium metallorum..." (109) . La autoridad sobre la que se apoya ante Manresa es el tratado "De esse et essentia" donde se nos dice a propósito de la esencia metálica que la: "Materia substantialis omnium metallorum est argentum vivum, unde in aliquibus metallis est coagulatum debili congelatione, et in aliquibus forti" (110) . Si atendemos a las explicaciones enviadas por Centelles al Dr. Manresa sobre esta materia prima queda claro que, para él, este "argento vivo" no se refiere explícitamente al mercurio metálico sino a un elemento de cualidades mercuriales: "... tanpoco quiero que v. m. concurrat cum errore gentium que piense que el mercurio vulgar sit origo omnium metallorum por que el mercurio materia prima tiene de la cual es formado y subjecto a ella...". Encontramos así pleno significado al singular comienzo elegido por nuestro poeta, dedicado a glosar las virtudes de la "dama celeste" o argentum vivum que contendría la buscada quinta essentia en unas condiciones más adecuadas. En este sentido, el tratado anónimo "Aurora consurgens" (1400-1420), obra de difusión cierta en el siglo de Centelles, representa también a una doncella celeste, alada, reposando sobre la luna, vestida de blanco, rodeada por los rayos del sol y mostrando en su vientre una espada; en la segunda parte del tratado el autor lo asocia con el "argento vivo" dotado de un "alma vital", determinando que sería la quintaesencia con la que se debe operar (111). La viñeta se encuentra en relación con la "séptima parábola" de la primera parte, basada en una conversación entre dos amantes que viene a ser una alegoría in factis de los dos materiales básicos para la elaboración del lapis philosphorum. Uno aparece bajo un perfil femenino, sería esta dama, argento vivo o quintaesencia, el otro es representado por un hombre de naturaleza "sulfurosa" (112) .

La segunda estrofa hace un pequeño lapsus para entrar en la discusión sobre la procedencia de los materiales a utilizar, ya sean de origen animal, vegetal o mineral. Este tipo de debate es habitual en Europa desde el Medievo Latino, época en la que ciertos tratados de origen árabe llegados al viejo contienente, muy especialmente los Yabirianos, sostenían la posibilidad de producir diversidad de elixires transmutatorios a partir de substancias de los tres reinos naturales (113) . La creciente inclinación desde el siglo XIV a buscar un solo proceso general para obtener un único agente universal de transmutación lleva a polemizar con la multiplicidad de materiales de base defendida desde los escritos de inspiración Yabiriana. Nuestro poeta rechaza que se pueda partir de naturalezas animales o vegetales, por lo que se deduce una inclinación hacia el reino mineral. El planteamiento general de toda la segunda estrofa concuerda con los datos que tenemos sobre la obra de Centelles, siempre sindicada a la transmutación metálica. Asimismo, sabemos que las "Coplas", según sus contemporáneos, detallarían la elaboración de un agente transmutatorio cuya aplicación estaría definitivamente enfocada a un estadio mineral, tal y como precisan Johannes Baptista Fratris, Lorenzo Granita y Leonardo Fioravanti.
A continuación Centelles declara:

(2:5-8)
y para nosotros es tan Natural
que todos los metales con ella curamos
y los imperfettos perfettos tornamos
guardando secreto el mas principal

Se trata de la primera observación sobre las virtudes del producto que pretende obtener. Coincide con los versos finales que hablan del lapis transmutador en estos términos:

(24:5,6)
y todo sera mediçina forçado
con que los metales agora curemos

(25:5,6)
no ignores la forma para proçeder
sobre estos metales que se an de curar

Vemos aquí una analogía formulada por medio de una sencilla comparación entre la curación de los cuerpos y el proceso de conversión de un metal vil en otro más noble. La piedra filosofal obtenida hace las veces de "medicina" restablecedora del equilibrio interno en el metal. El germen de tal identificación no es, desde luego, particular de nuestro poeta. Viene de la mano del término "elixir" introducido por tratados de origen musulmán, como el "De Anima in arte alchimiae" o la "Epistola ad Hassen regem" y es asimilado rápidamente por obras seudoepigráficas de amplia difusión en las colecciones impresas del siglo XVI, las más significativas son el "Testamentum", el "Codicillus" y el "Rosarium" atribuido a Arnau de Vilanova. Las tres son fuentes ciertas de Centelles, pues las recomienda vivamente en su carta a Manresa, y todas ellas se refieren a la piedra filosofal o al agente que opera la transmutación con las expresiones "elixir" o "medicina" (114) .

Las octavas 3, 4, 5 y 6 retoman el curso de las operaciones. Se refieren a la dama descrita en la primera estrofa y exponen la necesidad unirla con otro elemento, para el que se elige una imagen masculina. El versificador incorpora entonces una escena basada en una serie de analogías sobre la procreación humana. Se trata de un programa alegórico impulsado desde los tratados medievales por la "visio Arislei" donde el argento vivo y el azufre, componentes básicos de los metales según los textos árabes, aparecen bajo la forma de una mujer, llamada Beya, y de un hombre, Gabertin. El corto escrito atribuido a Arisleo nos habla de una "prisión de vidrio", utilizando además una metáfora sobre el matrimonio y la cópula para reflejar la necesidad de unir dos naturalezas diferentes en un matraz. Este plan alegórico es ilustrado con profusión en varias láminas del tratado "Aurora consurgens" y, en menor medida, en algunos fragmentos del anónimo "Rosarium cum figuris" editado en 1550 (115) . De igual modo está presente en el "Testamentum" y en el "Codicillus", las fuentes más probables de Centelles donde, como plantea Chiara Crisciani: "...se promueve la generación de un «puer», un «infans»; el «lapis philosophorum» es generado de un argento vivo, «mater eius quae eum pascit et portavit» y del «sulphur quod formavit»" (116) .

Tras esta unión las estrofas 7 y 8 nos hablan sobre un proceso de "digestión" de la materia resultante, realizado durante un periodo de cuarenta días. Las condiciones emplazadas son que esté "debaxo del sello" y "al fuego del vientre del fuerte animal". La primera expresión se refiere a un matraz bien cerrado, un "vaso propio", tal y como exige para toda digestión alquímica la práctica del "Testamentum" (117) . La segunda matiza el grado de calor, concretamente el "ignis, seu caloris ventris equini" aparece indistintamente en otros tratados pseudo-Lulianos o pseudo-Arnaldianos como "ignis seu caloris fimi equini" e indica una temperatura similar a la del estiércol de caballo. Con los precisos termómetros modernos esta forma calcular la temperatura nos puede parecer de lo más increíble, pero era la más común en tiempos de Centelles, de hecho se mantuvo vigente hasta el siglo XVIII (118) . Como resultado de esta digestión la materia sobre la que se actúa presenta: (7:7,8) "sus carnes y huesos tan descoyuntados | que casi paresca ques cossa mortal". Esta imagen dramática del cuerpo mortecino con los miembros o huesos desencajados no está muy extendida en la literatura alquímica del XVI y creemos que tiene como fundamento casi seguro la anónima "Merlin allegoria profundissimum philosophici Lapidis arcanum perfecte contiens". En este relato la materia a elaborar es representada por un rey que en cierto momento comenta: "Quia sentio me gravatum & doleo caput, & omnia mea membra a me recedunt ut mihi videtur" (119) .

Las estrofas 9 y 10 representan la piedra o lapis ya confeccionada por medio de un tierno infante que es preciso nutrir con el fin de estimular su crecimiento. La estampa es de nuevo muy frecuente en los discursos medievales. Encontramos fuentes de origen árabe que describen diversas operaciones alquímicas por medio de analogías con la formación de feto humano, como el "Liber trium verborum" (120) . Tratados de gran difusión tales como el "Liber de Compositione Alchimie" de Morienus Romanus y la versión más extensa de la "Congregatio sive turba philosophorum" recogen un aforismo que compara el orden de las operaciones con la procreación humana, estableciendo que: "... de estas acciones la primera es la cópula, la segunda es a concepción, la tercera la preñez, la cuarta el alumbramiento o parto, la quinta la nutrición o educación...". La referencias más probables en el caso de Centelles son el "Rosarium philosophorum" pseudo-Arnaldiano y el "Testamentum" atribuido Llull, ambos expresan la necesidad de nutrir el "lapis" de modo similar a la cría de un niño. Del mismo modo es fuente muy probable el "Codicillus", tratado donde se muestra un copioso despliegue de metáforas sobre la gestación, el parto, la nutrición, vigilancia, cuidado y crianza del "niño" (121) .

Dentro del ulterior desarrollo del poema nuestro autor abandona las metáforas sobre la procreación del "infante", del "puer" resultado de la unión entre un azufre y un argento vivo denominados (5:4) "hombre y muger", (3:8) "padre y madre", (6:1) "los enamorados", e intencionadamente definidos al especificar que: (5:3) "hembra y macho los hemos nombrado". Se centra a partir de entonces en el compuesto resultante, retirando la figura del niño para establecer y explotar poéticamente su posible analogía con la imagen de una dama. Así comienza diciendo: (11:1-3) "pues blanca te digo primero ques ella, | quando magnesia la llaman por su nombre | que es tanto su ser y renombre". El "Testamentum" es algo confuso en la determinación del término "magnesia" ya que en algunas ocasiones dice que se trata simplemente del "argento vivo", como cuando atestigua que: "...spiritus quinte essencie est in nostra magnesia; et nostra magnesia est argentum vivum...", sin embargo en algunos pasajes posteriores parece matizar que se refiere al argento vivo en un estado singular, congelado en forma de una tierra blanca (122) . El "Codicillus" no añade mayor definición al asunto ya que denomina así a un oleum album obtenido por destilación e incorpora la referencia bien entrada la práctica. En ambos escritos el tratamiento de esta palabra no está muy bien definido y es conscientemente utilizado de forma ambigua, invitando a cierta confusión. La aparente ambivalencia del término es reconocida en las "Septem operaciones lapidis philosophorum" de Johannes Vasconia cuando se resuelve que la palabra "magnesia" era aplicada a todo compuesto que contenía el argento vivo necesario para el alquimista (123). No obstante, el primer tratado que se extiende sobre el significado de la "magnesia" alquímica es la popular "Tabula chemica" de Muhammad Ibn Umail al-Tamini, latinizado Senior Zadith (124). Allí se reconoce que la "magnesia alba" se es un "decknamen" utilizado de varios modos, aunque aclara que generalmente se interpreta como el primer estado de la composición alquímica o "principium primi operis", una reunión simple del argento vivo y del azufre, de los dos principios naturales en la mineralogía árabe, una combinación básica que redunda en un nuevo compuesto (125) . Tal definición encaja con la sucesión de episodios redactada por Centelles.

Desde el final de la estrofa undécima se nos indica la necesidad de que la dama blanca o lapis se vuelva negra ("vestida de tristura"). Estaríamos ante el primer color importante. Según se dice es un signo evidente de que se ha obrado la disolución de las substancias utilizadas, tal y como rezan los versos al indicar que: (12:3,4): "tendras por muy çierto que la soluçion | del cuerpo es ya hecha de su hermossura". Las claves para esta operación estarían en la aplicación de un grado de calor continuo, constante, y no muy elevado:

(14:1-8)
Y desta manera conserva el camino
que es ya començado porque as de sauer
que no ay otra forma para disoluer
la fuerça del vivo animal serpentino
el fuego te digo que sea contino
jamas la materia dexeis rrefriar
porque es un secreto el mas singular
do muchos prudentes perdieron el tino

(17:1,2)
El fuego primero te dixe que fuese
muy blando al prinçipio de la soluçion

Son las octavas once a la catorce las que abordan esta operación, preceptuando también la necesidad de una sublimación subsiguiente:

(13: 4-6)
se caussa en la forma lo quiero mostrar
que es cuando primero veas destilar
el alma del cuerpo por destilaçion

Este pequeño paso de destilación o sublimación parece ser incluido por el autor dentro de la primera parte de las operaciones junto a la "solutio". Para su exposición habla sobre los constituyentes, fijo y volátil, de su compuesto a la par que elabora una posible analogía con el cuerpo y el alma (126) .

Seguidamente se plantea una nueva operación denominada "imbibiçion" (lat. imbibitio) consistente en la reducción y posterior fijación de las partes volátiles, como vemos en las estrofas quince y dieciséis:

(15: 5-7)
por tanto lo quiero del todo nombrar
que mires el passo de la imbibiçion
que viene despues de la disoluçion

(16: 6-8)
sabras que contino as de rreiterar
el Alma en el Cuerpo que se ha de fixar
ansi como hiciste en la otra vez.

Según la siguiente estrofa (nº 17) el resultado es un compuesto que gana en grado de perfección y de dinamismo. Así, si el final de la "Solución" era comparado con la muerte en función de su color negro, la culminación de la "imbibiçion" o "fixation" es parangonada con la resurrección por su blancura:

(18. 1-4)
Despues que al cuerpo ya hubieres cobrado
su Alma, perfetta por la imbebiçion
torna a çierta forma de resurrecçion
como la tiene el que es glorificado

Finalmente bastaría con aumentar la temperatura para provocar el último grado de perfección, caracterizado por la aparición del color rojo, tal y como glosa por completo la decimonovena copla:

(19: 1-7)
Si mas adelante quisieres passar
al ultimo grado y perfetto calor
aumentale el fuego sin mucho temor
que no ay otra forma, ni mas que enseñar,
de blanca muy rroxa se te a de mostrar
aquella donzella de todos nombrada
y aqui se te muestra la Obra acauada

La octava que continúa hace un pequeño parón en las operaciones para insistir en la dificultad de resolver las claves que aportan los tratados clásicos sobre la confección de la piedra filosofal. Se recrea en un alarde retórico sobre la obscuridad y la compleja codificación de los textos. De entre todos los autores que dice conocer recomienda por su claridad expositiva a Arnau de Vilanova al que denomina: (20:6) "...Arnaldo famosso nombrado...".

Las estrofas veintiuno a la veinticuatro hablan de una operación denominada multiplicación o aumento, cuyo objetivo es incrementar la virtud transmutatoria de la piedra filosofal obtenida. Se opera disolviendo la piedra y reiterando la serie precedente de operaciones, colores, etc. El resultado final es un agente mucho más activo:

(25:7,8)
pues sola una parte te puede bastar
con çiento de aquello que has de guareçer

Según se afirma es posible repetir esta multiplicación tantas veces como se quiera, multiplicándose por diez su acción transmutatoria en cada reiteración:

(26: 3-5)
pues cada vez que la obra solvieres
y la conxelares en una union
diez pesos se ganan en la proyecçion

Es evidente que la descripción realizada por Centelles depende en gran medida del "Rosarium" pseudo-Arnaldiano. La "Mutiplicatio", por ejemplo, es definida en el capítulo XXIX de la práctica en los mismos términos, incluso en el progresivo incremento de su virtus activa : 1 por 100, 1 por 1000, 1 por 10000, 1 por 100000, etc.

Tal y como vemos, para la descripción independiente de cada una de las operaciones se ha contado con una importante influencia de los tratados atribuidos a Llull y a Arnau de Vilanova. No obstante, si analizamos el método de Centelles en su conjunto, vemos una organización diferente en la sucesión de los procesos operativos. En el poema se aprecia la siguiente disposición:

  1. Una fase inicial que viene caracterizada por un proceso de "soluçion" (disolución) en el que la materia se disgrega adquiriendo una apariencia obscura e informe. Esta etapa incluye como remate una separación, por destilaçion, de los componentes más volátiles.
  2. Una fase de "imbebiçion", esto es, de absorción, en el que las partes volátiles son de nuevo fijadas (fixation), lográndose así una albificación y un aumento en el dinamismo interno del compuesto (se habla de mayores "dones", "vivacidad" y "sutileza"). Si se continúa el proceso de fijación, aumentando ligeramente el calor aplicado, se logra una virtud cualitativa definitiva que viene caracterizada por el color rojo de la materia. En este momento ya se puede decir que se tiene la piedra filosofal preparada.
  3. Una operación de "multiplicaçion" o "aumento" para incrementar la capacidad transmutatoria de la piedra en cuestión. Se trata de un procedimiento que se puede repetir tantas veces como se quiera, con el consiguiente incremento en cada reiteración.

Veamos ahora la disposición en el "Testamentum" pseudo-Luliano, ya que es muy diferente y se basa en un sistema de cuatro complejos regímenes (lat. regimina) más una operación final adicional.

  1. Solutio: Cada régimen incluye varias operaciones y en el caso de la solutio se indican dos. Primero una disolución que lleva al compuesto a un estado licuado caracterizado por la aparición la nigredo (la negrura que indica su debilitamiento interno). A este proceso le sigue otro de destilación bastante complejo en el que se apartan los elementos que integraban el compuesto en disolución. Son destilaciones sucesivas en las que el alquimista pondrá por separado aire, agua, tierra y aire.
  2. Ablutio: Consiste en el "lavado" de cada uno de los elementos previamente puestos por separado. La ablución implica, tanto para el "Testamentum" como para el "Codicillus", una "purga" y una "rectificación". Se somete a cada uno a varias destilaciones independientes con el fin de estimular, mediante el calor y la sublimación, sus propias potencialidades. El éxito en este régimen es perceptible por el aspecto visual que toman todos ellos. Del elemento agua dice obtener cierta "Aqua vitae", del aire un "unguentum philosophorum", del fuego un "oleum rubeum" y de la tierra un tipo de "oleum album".
  3. Congelatio: Se encamina a la formación del primer compuesto sólido, de la primera forma consistente, denominada en esta fase "sulphur album" o "arsenicum", aclarando además que no se refiere en ningún caso al azufre o arsénico comunes. Regulando el grado de calor se provoca una reducción de las partes más acuosas sobre las térreas, proceso éste que es alegóricamente explicado por medio de alusiones a la nutrición humana. Poco a poco se produce una alteración cromática, de manera que si se obra de forma correcta el conjunto va adquiriendo un tono blanco (lat. albedo).
  4. Fixatio: Va encaminada a la obtención del elixir o medicina transmutatoria, la piedra filosofal. Es un régimen bastante complejo y dividido en varias operaciones. Entran en juego varias de las substancias preparadas en las etapas anteriores. Así, se toma el "sulphur album" elaborado en el tercer régimen y se combina con cierto "mercurius philosophalis" cuya difícil elaboración se relata en el tercer libro del "Testamentum", llamado "Liber mercuriorum". Reunidos ambos el "sulphur" actúa como un fermento. El componente mercurial se sublima para retornar sobre el sulfuroso por medio de varias embebiciones, de tal forma que el resultado toma una apariencia blanda y fusible como la cera. La reiteración del proceso va fijando todo el compuesto lentamente, incrementándose muy despacio la temperatura, reproduciéndose de nuevo las analogías con la nutrición. Se recomienda actuar con paciencia, atendiendo a la capacidad de absorción del lapis que se va formando, y procurando no causar su saturación. De forma pausada va ganando en virtus complexionalis. El resultado es una exuberatio o gran aumento cualitativo, con el resultado de un cuerpo de color rojizo de gran capacidad transmutatoria al que denomina medicina o elixir.
  5. Multiplicatio: No es un régimen, porque la medicina ya está lista con la "fixatio", sino que se trata de una operación complementaria que puede ser utilizada para incrementar tanto como se quiera su capacidad transmutatoria. Se realiza por medio de la disolución de la substancia obtenida en un agua mercurial para su posterior fijación.

Todo este proceso es aún más complicado ya que permite la preparación de elixires "ad album" y "ad rubeum", esto es, para transmutar los metales en plata o en oro. Ello depende del tipo de fermento que preparemos en el tercer régimen (127) . Si analizamos el conjunto de manipulaciones vemos que prácticamente todo el procedimiento relatado por Centelles se puede sintetizar en el cuarto régimen del "Testamentum". Sin embargo nuestro poeta reclama para su obra la acción del primer proceso (solutio) y omite otros dos (ablutio y congelatio). Todas estas divergencias vienen motivadas por un concepto diferente sobre el procedimiento general de obtención del elixir transmutatorio. Para el "Testamentum" se trata de una obra compleja, muy diversa, con fases claramente diferenciadas en las que se extraen y combinan diferentes substancias. Se puede decir que hay tres regímenes para disponer los materiales necesarios (Solutio, Ablutio y Congelatio) y uno para obrar con lo preparado y obtener el elixir (fixatio). Para Centelles, sin embargo, todo es un proceso lineal y continuo que se va sucediendo en el mismo receptáculo.

Si nos centramos en el "Rosarium philosophorum" veremos que también existen diferencias importantes respecto al esquema de Centelles. El proyecto básico de este tratado pseudo-Arnaldiano está descrito en su segunda parte, titulada "Práctica", y se organiza también sobre cuatro regímenes y una operación opcional de aumento o multiplicación. Veamos las partes:

  1. Solutio: El procedimiento se inicia con la unión de dos substancias básicas. Se trata de una "...piedra seca y gruesa..." puesta en disolución con cierto "mercurio" al que debe eliminarse previamente de una "...fecuencia térrea...". Triturando y calentando la mezcla se logra desleír la piedra hasta lograr una forma viscosa. Seguidamente entramos en un nuevo ejercicio definido como "inhumatione", que consisten en colocar la piedra disuelta en un calor templado durante un largo periodo de tiempo hasta que se disgreguen su partes esenciales. La descomposición completa viene a ser reconocida por el color negro, denominado "...caput seu principium operis nostri...".
  2. Ablutio: Ya desde las primeras líneas queda bien definida la finalidad purgativa de esta fase: "Secundum autem lapidis regimen est abluere nigrum corruptum et fetidum ut sit nimis, lucidum, clarum, et sordibus vacuum...". Consiste en una limpieza profunda del compuesto. Se inicia con la separación de sus cuatro elementos (lat. elementorum divisio) por medio de varias destilaciones, operación muy extendida en la alquimia medieval y que, como hemos visto, el "Testamentum" incluía en la Solutio. Las cuatro substancias obtenidas son identificadas con los elementos aire, agua, fuego y tierra de la cosmología aristotélica. Los separa en dos grupos según sus propiedades físicas. Los "acuáticos" serían el aire y el agua, definidos así por su aspecto húmedo, fluido o untuoso. Su limpieza ser lleva a cabo por medio de una sucesión de siete destilaciones, destacando la del agua, de la que dice obtener dos productos diferentes: un agua blanca y otra roja. El fuego y la tierra serían, por su forma sólida y seca, los elementos llamados "lapídeos". Se limpian con una suave calcinación. Cada una de las materias obtenidas ha de guardarse en un vaso independiente bien sellado.
  3. Reductio: Según el autor consiste en: "...reducere aquam humidam super terram siccam ut recupere perdictam humiditatem...". Así pues hay que reducir un agua húmeda sobre cierta tierra. Se comienza por elaborar precisamente esta tierra, uniendo los dos elementos "lapídeos" (tierra y fuego) junto al aire (un aceite de aspecto brillante), todos ellos purgados en el anterior régimen. A partir de aquí se abren dos opciones: si reducimos sobre esta tierra el agua blanca obtenida en la Ablutio confeccionaremos un "sulphur album". Si por el contrario lo que reducimos es el agua roja tendremos un "sulphur rubeum".
  4. Fixatio: Es el régimen final del que obtendremos el elixir, que puede ser de dos tipos: elixir ad album (para trasmutar los metales en plata) si utilizamos el "sulphur album" preparado en el régimen precedente, o elixir ad rubeum (para transmutar en oro) si partimos del "sulphur rubeum". La Fixatio se compone de varias operaciones y presenta cierta complejidad. Para el elixir rojo se reúne el azufre rojo y ciertas limaduras de oro que actúan a modo de fermento. A continuación, tal y como explica el capítulo XX, se añaden los elementos purgados en el segundo régimen, siguiendo un orden concreto: tierra, agua roja, aire y fuego. Todo ello se fija regulando el grado de calor aplicado. Para el elixir blanco se toma azufre blanco, limaduras de plata y, acto seguido, se van incorporando progresivamente, para ser fijados, tres elementos: tierra, agua blanca y aire.
  5. Multiplicatio: De nuevo no se trata de un régimen, porque se supone que la medicina o piedra filosofal está ya elaborada, sino de una manipulación anexa, siempre opcional, encaminada a incrementar la cualidad transmutatoria. Para ello se disuelve de nuevo el resultado en el "mercurio" que se empleó en el primer régimen y después se aplica calor gradualmente para ir fijando el compuesto (128).

Si comparamos los procesos generales del "Testamentum" y del "Rosarium" con los de nuestro poema vemos diferencias muy notables. Centelles simplifica enormemente el proceso, parece realizarlo de forma directa y continua, sin las extensas preparaciones comentadas por sus predecesores. Así, por ejemplo, elimina por completo el proceso de ablutio, con la separación y la purgación de los elementos, precisamente la etapa que más diversifica el trabajo en el "Testamentum" y en el "Rosarium". El esquema original de cuatro regímenes (solutio, ablutio, reductio-coagulatio, fixatio) más la operación de augmentatio-multilicatio queda completamente roto. En el caso de Centelles apenas podemos hablar, no de regímenes, sino más bien de tres procedimientos: soluçion (incluye al final una destilaçion), imbebiçion-fixation y multiplicaçion, equiparando este último con los demás en importancia (129) . La fuente para tal esquema parece estar en el "Liber de arte chymica incertis authoris", del que ya hemos hablado con anterioridad (130). Este texto divide la práctica en tres etapas idénticas a las de nuestro poema:

  1. Praxis 1: Indica la necesidad de la Solutio seguida de cierta sublimatio o separatio de las partes más volátiles (se detalla en el capítulo XIII).
  2. Praxis 2: Preceptúa la reducción y fijación de lo volátil a patir de analogías entre el cielo y la tierra o entre el alma y el cuerpo (descrita en el cap. XIV).
  3. Praxis 3: Explica un proceso de aumento de la cualidad transmutatoria del elixir por medio de cierta augmentation (cap. XVI).

El hecho de que las coplas coincidan con el "Liber de arte chymica" en la personal organización de las operaciones y en la utilización de figuraciones poco habituales, como la dama celeste ya señalada, nos lleva a pensar que estamos ante el manual básico con el que nuestro poeta monta su particular esquema sobre la confección del lapis filosofal, ahora bien, omite respecto al pseudo-Ficino cualquier metáfora mitológica o bíblica, posiblemente por el veto lanzado desde Trento hacia cualquier texto que utilizase imágenes sagradas fuera de los escritos teológicos o doctrinales de la propia Iglesia Romana (131) . Finalmente, como ya hemos visto, traslada del pseudo-Llull y del pseudo-Arnau de Vilanova abundantes modelos analógicos y metafóricos para describir de modo particular cada una de las operaciones.

Como resumen cabe destacar la vaguedad en la terminología aplicada por Centelles y la excesiva sinopsis del proceso alquímico que relata. Las etapas son planteadas de forma muy esquemática, siempre limitadas en los detalles sobre temperaturas exactas, instrumental y métodos de manipulación. Respecto a las materias utilizadas para confeccionar el lapis la parquedad descriptiva redunda en un ambiente de total incertidumbre sobre su identificación precisa. Del principio mercurial solamente aporta la imagen de una dama celeste, dedicándole una descripción somera en la estrofa inicial. Mientras, el otro principio constituyente es apenas definido como: (3:5): "...la otra cossa...".

 

IV. - El Autor de las Coplas Alquímicas

 

En el estado actual de las investigaciones resulta muy complicado determinar de forma definitiva la identidad del autor de las "Coplas de la Piedra Philosophal". Tanto editores como comentaristas de la obra no han arrojado datos sobre este asunto. En la mayoría de los casos no se ha mostrado el menor interés por aportar referencias que contribuyan de forma significativa a poder cerrar el interrogante. Excepción destacada es la publicación realizada por Luanco de una carta fechada "...en Valencia a XVIII de Setiembre de 1552", firmada por "don luis Centelles" y conservada en una copia posterior manuscrita por un anónimo (132) .

 

IV. 1. - Datos personales

Parece evidente que el autor de la epístola y el de las "Coplas" sea el mismo, pues resulta poco probable que dos personajes diferentes aparezcan con idénticos nombres y apellidos, situados en la misma época y en un área geográfica análoga, dedicándose además simultáneamente a una disciplina minoritaria en territorio Español como era la alquimia.

A lo largo de la misiva nuestro autor dirige su pluma a su colega el Dr. Manresa, afincado en la región de Murcia. Conjugando inicialmente ironía y mordacidad se jacta ante él de que uno de sus discípulos llamado Baltasar de Zamora haya "...aborrescido su doctrina y opinion..." con apenas "...dos palabras que le dixe..." para cobijarse junto a la del propio Centelles. El tema central consiste en una breve exposición sobre la primera materia de los metales, sostenida por un mosaico de citas puestas en un latín macarrónico. Nos aporta, en pequeños detalles, algunas noticias sobre su autor. Sabemos que tenía residencia en Valencia y matiza que "en aquella zona" no era conocido como alquimista: "...no a muchos dias quel S balthasar de çamora muy amigo y conoscido de v. m. vino a mi casa, y como no se quien le encamino buscandome debajo de nombre de oculta phia (133) y como en esta tierra no me tengan por tal...". A raíz de esta cita también parece lógico pensar que debió moverse por otros lugares donde sí se sabía de su afición por lo hermético.

Muy importante es comprobar que integra a la alquimia en el cuadro global de la "filosofía oculta" lo que, situándonos en su tiempo, implica un concepto de la transmutación como fenómeno condicionado por una serie de agentes sobrenaturales capaces de modificar los procesos materiales (134). Esta definición es válida como idea general, por supuesto, aunque se ve aplicada de un modo más o menos particular según el autor que tomemos, algo presumible en una disciplina autodidacta y no reglamentada oficialmente como la alquimia, donde cada individuo añade sus matices, orientando y coloreando a su gusto los conceptos que va reuniendo. Centelles comenta "no conocerse digno de tal nombre" y lo considera un grado elevado, todo ello en un golpe de modestia que parece meramente retórica si comprobamos el tono del texto completo, donde se presenta sin reparos como guía para quienes desean "...topar con el camino de la verdad".

En relación al concepto de "filosofía oculta" y su nexo con lo alquímico en tiempos de Centelles, acabamos de comentar que es utilizado para determinar aquellos procesos catalogados por cada autor dentro de un orden de tipo sobrenatural (135) . Pero hay que considerar además que la creencia en la realización puntual de estos prodigios redunda en un refuerzo del antiguo "topos" relativo a la reserva substancial de las operaciones de carácter maravilloso y extraordinario (136). De este modo la expresión "Filosofía Oculta" era también aplicada para referirse a procedimientos encubiertos deliberadamente por causa de su exclusiva ejecución o trascendencia (137) . La mayor influencia durante el siglo XVI en este aspecto es el alemán Heinrich-Cornelius Agrippa (1486-1535) y su manual titulado "De oculta philosophia" (1531) en el cual establece una sindicación entre operaciones de magia, astrología, cábala, teurgia, medicina, y las propiedades misteriosas de las plantas, rocas y metales, destacando la necesidad de reservar sus secretos. Aunque la alquimia no sale muy bien parada su libro sirve de modelo a autores posteriores para clasificar bajo ese mismo título a las disciplinas que consideraban parejas a las manejadas por Agrippa (138) . El adjetivo "oculto" aparece así encarnando tanto a las disciplinas ocultadas deliberadamente por sus practicantes como a las que dependían de fenómenos inaccesibles (ocultos) a la razón. Durante toda la centuria del XVI hay quien destaca más un sentido, quien prefiere el otro, o quien abunda en ambos. Theodor Zwinger (1533-1588) encuadra la alquimia entre las artes mecánicas, matizando que se nutre también de la "... filosofía oculta de la naturaleza" (139) . Según sus propias explicaciones con ello se determina el grado especial de un "arte universal y sagrado" sometido a fenómenos sobrenaturales y gobernado según una doctrina de tipo esotérico, las materias que implicaría su estudio vendrían a ser: la mecánica para el terreno práctico, la "physica" en la teoría y la "metaphysica" para los aspectos sobrenaturales. De una opinión pareja es el autor del tratado "De occulta philosophia seu de natura planetarum" transcrito en 1590 por Christoph von Hirschenberg (140). Por la misma época el alquimista alemán Gerhard Dorn decide igualmente definir su propia ocupación como "Oculta Philosophia". Difunde su concepción según un esquema particular relativo a una alquimia contemplativa dedicada a cuestiones metafísicas y teo-cosmogónicas que le servía de antesala al conocimiento de los prodigios y misterios de una transmutación física o material (141). El paracelsista Benedikt Toepfer (Benedictus Figulus) reconoce una vinculación de lo alquímico con otras tres materias que ayudarían a desarrollar su teoría: astronomía, cábala y magia naturalis, formando todas ellas una "filosofía" de contenido reservado y cerrado, por lo que decide definirla como "filosofía hermética", una expresión a la que otorga un significado similar al de "oculta", pero que tendrá más éxito entre los alquimistas de siglos posteriores (142).

Así pues, instalados como estamos en tiempo renacentista, se acomoda Centelles dentro del conjunto de personas dedicadas al análisis de la alquimia apoyándose en factores extraños a la esfera natural (143) . Según este punto de vista el éxito en la parcela teórica vendría condicionado por agentes divinos como la inspiración, mientras, los momentos clave en las manipulaciones prácticas se sujetan generalmente a procesos ajenos a la esfera natural o dependientes de la "magia" (144). La alquimia se envuelve en el manto de la sacralidad, trata de ser presentada como "artem sacram" o "Donum Dei" (145). Como consecuencia inmediata tenemos una invasión del terreno correspondiente a la metafísica, la aparición en los tratados de gran cantidad de conceptos teoréticos relacionados con el estudio de las causas primeras o del ser en cuanto tal que no eran susceptibles de comprobación en el un plano físico. Las reflexiones de los alquimistas se cuajan de una metafísica y una cosmología expresada por medio de entidades no empíricas, su orden se subordina a prodigios cuya elucidación se vincula a una combinación con otras ciencias llamadas ocultas: la cábala, la magia y la astrología básicamente (146). Uno de los rasgos más evidentes de la alquimia en el Renacimiento respecto al periodo medieval es, precisamente, el desarrollo habitual de una autárquica especulativa libremente basada en ciencias obscuras u ocultas en perjuicio de los márgenes del razonamiento delimitados por la filosofía natural aristotélica durante el Bajo Medievo. El resultado es una nebulosa doctrina de gran complejidad y aparatosidad que empieza a autodefinirse como "Filosofía Hermética" o, como ya dijimos, "Filosofía Oculta", cuya obra escrita va a incidir cada vez más sobre cuestiones teóricas, con gran ornato metafísico, dejando en no pocos casos la práctica experimental en un segundo plano. En este sentido, aunque volviendo a la carta al Dr. Manresa, notamos igualmente que Centelles parece haber distribuido en esa fecha de 1552 algún texto propio (147) y a partir de su lectura era acusado por sus contemporáneos de no ser un alquimista práctico, esto es, no estar curtido en las experiencias de laboratorio, por ello dice: "...aunque a v. m. le paresca que escribo theorica lo mas es practica royendo estas y otras muchas autoridades y leyendo libros muy autenticos y verdaderos y tanto tiempo que con esto se me han caido ya las muelas y dientes...". Ante lo que parece haber sido una increpación directa de su oponente es interesante comprobar que, en su defensa, Centelles no se atribuye en ningún momento conocimientos sobre la manufactura en el laboratorio, sino que exalta con gran aparatosidad la cantidad de sus saberes bibliográficos, citando en un latín bastante manoseado a "Aristotiles", "raimundis lulli", "arnaldo de vilanoba", "S[anto] Thomas", "morieno filosopho" y el "rosario philosophorum", para intentar explicar a su interlocutor que: "... por tanto baste lo dicho que en mi anima si soy entendido que no he dicho poco...". Trata de demostrar la valía de sus palabras y para ello, como se aprecia, circunscribe su experiencia personal a la lectura de muchos tratados. Sometida a esta tendencia, el debate con el Dr. Manresa reflejado en la epístola no va nunca más allá de un nivel teorético. Lo mismo sucede en las referencias a sus charlas con Baltasar de Zamora quien, acostumbrado al supuesto pragmatismo de Manresa debió sorprenderse inicialmente cuando se topó con un aficionado a la alquimia limitado a conceptos especulativos, aunque finalmente le convenciesen sus hipótesis, de ahí el comentario de Centelles: "...aunque yo no fuese del todo quien el buscaba, en fin me conoscio [sic est: "me comprendió"] y olgo de aberme conoscido..." . Todos estos datos parecen confesar la naturaleza específicamente teórica de su estudio, al menos en aquella fecha.

En definitiva el documento editado por Luanco resulta de gran interés, pues no solamente es un aporte en lo relativo a las opiniones de Centelles sobre el tema de la primera materia del alquimista sino que además roza cuestiones de tipo personal. Esto último es comprensible ya que el original parece pertenecer a un intercambio epistolar privado entre Manresa y Centelles en el que debió desarrollarse una polémica tensa, agria y por momentos ictérica.

 

IV. 2. - Identidad.

Las investigaciones sobre la verdadera identidad de nuestro poeta se mueven actualmente en el terreno de las hipótesis. Su definición está llena de complicaciones. Los trabajos precedentes ni tan siquiera marcan propuestas o sientan bases en este sentido. Carecemos igualmente de monografías bien documentadas que abunden sobre la vida y obra de los alquimistas españoles en el periodo moderno o en zonas geográficas determinadas, como el marco cultural valenciano en el caso que nos ocupa (148) . Tampoco existe un investigación a escala general sobre las relaciones que mantenían los alquimistas españoles con otros colegas coterráneos o foráneos.

Por nuestra parte no hemos localizado ningún dato definitivo que vincule documentalmente las "Coplas" con un personaje histórico de biografía conocida. No obstante, lo largo de este artículo se han expuesto informaciones que hemos ido reuniendo y ciertamente conforman un cúmulo de indicios que pueden ayudarnos a facilitar una identificación probable. Los factores a considerar son:

  1. Una copia de las "Coplas" señala como autor a alguien llamado "Luis Carroz". En otras dos más tardías se le denomina "Luis de Centelles". A través de la carta localizada por Luanco sabemos que en el año 1552 había un alquimista en la ciudad de Valencia con ese segundo nombre.
  2. La tradición manuscrita de las "Coplas" se inicia en territorios italianos de titularidad española o con amplia influencia de nuestro país: Nápoles, Palermo, Salerno, Génova, etc. Sólo con posterioridad continúa en códices transcritos en tierras españolas, y generalmente por plumas italianas. Esta evidencia queda indirectamente plasmada por el propio Centelles cuando declara en su carta que no era reconocido como alquimista en tierras de Valencia en 1552, lo que invita a pensar en su presencia activa en alguna otra región, creemos que italiana, pues allí aparecen las primeras transcripciones de su obra entre 1560 y 1570.
  3. La difusión de las copias durante el siglo XVI corresponde a una pluma que se mueve dentro del marco cultural establecido por Valencia en el mediterráneo y que incluye una fuerte relación con Sicilia, Génova y Roma, así como un dominio territorial sobre Cerdeña y el Reino de Nápoles (149) .
  4. El autor de las "Coplas" es un hombre que demuestra tener algún tipo de formación en el campo de la lírica. Aunque su estilo resulta poco elocuente, las estrofas incluyen cierto número de cultismos. El tipo de verso y su elaboración indica que estamos ante alguien instruido siquiera medianamente en la métrica, los temas y las diversas formas poéticas de su tiempo. También conoce el latín e intenta aplicarlo al mismo nivel que el castellano, tal y como se aprecia en su epístola.

A partir de todos estos detalles se puede intentar formular una hipótesis localizando a un personaje que encaje con el perfil trazado. Posiblemente el dato más evidente es el de su gracia: "Luis de Centelles". El apellido Centelles es originario de la localidad catalana del mismo nombre situada al Sur de la Plana de Vic, a 52 kilómetros de Barcelona (150) . En la primera mitad del siglo XVI hemos encontrado allí un conde llamado "Luis I de Centelles", aunque no es posible vincularlo con tierras de Italia ni con una afición a la poesía, las artes o la alquimia.

Otras ramas de la casa principal de Centelles se establecieron en Valencia, Cerdeña y Aragón. Así aparecen los Condes de Oliva, los Barones de Almedijar, los Condes de Quirra, luego los Marqueses de Quirra en Cerdeña y de Nules en Valencia, las variantes son muy numerosas.

En un principio llevamos a cabo una investigación sobre el apellido Centelles en el siglo XVI, donde desafortunadamente no encontramos posibilidad de dar con un una solución plausible a la identidad de nuestro alquimista (151) . Posteriormente fijamos nuestra atención en el apelativo "Carroz" que figura en el manuscrito de Palermo. Se trata de una modificación del apellido valenciano "Carròs" muy habitual en documentos castellanos, fruto de la vacilación ortográfica entre las consonantes S, C, Ç, Z, equivalentes a los sonidos africados (correspondiente a /ts/, si era sordo, y a /ds/, si era sonoro) (152) . En las regiones italianas la variación "Carroz" es la grafía ordinaria del apellido. Se asienta en Quirra, heredad de la isla de Cerdeña (153). Sobre ella sabemos que en 1363 Jaime I de Valencia concedió el título de Conde de Quirra a Berenguer Carròs, a cuya familia ya había donado el término del castillo valenciano de Rebollet. En 1382 este último pasa a los Riusec, aunque Quirra queda en propiedad de los Carròs/Carroz. Esta familia estuvo en estrecho contacto desde el siglo XV con los Centelles, quienes también extendieron sus posesiones por Cerdeña (154). Concretamente entre enero y febrero de 1421 el rey Alfonso V el Magnánimo convocó un "Parlamento del Reino de Cerdeña" en el que concede a Bernard de Centelles el feudo de Monteacuto, el de Anglona y otros territorios sardos colindantes. En 1434 su hijo Francesc Gilabert de Centelles emprende una campaña militar contra Nicolò Doria haciéndose con la baronía de Coghinas. En 1447 el rey de Aragón concede a estos Centelles valencianos el título genérico de Condes de Oliva, correspondiente a la homónima ciudad de la que eran originarios. En 1448 Francesc Gilabert de Centelles conquista Castelgenovese cuya titularidad ostentará desde 1453. A finales del siglo XV la administración del feudo sardo (que comprendía las regiones de Anglona, Montes, Coros, Figulinas, Meilogu, Costavalle, Marghine, Goceano y Monteacuto) es transferida a España y dirigida desde las propiedades de la familia en Oliva y Valencia donde contaban con sendos palacios (155).

Centrándonos en el condado de Quirra debe señalarse que Bereguer Carròs muere sin hijos varones en 1382. Entonces Pere IV concede el feudo sardo a la hija de Berenguer, que aparece en los textos italianos como "Condesa Violante Carroz". Ello sucede el 27 de mayo de 1383. A la muerte de ésta el título es asumido por su hija, la Condesa Violante II.

Ya en el siglo XV, el condado pasará a los Centelles cuando Toda Senesterra Carroz, descendiente de Violante II, se casa con Luis de Centelles, personaje este último que no debe tomarse por el autor de nuestras "Coplas". Así, a finales del siglo XV el condado de Quirra comprendía los territorios de S. Michele, Monreale, Marmilla, Parte Montis, Parte Usellus, Sarrabus y Ogliastra.

Posteriormente el interesante dominio será, con testamento del 18 de junio de 1504, para Guillem Ramón de Centelles (Guglielmo Raimondo di Centelles), aunque no sin problemas legales, pues aparecen otros aspirantes al título. No obstante el Consejo de Aragón se expresa a favor de Guillem el 2 de Enero de 1520. Durante el segundo cuarto del siglo XVI tenemos como sucesor a Lluís de Centelles, hijo de Guillem. Es el personaje que nos interesa. Aparece en los diferentes documentos notariales y administrativos con el nombre Luis de Centelles, o las variantes: Lluís Centelles i Carròs, Luis Centelles y Carroz, Lluís Carròs i de Centelles... Este hombre, al parecer más dedicado a la lectura que a la administración, gobierno y defensa de su hacienda termina perdiendo rápidamente su heredad a causa de nuevas disputas legales en beneficio de Joaquim Centelles, hijo de un tío paterno.

La escasez de documentos biográficos sobre este personaje no nos ha permitido actualmente hallar datos definitivos de que guardase relación directa con el "arte de Hermes", aunque desde nuestro punto de vista es él quien mejor se ajusta al perfil de nuestro alquimista. Además de con la situación geográfica y el espacio temporal Lluís Carròs i de Centelles encaja con los diferentes nombres localizados en los manuscritos que señalan la autoría. De igual modo es un hombre al que ubicarmos en tierras italianas (en Cerdeña, también viajó a Nápoles y Sicilia), pero igualmente en tierras peninsulares (Valencia) desde donde cumplía sin problema las obligaciones de su título al ser Quirra considerado patrimonio de la Corona de Aragón desde 1475. Finalmente se puede constatar su afición a las composiciones líricas por su relación con poetas de origen sardo. El más destacado en aquellos tiempos, Antonio Lo Frasso (156) , le dedica su obra "Fortuna de Amor" (157).

De confirmarse definitivamente la hipótesis que proponemos no sería Luis de Centelles el único aficionado a la poesía del siglo XVI en interesarse por los textos alquímicos. La lectura de escritos alquímicos por parte de algunos poetas del Renacimiento, aunque ciertamente poco habitual, se comprende debido al profundo y muy rico proceso de alegorización en la literatura de género transmutatorio desde el siglo XVI (158) , lo que viene a enlazarla con el evidente movimiento mitográfico y alegorizante de la composición poética general a lo largo de todo ese periodo (159). En la mayoría de los casos la presencia de manuscritos o impresos alquímicos en las bibliotecas de algunos versificadores del momento no implica un interés específico o particular por la obra alquímica sino por los recursos alegóricos y mitográficos de su producción literaria. Su consulta se encuadran en un análisis de conjunto realizado independientemente por parte de los propios poetas sobre la configuración estructural, el contenido y el tratamiento de la fábula, el mito, la alegoría o la metáfora en los repertorios de su misma época, lo que les llevaba también, aunque ciertamente en pocos casos, hasta las alegorías y parábolas alquímicas (160) . Con esta forma de lectura, análisis y asimilación conocían nuevas disposiciones en la interpretación de las fábulas y ampliaban continuamente sus recursos en la redacción siguiendo un sistema de memorización e imitación (161).

Buscando casos concretos en tiempos de Luis de Centelles, Giulio Camillo Delminio (c. 1480-1544), célebre teórico de la poética y la retórica humanista, reúne y comenta en notas marginales piezas tempranas de Augurello, como el "Vellus aureum" o la cpusopoa , junto a otras de Lucrecio o Cicerón en un códice manuscrito por él mismo (162). El también italiano Giovan Pietro Dolzani Dalle Fosse (1477-1558) muestra en sus "Praeludia quaedam" pinceladas de tono alquímico señaladas por François Secret (163). Pero más interesante es el hecho de que destaca en sus "Hieroglyphica" la "elegancia y sabiduría" poética encerrada en las rimas alquímicas, alabando especialmente los tres libros sobre la Crisopeya de Augurello (164) . El poeta Benedetto Varchi (1502-1565) (165) , muy conocido por su "Storie Fiorentine" impresa entre 1527 y 1530, ha dejado constancia de sus conocimientos sobre la alquimia en un tratado titulado "Si l'archemia è vera o no quistione" (166) . El interesante texto de Varchi es un testimonio del debate abierto sobre las cuestiones transmutatorias en los círculos culturales italianos y refleja un gran pragmatismo por parte de su autor (167). Otro importate compilador y comentarista de la lírica renacentista, Lilio Gregorio Giraldi da Ferrara (1479-1552), alaba la forma en la que se han elaborado algunas poesías de temática transmutatoria, al verlas como una forma estéticamente hábil e ingeniosa de tratar una materia que él considera de literatura curiosa pero difícil de asimilar y estéril en sus resultados prácticos (168). En España podemos citar al célebre humanista Diego Hurtado de Mendoza (1503-1575), poeta, conocedor de árabe, latín y griego, historiador, político y discípulo en la Universidad de Pedro Mártir de Anglería (169), estaba en posesión de una importante biblioteca que amplió notablemente en sus viajes a Inglaterra en 1538 y a Venecia en 1527 y 1539 (170). Gracias al médico y naturalista Conrad Gessner (1516-1565) sabemos que, aunque se mostraba escéptico ante la efectividad de las operaciones alquímicas, entre sus lecturas se contaban tratados de temática transmutatoria en varias lenguas (171). También en sendas rimas de Francisco Quevedo (1580-1645) se aprecia la influencia de textos deudores de sendos conceptos paracelsistas, así como de doctrinas seudo-Lulianas y seudo-Arnaldianas (172).

En el caso de nuestro Luis de Centelles comprobamos que su interés ha ido mucho más allá del tópico anti-alquimista habitual en la literatura popular, o de lo puramente retórico y estilístico. Las lecturas han germinado en él un interés por la teoría alquímica en sí, por su debate, por discutir entre alquimistas el estado de la cuestión aunque, según pensamos, sin entrar en su práctica experimental (173) . Su carta demuestra manifiestamente que mantuvo contacto con alquimistas y se involucró en sus dimes y diretes especulativos. A pesar de su desconocimiento acerca de la manufactura en el laboratorio su inserción en algunos círculos de aficionados a la obra transmutatoria no debió ser complicada pues, como señala Lynn Thorndike, el siglo XVI se caracteriza por una proliferación de autores con determinados conocimientos teóricos pero cuyo ejercicio práctico era muy escaso (174), gastaban más tiempo en comentar sobre sus lecturas y en argüir contra sus oponentes que en foguear una experimentación ordenada con la que mantener una cierta tensión teorico-práctica sobre la que garantizar un progreso sólido y estable de sus investigaciones (175).

 

V. - Conclusión

 

El estudio de las "Coplas de la Piedra Philosophal" nos ha resultado de una dificultad considerable a la hora de abordar su origen y evolución. Nuestro análisis ha partido de un texto que aparecía para el investigador como un elemento lírico aislado y muy singular dentro de la historiografía alquímica española. Se conocían apenas dos manuscritos, del siglo XVII, con notables disparidades no explicadas tales como una diferente extensión y orden estrófico. Las opiniones que habían suscitado no habían pasado de la breve glosa bañada en un barniz hermético o de comentarios informales, sucintos e imprecisos en sus manifestaciones. Lejos de redundar en una mera acumulación de datos sin elaborar, nuestro objetivo ha sido fecharlo, identificar su posible autor, determinar sus fuentes, la trama de su contenido, así como trazar su historia contribuyendo a situar su original, sus alteraciones y adiciones.

Las complicaciones han sido importantes por dos razones fundamentales. Primero, la falta de soporte técnico, motivado por la gran escasez en España de sólidos estudios histórico-críticos especializados en la materia alquímica. Esta situación absolutamente deficiente se ve agravada por la carencia de índices bibliográficos o repertorios especializados dedicados a registrar, clasificar y ordenar las fuentes primarias facilitando un buen desarrollo de los ensayos históricos dedicados a la alquimia española. En segundo lugar, las particularidades del texto complicaron extraordinariamente la localización de las copias. No en vano estamos ante una composición confusamente definida en los catálogos de las colecciones sobre alquimia por las continuas alteraciones en su título, por sus variables firmas o atribuciones, así como por su cambiante morfología en el número, orden y gramática de las estrofas.

El presente artículo, junto con la edición de tres versiones de las "Coplas" y la "Carta al Dr. Manresa" (que aparecerá el el próximo número de la revista "Azogue") quieren ser un aporte para la mejor comprensión de la obra de este aficionado a la alquimia del siglo XVI llamado Luis de Centelles. El resultado final no pretende cerrar la cuestión sino mostrarse como una contribución significativa de cara a futuras investigaciones.

Elena Castro Soler
José Rodríguez Guerrero

 

 


NOTAS

1. - Cifras incluyendo las ediciones en latín y en lengua vernácula. - Pueden consultarse los catálogos especializados como: - VV. AA., (1997), "Bibliotheca Esoterica", Martino Fine Books, Mansfield Centre, [Reproducción de la edición original]. - DENIS DUVEEN, (1949), "Bibliotheca Alchemica et Chemica", E. Weil, Londres, [Reproducción de la edición original]. - JOHN FERGUSON, (1954), "Bibliotheca Chemica", 2 vols., Ed. Derek Verschoyle, Londres, [Reproducción de la edición original]. - JOHN FERGUSON, (1959), "Bibliographical Notes on Histories of Inventions and Books of Secrets", Holland Press, Londres, [Reproducción de la edición original]. - LYNN THORNDIKE, (1992), "A History of Magic and Experimental Sciences", vols. VI y VII, Columbia University Press, New York . [Reproducción de la edición original]. Otros catálogos importantes son los de: "Caillet, "Dorbon", "De Guaita", "Mellon Collection", "Rosenthal", "Verginelli Rota", "Wellcome Library". (Para abandonar las notas y regresar al texto utilice la aplicación "atrás" o "anterior" disponible en la barra de herramientas de su navegador).

2. - VV.AA., (1541), "In hoc volumine de alchemia continentur haec : Gebri,... de Investigatione perfectionis metallorum liber I ; Summae perfectionis metallorum, sive perfecti magisterii libri II... Ejusdem de Inventione veritatis seu perfectionis metallorum liber I ; de Fornacibus construendis liber I. Item Speculum alchemiae... Rogerii Bachonis ; Correctorium alchemiae... Richardi Anglici ; Rosarius minor, de alchemia ; incerti auctoris Liber secretorum alchemiae Calidis filii Jazichi judaei ; Tabula smaragdina de alchemia Hermetis Trismeg. ; Hortulani philosophi Super tabulam smaragdinam Hermetis commentarius...", Petreus, Nurnberg. - VV.AA., (1550), "De Alchimia opuscula complura veterum philosophorum... 2 partes in 1... Rosarium philosophorum. Secunda pars alchimiæ de lapide philosophico vero modo præparando...", C. Iacobus, Frankfurt. - VV.AA., (1659-1661), "Theatrum chemicum, præcipuos selectorum auctorum tractatus de chemiæ et lapidis philosophici antiquitate, veritate, iure, præstantia et operationibus, continens...", 6 vols., Lazarus Zetzner, Ursel / Strassburg. - VV. AA., (1614), " Opuscula quaedam chemica. Georgii Riplei Angli medulla philosophiae chemicae. Incerti autoris canones decem, mysterium artis mira brevitate et perspicuitate comprehendentes. Heliae monachi Franciscani speculum alchymiae. Joan.-Aurelii Augurelli Chrysopaae compendium paraphrasticum Artefii clavis majoris sapientiae. Joan. Pontani epistola de lapide philosophorum. Galli Etschenreuteri medici epistola ad Guilielmum Gratarolum. Omnia partim en veteribus manuscriptis eruta, partim restruta", sumptibus J. Bringeri, Frankfurt. - VV.AA., (1625), "Musæum Hermeticum, omnes sopho-spagyricæ artis discipulos fidelissime erudiens, quo pacto summa illa veraque Medicina, qua res omne, qualemcumque defectum patientes, instaurari possunt (quæ alias Benedictus Lapis Sapientum appellatur) inveniri ac haberi queat inveniri ac haberi queat. Continens tractatus chymicos novem præatantissimos, quorum nomina et seriem versa pagella indicabit. In gratiam filiorum doctrinæ, quibus Germanicum Idioma ignotum, in Latinum conversum ac juris publici factum", 6 vols., Lucas Jennis, Frankfurt. - LUDWIG COMBACH, (1647), "Tractatus aliquot chemici singulares summum philosophorum arcanum continentes, 1. Liber de principiis naturae, & artis chemicae, incerti authoris. 2. Johannis Belye ... tractatulus novus, & alius Bernhardi Comitis Trevirensis, ex Gallico versus. Cum fragmentis Eduardi Kellaei, H. Aquilae Thuringi, & Joh. Isaaci Hollandi. 3. Fratris Ferrarii tractatus integer, hactenus fere suppressus, & in principio & fine plus quam dimidia parte mutilatus. 4. Johannis Daustenii Angli Rosarium. Opuscula partim nondum in lucem producta ...", Typis Salomonis Schadewitz, Sumptibus Sebaldi Kohlers, Geismariae. - VV.AA., (1678),"Musæum Hermeticum reformatum et amplificatum, omnes sopho-spagyricæ artis discipulos fidelissimè erudiens, quo pacto summa illa veraque lapidis philosophici medicina, qua res omnes qualemcunque defectum patientes, instaurantur, inventiri et haberi queat. Continens tractatus chimicos XXI. Præstantissimos, quorum Nomina & Seriem versa pagella indicabit. In gratiam filiorum doctrinæ, quibus Germanicum idioma ignotum est, Latina lingua ornatum", Sand, Frankfurt. - J. F. HOUPREGHT, (1680), "Aurifontina chymica, or, A collection of fourteen small treatises concerning the first matter of philosophers for the discovery of their (hitherto so much concealed) mercury microform : which many have studiously endeavoured to hide, but these to make manifest for the benefit of mankind in general", William Cooper, Londres. - GUILLAUME NICOLAS SALMON, (1683), "Bibliothèque des philosophes Chimiques, ou recueil des oeuvres des auteurs les plus approuvés qui ont écrit de la pierre philosophale, par le Sn Salomon, doct. en médecine", Laurent D'Houry, París. - NICOLAS SALMON, (1692), "Bibliothèque des philosophes [chimiques], ou Recueil des oeuvres des auteurs les plus approuvés qui ont écrit de la pierre philosophale. Tome premier, contenant sept traités qui sont énoncés dans la page suivante. Avec un Discours, servant de préface, sur la vérité de la science, et touchant les auteurs qui sont dans ce volume ; et une liste des termes de l'art, et des mots anciens qui se trouvent dans ces traités, avec leur explication. Par le sieur S. D. E. M. (Recueillie par Nicolas Salmon)", Charles Angot, París. - JEAN-JACQUES MANGET, (1702), "Bibliotheca chemica curiosa, seu rerum ad alchemiam pertinentium thesaurus instructissimus: quo non tantum Artis Auriferæ, ac scriptorum in ea nobiliorum historia traditur; lapidis veritas argumentis & experimentis innumeris, immo & juris consultorum judiciis evincitur; termini obscuriores explicantur; cautiones contra impostores, & difficultates in tinctura universali conficienda occurrentes, declarantur: Verum etiam tractatus omnes virorum celebriorum, qui in magno sudarunt elixyre, quique ab ipso Hermete, ut dicitur, Trismegisto, ad nostra usque tempora de Chrysopoæ scripserunt, cum præcipuis suis commentariis, concinno ordine dispositi exhibentur. Ad quorum omnium illustrationem additæ sunt quamplurimæ figuræ æneæ", 2 vol. Chouet, Geneva. - VV.AA., (1728-1730), "Deutsches theatrum chemicum, auf welchem der berühmtesten Philosophen und Alchymisten Schrifften, die von dem Stein der Weisen, von Verwandlung der schlechten Metalle in bessere, von Kräutern, von Thieren, von Gesundund Sauer-Brunnen, von warmen Bädern, von herrlichen Artzneyen und von andern grossen Geheimnüssen der Natur handeln, welche bisshero entweder niemahls gedruckt, oder doch sonsten sehr rar worden sind, vorgestellet werden durch Friederich Roth-Scholtzen", 3 vols. Felsecker, Nürnberg. - J. M. DE RICHENBOURG, (1740-1754), "Bibliothèque des philosophes chimiques. Nouvelle edition, revûë, corrigée et augmentée de plusieurs philosophes, avec des Figures & des Notes pour faciliter l'intelligence de leur Doctrine. Par Monseiur J. M. D. R.", 4 vols., André Cailleau, París. - LENGLET-DUFRESNOY, (1742), "Histoire de la philosophie hermétique, Accompagnée d'un catalogue raisonné des écrivains de cette science. Avec le véritable Philalèthe, revu sur les originaux", 3 vols., P. Coustelier, París. - F. J. WILHELM SCHRÖDER, (1771-1774), "Neue alchymistische Bibliothek für den Naturkundiger unsers Jahrhunderts ausgesucht und herausgegeben von S. Brönner", 4 vols., Frankfurt & Leipzig. - VV.AA., (1778-1779), "Hermetisches A.B.C. deren ächten Weisen alter und neuer Zeiten vom Stein der Weisen. Ausgegeben von einem wahren Gott- und Menschenfreunde", 3 vols., Ringmacher, Berlín. - NICOLAS SALMON, (1782), "Supplément à la Bibliothèque des philosophes chimiques, contenant: la Vérité sortant du puits hermétique; Eclaircissement de la pierre philosophale [par Nicolas Flamel]; Vie de Nicolas Flamel par M[onsieur] L['abbé] V[illain]", chez Larmy, París. - VV.AA., (1782-1785), "Hermetisches Museum. Allen Liebhabern der wahren Weisheit gewidmet von dem Herausgeber", Albrecht, Leipzig.

3. - NICOLAS BARNAUD, (1599), "Quadriga aurifera, nunc primum a Nicolao Barnaudo,... in lucem edita...", apud C. Raphelengium, Lugduni Batavorum [ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: R-27617], p. 7: "...maxime in [gratia] Gallorum, Anglorum, Germanorum, Italorum, Polonorum, Bohemorum, Borussorum, Suecorum, et ad miraculum natorum Batavorum, et Regionum confaederatarum Philosophorum". Para Barnaud la alquimia es una disciplina noble que permite perfeccionar los metales por medio de procesos artificiales. En España, según dice, se prefiere obtener oro y plata siguiendo métodos innobles, y menciona en tono recrininatorio los barcos cargados de metales preciosos que llegaban desde América manchados con la sangre de los índios aborígenes. - cf. Ibid., p. 8."...naves habes auriferas multo tuo et Indorum sanguine partas [...] cito navibus utere tuis, interea dùm tibi licet". - El título de "Cuádriga de Oro" no es más que una metáfora de Barnaud para presentar una colección de cuatro textos. De acuerdo con su imaginativa introducción cada texto elegido por él es una de la ruedas que da revolución a su libro: "1ª rota: Tractatus de philosophia metallorum, a doctissimo... viro anonymo conscriptus; 2ª rota: Georgii Riplei,... Liber duodecim portarum; 3ª rota: Liber de mercurio et lapide philosophor. Georgii Riplei; 4ª rota: Scriptum... docti viri cujus nomen excidit, elixir solis Theophrasti Paracelsi tractans".

4. - Un primer listado de tratados españoles, aunque mezclado con textos de otras disciplinas: - E. PORTELA MARCO & A. SOLER SÁIZ, (1987), "Bibliographia chemica hispanica : 1482-1950", Instituto de Estudios Documentales e Históricos sobre la Ciencia, Valencia. También hay reunión de títulos de cierta entidad en la bibliografía final de: - MIGUEL LÓPEZ PÉREZ, (2001), "Alquimia, Terapéutica y Sanidad en la España de los Austrias Menores", tésis doctoral inédita, Universidad Complutense de Madrid, [localización: U. Bibl. de Tesis-Inéditas, sig. T-24955], pp. 759-934.

5. - Si nos alejamos de las obras dedicadas a la práctica médica o terapéutica nos encontraremos con muy pocas publicaciones. Algunos ejemplos serían: - AEYRENAEO PHILALETHA, (1727), "El mayor thesoro. Tratado del arte de la alchimia, ò chrysopoeya, que ofrece la entrada abierta, al cerrado Palacio del Rey. Compuesto por Aeyrenaeo Philaletha, cosmopolita, Philósopho y Adepto de la Piedra Philosophal. Traducido de latín en lengua castellana por Theóphilo..", Antonio Martín, Madrid, [Ejemplares consultados: Madrid, Biblioteca de la Real Academia Española, signatura: 30-B-42; Madrid, Biblioteca Nacional, signaturas: R-36467 y 3-14961]. - FRANCISCO ANTONIO DE TEJEDA, (s. a.), "Triunfo de la transmutación metálica, en que se evidencia la del hierro en cobre fino. Vindicada en tres assertos, con infalibles experimentos contra el Discurso último del quinto tomo del Theatro Crítico", Bernardo Peralta, Madrid, [Ejemplares consultados: Valladolid, Biblioteca Universitaria, sig. 8974; Santander, Biblioteca Menéndez Pelayo, sig. 18869/70; Oviedo, Instituto Feijoo de Estudios del Siglo de Oro, sig. II-C-2/3]. - FRANCISCO BRUNO SEBASTIÁN, (1790), "Clara y Verdadera explicación de la composición del mercurio simple de los filósofos, que enigmáticamente describió el anónimo Eyreneo Philaleta Cosmopolita en el tratado que intituló: La entrada abierta al cerrado Palacio del Rey", Viuda e Hijos de Santander, Valladolid, [Ejemplar consultado: Biblioteca privada de Don Juan Arroyo Mateos]. - Sin ser específicamente alquímicos, pero con observaciones sobre las teorías alquímicas de la formación de los metales, podemos citar: - BARTHOLOMAEUS ANGLICUS, (1497), "De proprietatibus rerum, lib. XVI: Tratado de los metales e piedras preciosas e de sus virtudes... trad. por Fr. Vicente de Burgos", Pablo Hurus, Zaragoza, [Ejemplares consultados: Madrid, Biblioteca Nacional, sig. I-267]. - PEREZ DE VARGAS, (1569), "De Re Metalica, en el qval se tratan mvchos y diversos secretos del conocimiento de toda suerte de minerales, de como se deuen buscar ensayar y beneficiar, con otros secretos e industrias notables, assi para los que tratan los officios de oro, plata, cobre, estaño, plomo, azero, hierro y otros metales. como para muchas personas curiosas...", casa de Pierres Cosin, Madrid, [Ejemplar consultado: Biblioteca privada de Manuel López Acuña]. - NICOLÁS MONARDES, (1574), "Dialogo de las grandezas del hierro y de sus virtudes medicinales, hecho por el doctor Nicolas Monardes, medico de Sevilla", A. Escrivano, Sevilla. - ÁLVARO ALONSO BARBA, (1640), "Arte de los metales : en que se enseña el verdadero beneficio de los de oro, y plata por açogue, el modo de fundirlos todos ...", Imprenta del Reyno, Madrid, [Ejemplares consultados: Madrid, Biblioteca Nacional, sig. R-33711; Madrid, Biblioteca Nacional, sig. R-7731; Madrid, Biblioteca Nacional, sig. R-34149; Madrid, Biblioteca del Palacio Real, sig. I.B-113].

6. - Al margen de la composición que vamos a estudiar, apenas destaca por su extensión un "Libro del Tesoro de la Alquimia" del cual tenemos diversas copias en bibliotecas de Portugal, España, Italia e Inglaterra, atribuido a Alfonso X de Castilla y a Alfonso V de Portugal. Consultar: - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 215-237. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1897), "La Alquimia en España", Tomo II, Imprenta de Fidel Giró, Barcelona, pp. 167-200. - SÁNCHEZ PÉREZ, (1932), "Libro del tesoro falsamente atribuido a Alfonso el Sabio (una nueva copia encontrada en la Biblioteca de Palacio de Madrid)", «Revista de Filología Española», nº 19, pp.158-80. - GUY BEAUJOUAN, (1962), "Manuscrits scientifiques médiévaux de l'Université de Salamanque et de ses colegios mayores", ed. Bibliothèque de l'École des Hautes Études Hispaniques, nº 32, Bordeaux, pp. 79-80. Este legado poético tan escaso contrasta con el de otras nacionalidades. Los manuscritos con rimas en francés, inglés, italiano o alemán son frecuentes entre los siglos XV y XVIII. En Francia e Inglaterra pronto se editaron colecciones con versos en lengua vernácula. Véase: - VV. AA., (1561), "De la Transformation metallique: Trois anciens tractés en rithme françois", Guillaume Guillard et Amaury Wanracore, París, [ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: 26193bis]. - VV. AA., (1652), "Theatrum Chemicum Britannicum. Containing Severall Poetical Pieces of our Famous English Philosophers, who have written the Hermetique Mysteries in their owne Ancient Language. Faithfully Collected into one Volume, with Annotations thereon, by Elias Ashmole, Esq. Qui est Mercuriophilus Anglicus", J. Grismond, Londres.

7. - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica dell'eccellente dottore et caualiero M. Leonardo Fiorauanti bolognese. Diuisa in libri quattro : Nel primo si tratta della creatione de gli elementi, delle quattro stagioni dell'anno, della creatione de l'huomo ... Nel secondo si scrive un nuovo antidotario ... Nel terzo si discorre ... massime sopra diverse infermita, & suoi rimedii. Nel quarto si discorre sopra molte cose filosofiche, con bellissimi trattati di alchimia ... Di nuovo posta in luce", per gli heredi di Melchior Sessa, Venecia, [Ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: 8-TE18-40]. - Existen ediciones posteriores: - L. FIORAVANTI, (1603), "Della fisica dell'eccell. dott. e cau. M. Leonardo Fiorauanti bolognese. Diuisa in libri quattro. Di nuouo posta in luce...", Lucio Spineda, Venecia [Citada por Luanco, no hemos tenido acceso a ningún ejemplar]. - L. FIORAVANTI, (1629), "Della fisica dell'eccell. dott. e cau. M. Leonardo Fiorauanti bolognese. Diuisa in libri quattro. Nelli quali si discorrono molte, & diuerse materie molto importanti... Di nuouo posta in luce. Et con la tauola de capitoli", per Lucio Spineda, Venecia, [Ejemplar consultado: Madrid, Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales sig. FA-106]. - L. FIORAVANTI, (1678), "Della fisica dell'eccell. dott. e cau. M. Leonardo Fiorauanti bolognese. Diuisa in libri quattro. Nelli quali si discorrono molte, & diuerse materie molto importanti... Di nuouo posta in luce. Et con la tauola de capitoli", per Giacomo Didini & Giacomo Zattoni, Venecia, [Ejemplares consultados: Roma, Biblioteca Nazionale Centrale "Vittorio Emanuele II", sg. RM0267; Rockville Pike, U.S. National Library of Medicine, general id. 2344016R (HMD Collection)]. Réne Taylor dice que existe una edición veneciana de 1579. Es una suposición factible ya que en la portada de la edición de 1582 podemos leer "... di nuouo posta in luce...". Puede consultarse: - R. TAYLOR, (1995), "Arquitectura y Magia", Siruela, Madrid, p. 117 (nota 78). EL italiano Giancarlo Zanier apunta una edición todavía más temprana, fechada en 1577: - G. ZANIER, (1983), "Medicina e Filosofia tra '500 e '600", Franco Angeli Editore, Milán, p. 61, n. 1. - No hemos localizado personalmente copias que nos ratifiquen definitivamente esta observación, aunque Pedro Rojas García nos ha señalado un posible ejemplar, sin lugar ni fecha de edición, presentado con título y formato diferente al de otras versiones conocidas, conservado en Francia: - L. FIORAVANTI, "Della fisica del signor Leonardo Fioravanti", s. l., s. f, In 12º [Ejemplar: Nimes, Bibliothèque Carre D'art (fondo de Teología) cota. 2410].

8. - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York), p. 191.

9. - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York), pp. 168-193.

10. -Todos los detalles sobre la forma en la que obtuvo la poesía se encuentran en: - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica…divisa in libri quattro…", per gli heredi di Melchior Sessa, Venecia, pp. 373 y ss. - Algunos comentaristas posteriores han deducido erróneamente que estos versos transcritos por Fioravanti eran los del "Libro del Tesoro" atribuido a Alfonso X. Podemos citar a: - FR. MARTÍN SARMIENTO, (1942), "Memorias para la Historia de la Poesía y Poetas Españoles", Emecé-editores, Buenos Aires, pp. 196-197 [Sarmiento equivoca incluso el número de estrofas al indicar setenta y tres. Es seguro que no realizó un examen personal de texto]. - T. ANTONIO SÁNCHEZ, (1779), "Colección de Poesías Castellanas anteriores al Siglo XV", Antonio de Sancha, Madrid, pp. 153 y ss [enmienda los errores de su predecesor y opina, sin elaborar argumentos plausibles, que se trata de una síntesis del "Tesoro" pseudo-Alfonsí]. - VV.AA., (1864), "Poetas Castellanos anteriores al Siglo XV. Colección hecha por don Tomás Antonio Sánchez, continuada por... don Pedro José Pidal ; y... aumen. é il., á vista de los códices y manuscritos antiguos, por don Florencio Janer", M. Rivadeneyra, Madrid.

11. - J. AMADOR DE LOS RÍOS, (1861-1865), "Historia Crítica de la Literatura Española", 7 vol., Imprenta de José Rodriguez, Madrid, [A partir del t. IV, se imprime a cargo de José Fernández Cancela, el tomo VII, Imp. a cargo de Joaquín Muñoz]. Cf. t. III, pp. 179-194.

12. - Madrid, Biblioteca Nacional, Ms 2151, siglo XVII (1612), ff. 147r-150v.

13. - EUGENIO MAFFEY, (1871-1872), "Apuntes para una Biblioteca Española de Libros, Folletos y Artículos, Impresos y Manuscritos, Relativos al Conocimiento y Explotacion de las Riquezas Minerales y á las Ciencias Auxiliares... Acompañados de reseñas biográficas...", 2 vol., Imp. de J.M. Lapuente, Madrid, t. I, p. 147.

14. - Madrid, Biblioteca Nacional, Ms. 7443, siglo XVI (entre 1559 y 1568). - Es muy probable que el copista de este códice estuviese relacionado con el concejo de Olmillos, pues en las hojas finales aparecen unas cuentas de ese lugar manuscritas con el mismo tipo de letra que el resto de los tratados. - Una descripción de sus contenidos se encuentra en: - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 94-97.

15. - VICENTE GONZÁLEZ RAMOS, (1999), "Un Romance Castellano de Tema Hermético". «Azogue», nº 1, URL: http://www.revistaazogue.com

16. - VV. AA., (1988), "Inventario General de Manuscritos de la Biblioteca Nacional", Ed. Ministerio de Cultura, Dirección General del Libro, Madrid, t. XII, pp. 96-97.

17. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 80-83, cf. p. 81: "...disentimos de la congetura de los autores de la Biblioteca Mineral...".

18. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 100-108.

19. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, p. 181. Constata que Fioravanti no da nombre de autor, que recoge un verso menos y además: "...están trastocadas las octavas 6, 7, 8, 9, 10, 11 [...] y tienen palabras italianas mezcladas con las castellanas".

20. - Al comienzo de su libro ya nos advierte de que saca a la luz sus pasatiempos y no un estudio formal y completo de la alquimia en España. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 5 y 6.

21. - J. GARCÍA FONT, (1995), "Historia de la Alquimia en España", Editorial mra , Barcelona, pp. 192-196, [edición original: Editora Nacional, Madrid, 1976].

22. - ibid. p. 194.

23. - ibid. p. 195: "¿Acaso su práctica se reducía a masticar autoridades?. Eso parece".

24. - DON LOUIS DE CENTELLES, (1979), "Les couplets alchimiques", en «Le Fil d'Ariane», nº 6, pp. 55 y ss.

25. - Se trata del ms 162, fechable hacia mediados del siglo XVII. Consultar: - A. CRUZ CASADO, (1983), "Las Octavas, de Luis de Centellas. (Poesía y Alquimia en el Siglo de Oro)", «Nueva Revista de Enseñanzas Medias», nº 1 [Manojuelo de Estudios Literarios ofrecidos a José Manuel Blecua Teijeiro], pp. 73-83. - Queremos agradecer aquí al propio Antonio Cruz que nos proporcionase tan amablemente las informaciones que le solicitamos sobre este artículo suyo.

26. - J. PERADEJORDI & L. ROBECCHI, (1984), "Las Coplas Alquímicas, Luis de Centelles", en «La Puerta», nº 16, pp. 7-17.

27. - J. ESLAVA GALÁN, (1987), "Las Coplas sobre la Piedra Filosofal de Luis de Centelles", en «Cinco Tratados Españoles de Alquimia», Tecnos, Madrid, pp. 114-129.

28. - Da la fecha de 1552 para el tratado "Della Fisica...", treinta años menos que la correcta. El error es repetido posteriormente por uno de los colaboradores de Eslava en 1987. Véase: - J. GARCÍA ATIENZA, (1995), "Los Saberes Alquímicos", Temas de Hoy, Madrid, p. 205.

29. - Incipit, f. 53v, 11: "Cantus danielis | el me dileta dire bre[ve]mente | tuto il sugeto de larte felis | ... ". Explicit, f. 55v, 3: "...ansi e scrito per pura figura | il vaso la materia la misura | finis". Publicada por primera vez junto a varios textos del Geber latino en 1475, en Venecia, su mayor difusión se debió a su inclusión en la edición de 1599 de "Della transmutatione metallica", consultar: G. B. NAZARI, (1599), "Della transmutatione metallica sogni tre di G. B. Nazari, aggiuntovi di nuovo, la concordanza dei filosofi et loro practica", M. Marchetti, Brescia, ff. 31v-34v. Para los datos biográficos de este Daniele da Capodistria: - M. DE MARCO, (1986), "Dizionario degli Italiani", t. XXXII, Roma, pp. 589-591.

30. - Incipit, f. 97v: "lapis | I. el dia. et la noche lo dos giontos anse de temar por | prinsipales y el covenientes ...". Se siguen de una receta que mezcla latín y español. Finaliza al pie del mismo folio.

31. - Incipit, f. 147r: "Lapis volgare, semper | Sempre dopo che mi parti da voi ho avuto nela memoria | la amorevole compagnia ...". Explicit, f. 151r: "... il quale da bono | praticante si fare In giorni , 40, finis".

32. - El título es el siguiente: Collectanea Alchemica. | Alchemical Manuscript, in medieval Latin & Italian. | [ornamento] | Monastic Collection | of | Instructions, | gathered together from the most esteemed | Works on Alchemy, for preparing the | Philosopher's Stone, | and transmuting Metals into Gold. | Privately compiled by anonymous | Monk, working in Alchemy, | in some secret Laboratory.- | circa 1530. |

33. - Incipit,f. 104r: "Lapis ispanus I. el dia, e, la nochie lo dos gionto anse de temar por prinsipales...". Explicit, f. 104r, 17: "...non vos faldria ne sol ne luna. Finis".

34. - Londes, Wellcome Institute, MS 384, 16 + 338 folios, 245x175mm, mediados del siglo XVI. - Yale, Mellon Collection, MS 35, 259 folios, 205 x 145mm, mediados del siglo XVI.

35. - Por ejemplo: Londes, Wellcome Institute, MS 384, ff. 34r-38r: "Questio an lapis philosophorum valeat contra pestem Jo[annis] B[aptis]te f[ratris]". ff. 117r-146v: "De magni lapidis autore Jo[hanne] baptista f[ratre]". ff. 146v-215r: "Apologia Jo[annis] Ba[ptis]tae contra Jo[annem] Bracesco [sic] pro erroribus per ipsium fatis [sic] in espositione Geberis". ff. 222r-222v: "Epistola Jo[annis] bapt[is]tae f[ratris]". - Londes, Wellcome Institute, MS 385, ff. 188-199: "Frater Johannes Baptista. Vera et aprobatta ars mineralis...".

36. - Por ejemplo: - Yale, Mellon Collection, MS 35, tras la hoja de guarda: "[escudo de la orden franciscana, que pudiera ser de factura ligeramente posterior] Liber primus J:B:F:".

37. - Yale, Mellon Collection, MS 35, ff. 110r-179v. En italiano y latín.

38. - Londes, Wellcome Institute, MS 384, ff. 146v-215r.

39. - Por ejemplo, el MS 36 de la Mellon Collection aporta datos sobre el alquimista Giovanni de Nani, al que denomina "...fratrum predicatorum de viterbio datum suo fratri Domenico...", determinando fecha y localización para su obra: "In viterbio Anno domini 1470. 8. octobris.", mientras el MS 34 sólo da su nombre. Si tomamos como muestra la "Canzione" de Regino Danielli vemos que el MS 34 es muy parco en la presentación: "Cantus danielis" mientras que el MS 36 se extiende en explicitar la cuna de Danielli en Capo d'Istria austinopolis: "Cantus Danielis Iustini politani ".

40. - Su cronología no ha sido bien trazada, aunque es autor de dos tratados muy conocidos en su tiempo: JOANNES PANTHEUS, (1518), "Ars transmutationis metallicæ cum Leonis X ponti... max. et conci. capi. Decemvirorum Venetorum edicto", Guiovanni Tacuino, Venecia. - JOANNES PANTHEUS, (1530), "Voarchadumia contra alchimia, ars distincta ab alchimia et sophia, cum addictionibus, proportionibus, numeris et figris opportunis", Guiovanni Tacuino, Venecia. Tanto el "Ars transmutationis metallicæ" como la "Voarchadumia" fueron reeditadas en París, en 1550, por G. Gaultherot.

41. - G. BRACESCHO, (1544), "La Espositione di Geber Philosopho di misser Giouani bracescho da Iorci noui, nella quale si dichiarano molti nobilissimi secreti dela natura", Gabriel Giolito di Ferrarii, Venecia. Reeditado con diversas modificaciones en 1548, 1551 [hay un ejemplar en la Biblioteca Nacional de Madrid, signatura 3-4299], 1561 [versión ampliada por el propio Bracesco, incluida en la "Verae alchimiae..." de Gratarolo, pp. 3-48] y 1562. Existe una edición contemporánea: - G. BRACESCHO, (1967), "La Espositione di Geber Philosopho", Archè, Milán. - Información sobre esta obra y su autor en: - SERGIO TIRA, (1998), "L'alchimia di Geber riveduta da Giouanni Bracesco da Orzi Nuovi nell 1544", en Franco Calascibetta (ed.), "Atti del VII Convegno Nazionale di Storia e Fondamenti della Chimica. L'Aquila, 8-11 Ottobre 1997", Edita: Accademia Nazionale delle Scienze detta dei XL, Roma, (Estratto dal Volume 115, "Memorie di Scienze Fisiche e Naturali", «Rendiconti della Accademia Nazionale delle Scienze detta dei XL», serie V, vol. XXI, parte II, tomo II, 1997), pp. 95-108. Otros detalles sobre Bracesco en: - ANDRZEJ NOWICKI, (1969), "Giovanni Bracesco e l'antropologia de Giordano Bruno", Libreria Scientifica Editrice, Nápoles.

42. - Londes, Wellcome Institute, MS 384, ff. 146v-215r.

43. - G. TAULADANO, (1561),"In eundem Braceschum Gebri interpretem, animadversio, authore Ioanne Tauladano", en G. Gratarolo (ed.), «Verae alchemiae artisque metallicae», Henricum Petri et Petrum Pernam, Basilea. - Sobre la influencia de la obra de Bracesco, sus teorías, su estilo, sus transformaciones posteriores, consultar: -SYLVAIN MATTON, (1995), "La figure de Demogorgon dans la litterature alchimique", en Didier Kahn; Sylvain Matton (eds), «Alchimie, art, histoire et mythes», pp. 265-346, cf. pp 292-308.

44. - El catálogo de la Mellon Collection considera fundamentalmente las referencias al norte de Italia en algunas frases y ve en él un genovés vinculado de algún modo a lo español. Dice así: "The unusual spellings found in all three volumes and the mixture of Latin, Italian, and Spanish are not at all inconsistent with the possibility that Johannes Baptista F----- was a resident of the bustling port city of northeast Italy where Spanish would have been frequently heard [...] Ms 36 is by the compiler of MSS 34 and 35, a certain Johannes Baptista F----- probably a Genoese...". Consultar: - IAN MACPHAIL, (1968), "Alchemy and the Occult: A catalogue of books and manuscripts from the collection of Paul and Mary Mallon given to Yale University Library, 4 vols., Yale Univ. Libr., New Haven, (detalle de los manuscritos 35 y 36).

45. - GIOVANNI BATTISTA FR. & MARZIALE AVANZI, (1575), "Breve et utile trattato, e necessario à ciascuno per conservarsi sano nel tempo della peste, & per liberare chi da quella fosse gia tocco, & infettato sicuramente", Venecia [ejemplar consultado: Rockville Pike, U.S. National Library of Medicine, general id. 2247016R (HMD Collection)]. El libro contiene una carta fechada el 24 de diciembre de 1575 en la que Marziale Avanzi dice ser el promotor de la edición. En el folio 3v declara el nombre del redactor original: "Padre Frate Giovan Battista Napolitano delli Heremitani". Ya comenzado el tratado leemos: f. 5r "...io frate Giovanni Battista Napolitano Frate dell' ordine Heremitano del glorioso santo Augustino, essendo stato eletto ... medico & governatore del loco diputato per cura de detti infermi ...". Francesco La Cava comenta, con escasos datos, que existe una edición veneciana de 1556 titulada "Opera et tractato che insegna molti dignissimi secreti contro la peste" en la cual aparece una atribución ligeramente diferente: "Frate Girolamo Battista Napolitano". - FRANCESCO LA CAVA, (1945), "La peste di S. Carlo", U. Hoepli, Milán, p. 215. No hemos podido confirmarlo. Si no es un error tipográfico (algo no descartable) las diferencias de nombre y de título deben cuanto menos ser apreciadas.

46. - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York), p. 362.

47. - Yale, Mellon Collection, MS 35, ff. 110r-179v: "Experimenta extracta de libris medicorum et philosophorum".

48. - Londes, Wellcome Institute, MS 384, ff. 34r-38r: "Questio an lapis philosophorum valeat contra pestem Jo[annis] B[aptis]te f[ratris]". - Este pequeño texto ha sido editado como anónimo en la "Verae alchemiae..." de Gratarolo: - (1561), "Quæstio an lapis Philosophorum valeat contra pestem", en G. Gratarolo (ed.) «Verae alchemiae artisque metallicae», 2 vols., Henricum Petri et Petrum Pernam, Basilea, cf., t. II, pp. 259-262. - Se reeditó en el tercer volumen del "Theatrum Chemicum..." estampado por Lazarus Zetzner: - VV.AA., (1602-1661), "Theatrum chemicum, præcipuos selectorum auctorum tractatus de chemiæ et lapidis philosophici antiquitate, veritate, iure, præstantia et operationibus, continens...", 6 vols., Lazarus Zetzner, Ursel / Strassburg, vol. III (ed. en 1602), pp. 181-186: "Quæstio an lapis Philosophorum valeat contra pestem".

49. - Barcelona (España), Col. Priv. Jordi Puig, Leg. 15, Siglo XVI (1571), firmas en folios: 2v, 23v, 56r, 103v y 143v.

50. - El soneto es reconocido como un tipo de estrofa que exige por parte del escritor un gran dominio de la materia poética. Prácticamente todos los preceptistas del sigo XVI comentan la dificultad en su elaboración y la necesidad de desarrollar en él una temática grave, acorde con lo elevado de la forma.

51. - Algunas composiciones líricas de estos autores editadas recientemente: - A. BRONZINO, (1988), "Rime in Burla", a cura di F. Petrucci Nardelli, Istituto dell'Enciclopedia Italiana, Roma. - L. B. ALBERTI, (1975), "Rime", en «Rime e Versioni Poetiche», a cura di G. Gorni, Ed. Ricciardi, Milano-Napoli.

52. - Incluidas en: - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica…divisa in libri quattro…", per gli heredi di Melchior Sessa, Venecia, pp. 380-386.

53. - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica…divisa in libri quattro…", (op. cit.), p. 374.

54. - W. EAMON, (2000), "Alchemy in Popular Culture: Leonardo Fioravanti and the Search for the Philosopher's Stone", en: «Early Science and Medicine», vol 5, nº 2, pp. 196-213, cf. p. 205.

55. - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica…divisa in libri quattro…", (op. cit.), pp. 352-365.

56. - Es muy dado a este tipo de halagos aparatosos. Véase: - L. FIORAVANTI, (1582), "Della Fisica…divisa in libri quattro…", (op. cit.), p. 373-374.

57. - VV. AA., (1962), "Inventario General de Manuscritos de la Biblioteca Nacional", Ed. Ministerio de Educación Nacional, Madrid, t. VI, pp. 62-63. - VV. AA., (1998), "Catálogo General de Manuscritos de la Biblioteca Nacional con Poesía en Castellano de los Siglos XVI y XVII", Ed. Arco Libros, Madrid, t. I, pp. 167-168.

58. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 100-108.

59. - J. RAMÓN DE LUANCO, (1897), "La Alquimia en España", Tomo II, Imprenta de Fidel Giró, Barcelona, pp. 27-40.

60. - F.J. PUERTO SARMIENTO, (1978), "La Alquimia en la España del Siglo XVII, a través de un manuscrito existente en la Biblioteca Nacional de Madrid", 2 vols., Tesis Doctoral inédita, Universidad Complutense de Madrid, [localización: U. Bibl. de Tesis-Inéditas, sig. T-9188]. - G. FOLCH JOU; F.J. PUERTO SARMIENTO, (1979), "Los Manuscritos Alquímicos Seudolulianos Conservados en la Biblioteca Nacional de Madrid", en «Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia», 30 (119), pp. 227-242, cf. pp. 231-232. - G. FOLCH JOU; F.J. PUERTO SARMIENTO, (1979), "Relaciones entre Alquimia y Farmacia a través de los escritos de un Médico Español: Francisco de Ancona", en «Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia», 30 (117), pp. 45-55, cf. p. 48.

61. - En la primera hoja se lee: "IHS Hispali", lo que indica una relación con Sevilla. La fecha aparece en el f. 31r.

62. - Toda esta primera sección se relaciona con otra traducción castellana de fecha muy similar conservada en Escocia. - Glasgow University Library, Col. Ferguson Ms. 19.
Comienzos del siglo XVII, 52 folios, en castellano, con los títulos en italiano, el tipo de letra coincide con la de los primeros 50 folios del Ms 2151 de Madrid por lo que parece del mismo "Cosmus Damianus Vantalloli Tarrachonensis ". Su contenido se distribuye de la siguiente forma:
f2-3r Cedula ritrovata nelle scritture St Andrea Ognibene dopo la sua morte, de verbo ad verbum. Acqua secreta.
f5-6r Opera senza titulo. Qui comincia come si ha da curare il negro di Giove.
f7-52 Elucidarius Christopherus Parisiensis.

63. - FRANCISCUS DE ANCONA, "Apología médica Franciscus de Ancona medici, ac chirurgo hispalensis, in qua disputatur, au liceat caput gumoritatibus affectum, vuguento ex argento viuo lenire", In 4º, S.l. : [s.n.], ni a. (i.), ejemplar de la Biblioteca Nacional de Madrid, Signatura 2-32762. - A partir de la lectura de este libro el bibliógrafo Hernández Morejón explica que "...era natural de Sevilla...". La base de tal afirmación está en la expresión "ac chirurgo hispalensis" que en realidad se refiere a la ciudad donde ejercía y no a su lugar de nacimiento. - ANTONIO FERNÁNDEZ MOREJÓN, (1846), "Historia Bibliográfica de la Medicina Española", tomo V, Madrid, p. 85. El propio Ancona se define como "napolitano" en dos manuscritos autógrafos: - Biblioteca Nacional de Madrid, Ms 2151, siglo XVII (1612), f. 146r. - Granada, Biblioteca Universitaria, caja B 71(1), siglo XVII (1638). El manuscrito granadino es descrito en: - J. RAMÓN DE LUANCO, (1889), "La Alquimia en España", Tomo I, Imprenta de Redondo y Xumetra, Barcelona, pp. 151-161. - Sobre todo este asunto, consultar: - G. FOLCH JOU; F.J. PUERTO SARMIENTO, (1979), "Relaciones entre Alquimia y Farmacia a través de los escritos de un Médico Español: Francisco de Ancona", en «Boletín de la Sociedad Española de Historia de la Farmacia», 30 (117), pp. 45-55.

64.- Varios investigadores españoles han visto en Cristoforo Parisiense un autor francés. Las razones alegadas son tanto su nombre, presuntamente vinculado a la capital del Sena, como la expresión "Cristophori Galici" que podemos apreciar en algunas versiones (p. ej. Yale University Library, Mellon Collection Ms. 24, Siglo XVI [c. 1505], f. 40v). Sin embargo en el estado actual de las investigaciones las informaciones mejor documentadas revelan que fue un italiano residente en Roma y asociado a los círculos alquímicos venecianos. Sobre ello se pronuncian: - G. CARBONELLI, (1925), "Sulle Fonti Storiche della Chimica e dell'Alchimia in Italia", Roma, pp. VIII, 27 y 29. - LYNN THORNDIKE, (1992), "A History of Magic and Experimental Sciences" Columbia University Press, New York, 8 vols., Reprint., Original published 1923-1958, vol IV, pp. 349-351. - M. PEREIRA, (1989), "The Alchemical Corpus attributed to Raymond Lull", Warburg Institute, Londres, pp. 44-46. - La tradición manuscrita de su obra literaria brota y florece en tierras de Italia. Algunas muestras:

I - Módena, Biblioteca Estense Ms. Latin 359 (Alpha L 5, 13), siglo XVI.
1. Incipit summa minor seu summetta eximi Doctoris Christophori Parisiensis.
2. Incipit particulari tam ad Album quam Rubeum Magistri Christophori Parisiensis.
[Andr. Ognibene, lettera.]

II - Glasgow University Library, Col. Ferguson MS. 127, siglo XVI.
88 pp. + 9 folios. Siglo XVI. En italiano, con títulos en latín.
pp. 1-36 Summetta. In Nomine Sanctae et individuae Trinitatis incipit Summa Minor clarissimi et excellissimi ph[ilosoph]i Christophori Parisiensis de corpore Magni et Divini lapidis philosophorum.
pp. 37-60 Violetta quod opus ab ipso merito vocat cithera [sic] seu violetta artis transmutationis metallorum.
pp. 63-87 Lucidarium tractatus de [...] magni lapidis philosophorum summa vegetabile et minerale clarissimi philosophi Christopheri Parisiensis, quod merito Lucidarium ab ipso vocatum est, sive summa major artis transmutatoriae corporum metallorum.
[2 folios al final del códice] Alphabeti diversi. [Se trata de un alfabeto con los términos utilizados en las obras de Cristoforo Parisiense y Ramón Llull.]

III - Venecia, Biblioteca Marciana MS. Italiano III. 38 [5010]. Siglo XVI.
pp. 1-35 Summeta minor de compositione Lapidis philosophorum.
pp. 36-60 Violetta artis transmutationis corporum metallorum.
pp. 61 Lucidarium artis transmutationis.
[Nota al final : "Ex autentice fideliter exemplatum anno ab incarnatione domini 1489, die 18 octobris, a quo postea secundo exemplare hoc nostrum praesens exemplum eduximus, manu propria mea Antonii Autuvisii Rosciolini Tarvisini mexaratum Venetiis 14 quintillis 1507".]

IV- Venecia, Biblioteca Marciana MS. Italiano III. 44 [5053]. Siglo XVI.
1. Summetta.
2. La Summa Maggior, ovver Lucidario della gram pietra.
3. La Cithera.
4. Letter varie.

V - Florencia, Biblioteca Nazionale, FN 02-03-025, mediados del siglo XVI. 305 folios.
ff. 176-198 Incipit opus de transmutatione corporum editum per excell. philosophum ac theologum magistrum Christophorum Parisiensem quod ab ipso appellatur Summa minor artis transmutationis metallorum.
ff. 199-213 Qui incomincia la Summetta di M. Christoforo Parisiense De transmutatione. Ad Andream Ognibene veneto.
ff. 214-220 Medulla magistri Christophori Parisiensis de la Summeta.
ff. 221-223 Copia de una lettera per el soprnominato M. Christophoro Parisino in nome de Andrea Ogniben a M. Christophoro da Recanati lectore a Padoa per dechiaratione sopra alchuni dubii de l'arte.
f. 225 Cantilena ad Andrea Ogniben veneto per el famosissimo dottor Christophoro da Parise.
f. 227 [Dos sonetos sobre alquimia.]
ff. 228-248 [Copia de las cartas a Ognibene.]
f. 239 Accurtation de domino Cristofano Parisiense.
ff. 251-257 Ademari expositio dictorum Geberis philosophi Gulielmum fratrem.
ff. 260-301 Magistri Iohannis florentini Incipit liber de magni lapidis compositione editus a magistro artis generalis florentino.
f. 303 Alchimiae laudes. Ego sum angelica sapientia, fulgur coelestis millitiae.
f. 304 Faustus Sabeus ad lectorem.
f. 304 De plumbo [pequeño extracto del "Speculum" de Vincenzo Bellovacense.]

VI - Florencia, Biblioteca Nazionale MS. Palat. 755 [537 - E, 5,10,49.] Siglo XVI, , 91 folios, papel.
Christophorus Parisiensis. Incominico l'Apertorio Alfabetale dell' Ecc. Cristoforo Parisino...

VII - Florencia, Biblioteca Nazionale MS. Palat. 886 [778 - 21,2.], siglos XV y XVI, 129 folios, papel, varios formatos.
ff. 22r-39r [Recetas con diversos secretos de medicina, alquimia y química, en italiano.]
ff. 64r-100v Christophorus Parisiensis, [cartas sobre alquimia a Andreas Ognibene.]
ff. 103r-114r Lucidario di transmutare li metalli formalmente e sostanzialmente.
ff. 114v-128v y ff. 65r-66v Modo de conoscere dove si trova il Mercurio, e la sua preparazione, e prima putrefazione, cioè la Dottrina dell' Arbore fisico.

VIII - Yale University Library, Mellon Collection Ms. 24, principios del siglo XVI [c. 1505.], 91 folios, en italiano y latín.
Cristoforo Parigino. La somma minore, 1471. En italiano.
Cristoforo Parigino. Cithara, or Medolla della Summeta, 1474. En italiano.
Cristoforo Parigino. [Carta a Andrea Ognibene, 1473.]. En italiano.
Cristoforo Parigino. [Tres alfabetos alquímicos en latín]. En latín e italiano.
Cristoforo Parigino. [Pequeño texto no identificado]. En italiano.
Cristoforo Parigino. [Carta a Andrea Ognibene, 1476 ]. En italiano.

IX -Yale University Library, Mellon Collection M2. 31, Siglo XVI [c. 1540.], 168 folios, en italiano y latín.
L'Abecedario de la Summetta, and L'Abecedario de la Violetta.
[Carta a Andrea Ognibene, 1473.]
[Alfabeto alquímico en latín]
La Summetta, or La Somma minore, 1470.
La Cithara, or La Violetta, 1474.
Lucidario.
L'Abecedario del Lucidario.
[Carta a Andrea Ognibene, 1476.]
Fra Vielmo. [Carta a Andrea Ognibene, 1476.]
[Carta a Andrea Ognibene, 1477.]
[Carta de Andrea Ognibene a Cristobal de Recaneto, 1470.]

65. - Florencia, Biblioteca Nazionale MS. Palat. 1051 [978 - 21,3.], mediados del siglo XVI. 130 folios.
I. ff. 5-12 [Recetas en latín e italiano.]
II. ff. 13-108 [Extractos en italiano de varios tratados, incluidos:]
1. ff. 16-24 Raimon Lull, Epistola accurtationis Regi Ruberto.
2. ff. 30-33 Arnaldo de Villa Nova, Epistola de lapide philosophorum.
3. ff. 36-82 Christophorus Parisiensis. Lucidario o Summa Maggiore.
III. ff. 88-94 [Recetas en latín.]
IV. ff. 95-108 [Proposiciones sobre las sentencias de varios autores: Alphraganus, Anaxagoras, Democritus, Hermes, Arnaldus, Lulius, Tomás de Aquino, etc.]
V. ff. 111-122 [Anotaciones sobre las recetas.]

66. - Poppi, Biblioteca Comunale, ms 59, Siglo XV, Título general "Liber secretorum", contenidos:
1. Modus extrahendi [quatuor] elementa de Celidonia et retificandi eandem et operationes eorumdem.
2. [Recetas].
3. Practica verissima ad verum lapidem philosophorum
4. Liber xvj electuariorum.
5. Lucidario dell'arte transmutatoria de Cristoforo Parisiense [Letra del siglo XVI].
6. [Recetas].
7. Incipit liber cuiusdam philosophi etc. Aliqui dicunt eum librum Saturni.
8. Epistola solis ad lunam crescentem.
9. Opus Danielis Philosophi. El me dilecto de dire brevemente Tucti secreti dell'arte felici / Ma tucti li gravi mali.
10. [Recetas].
11. Incipit liber Lilii.
12. Incipit epistola accurtationis lapidis benedicti Raymundi Lulli celeberrimi philosophi ad regem Robertum.
13. Incipit liber paritatis Geberis.
14. Incipit liber Geberis de perfectionis investigatione.
15. [Recetas].
16. Incipit lapis philosophorum Nicolai Anglici.
17. Incipit aqua Mercurii magistri Petri de Vienna.
18. [Receta].
19. Copia libri notabilissimi viri Francisci Soderini.
20. Aqua da fare belle le donne la quale usava la duchessa de Urbino.
21. [Pequeño texto en letra del siglo XVI.]

67. - A. CRUZ CASADO, (1983), "Las Octavas, de Luis de Centellas. (Poesía y Alquimia en el Siglo de Oro)", «Nueva Revista de Enseñanzas Medias», nº 1 [Manojuelo de Estudios Literarios ofrecidos a José Manuel Blecua Teijeiro],pp. 73-83.

68. - A. GARCÍA Y GARCÍA; F. CANTELAR RODRÍGUEZ; M. NIETO CUMPLIDO, (1976), "Catálogo de los Manuscritos e Incunables de la Catedral de Córdoba", Ediciones de la Universidad Pontificia de Salamanca, Salamanca, [Archivo Catedralicio, Ms 162].

69. - Madrid, Biblioteca Nacional, Ms. 7443, siglo XVI (entre 1559 y 1568). Hemos realizado su transcripción en la primera parte de este artículo nuestro, apdo.: "Ediciones Precedentes dedicadas a Luis de Centelles...".

70. - Madrid, Biblioteca Nacional, Ms 2151, siglo XVII (1612), f. 34r.

71. - Trataremos más adelante la identidad del poeta.

72. - J. ARCE, (1982), "La Spagna in Sardegna", Editrice TEA, Cagliari, p. 170: "Sotto un certo profilo, anzi, è molto significativo il doppio e contemporaneo riferimento alle letterature italiana e spagnola, il gusto per la mescolanza dei generi e delle lingue (catalano, castigliano e sardo) che non raggiungono l'arte ma sfiorano, talvolta, la buona letteratura e confermano quella che può apparire come una linea di tendenza della cultura isolana: ovverosia la capacità di trovare se stessa nel confronto con gli altri...".

73. - El lector ha de tener presente la anarquía lingüística propia del siglo XVI, momento en que ya no es viable la norma gráfica del medievo y en que los escritores actúan de muy diverso modo. Algunos siguen respetando anacrónicamente la vieja norma -aunque no refleje el sistema fonológico del XVI- (sería el caso de Centelles); mientras que otros toman posturas renovadoras y se niegan a seguir manteniendo un sistema gráfico ajeno al estado fonético de la lengua iniciando un proceso de renovación gráfica. Lo que encontraremos en las diferentes copias de las "Coplas" no es más que un testimonio del desconcierto lexicográfico característico de su momento histórico.

74. - Por el contrario, el grupo "ct", como en (24:8) "imperfection", es habitualmente sustituido por "tt".

75. - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York), pp. 134 y ss.

76. - Para una introducción en este tema recomendamos la obra "Science and the Secrets of Nature" de William Eamon.

77. - J. FERRERAS, (1993), "Didactismo y Arte Literario en el Diálogo Humanístico del Siglo XVI", «Criticón», 58, pp. 55-102.

78. - S. LÓPEZ POZA, (1993), "Las Trecientas de Luis Hurtado, manuscrito de la Biblioteca de la Universidad de Santiago, en «Salina. Revista de Lletres», nº 7, pp. 53 y ss.

79. - L. CARRETER, (1953), "La Poética del Arte Mayor Castellano", en «Studia hispanica in Honorem R. Lapesa», Madrid, Gredos, I, pp. 343-378.

80. - H. HATZFELD, (1970), "Estudios sobre el Barroco", Ediciones Gredos, Madrid, p. 310.

81. - El más notable la obstinada colocación del verbo al final de los versos.

82. - Aunque ajeno a la alquimia, un ejemplo de similares objetivos es: - LICENCIADO MOLINA, (1550), "Descripción del Reino de Galicia y de las cosas notables dél", en casa de Agustín de Paz, Mondoñedo. Redactado en coplas de arte mayor, con glosas, en las que canta y enumera con bastante rudeza y prosaísmo curiosidades de la región, los montes, ríos, puertos y la heráldica de varios linajes gallegos.

83. - Citada en la nota nº 6.

84. - PORQUERAS MAYO, (1986), "La teoría poética en el Renacimiento y Manierismo español", Barcelona, p. 39. - A. VILANOVA (1953), "Preceptistas españoles de los siglos XVI y XVII", en «Historia de las literaturas hispánicas», III, Barcelona, p. 575 y ss.

85. - GIOVANNI AURELIO AUGURELLO, (1515), "Chrysopoeiae libri III. Et Geronticon liber primus", impressit Simon Luerensis, Venecia. - Sobre la transcendencia de esta obra en su tiempo: - Z. VON MARTELS, (2000), "Augurello's Chrysopoeia (1515) a Turning Point in the Literary Tradition of Alchemical Texts", en «Early Science and Medicine », vol. V, nº 2, pp. 178-195. - FRANK GREINER, (2000), "Les métamorphoses d'Hermès", Honoré Champion, París, pp. 364-393.

86. - Creemos conveniente hacer notar aquí que el copista del Ms B lo presenta precisamente como un: "Amirabi discorso...", esto es, un discurso o reflexión sobre una materia concreta. Destaca con ese vocablo la importancia de su tema y no tanto la de su estética.

87. - El introductor de esta tendencia fue Micer Francisco Imperial, autor del "Dezir de las Siete Virtudes", obra en la que aparecen traducidos algunos pasajes de la Divina Comedia de Dante.

88. - Citamos a este autor francés únicamente como muestra de que ciertos recursos estilísticos eran aplicados por los alquimistas desde tiempo atrás en su obra lírica. Aclarado este punto hemos de añadir que no consideramos a Fontainne como una fuente directa de Centelles pues su eco en la España del siglo XVI es prácticamente inexistente. - J. DE LA FONTAINNE, (1547), "La Fontaine des Amoureux de Science, Compilee par maistre Jean de la Fontaine de Valenciennes. Reveue & mise en son entier avec les Figures, par maistre Antoine du Moulin Masconnois", Jean de Tournes, Lyon, [ejemplar consultado: Madrid, Biblioteca de D. Francisco Zabálburu, cota: 41-119]. Redactado originalmente en 1413, primera edición en 1506 (Antoine Vérard, París), reediciones en París y Lyon en 1521, 1561, 1562, 1571, 1589].

89. Estamos preparando la edición: - LUIS DE CENTELLES, (2002), "Carta de Luis de Centelles al Doctor Manresa", texto presentado y editado por Elena Castro Soler, «Azogue», nº 5, URL: http://www.revistaazogue.com

90. - ANTOINE CALVET, (1995), " Les alchimica d'Arnaud de Villeneuve à travers la tradition imprimée, XVI-XVII siécles. Questions bibliographiques.", en Didier Kahn; Sylvain Matton (eds), «Alchimie, art, histoire et mythes», pp. 157-190.

91. - Las sentencias del cuarto libro "Meteorológico" extractadas por Luis de Centelles tienen mucho que ver con las indicadas en la primera parte de "Rosarium" pseudo-Arnaldiano tanto en el tema que abordan como en la forma en que son interpretadas. Es más, personalmente pensamos que nuestro autor no ha realizado una consulta directa del tratado aristotélico completo sino que se basa en las frases comentadas en los capítulos II y IX del propio "Rosarium". No estamos ante un comportamiento excepcional de nuestro poeta. Algunos discursos sobre metafísica y filosofía natural aristotélica son utilizados como sustento teórico por otros alquimistas del Renacimiento. - RENAN CROUVIZIER, [en prensa], "Thèorie de la matière, aristotélisme et practique alchimique á la Renaissance", Sylvain Matton; Cristina Viano (eds.), «L'alchimie et ses modèles philosophiques: à la recherche d'une tradition platonicienne», Actas del seminario Théories philosophiques et alchimiques de la Matière (París, Univ. de la Sorbona, 1996-1998), en preparación.

92. - Su difusión es muy amplia en la Edad Media y se prolonga hasta el periodo renacentista. La versión más extensa incluye pequeños conceptos alquímicos junto a una transcripción de la celebérrima "Tabula smaragdina". - W. F. RYAN & CHARLES B.SCHMITT (Eds.), (1982), "Pseudo-Aristotle The Secret of Secrets, Sources and Influences", The Warburg Institute, Londres.

93. - Este breve documento cuestiona la paridad de cualidades entre los productos artificiales y los productos naturales. Su autor original fue Avicena (980-1037), más concretamente se trata de una serie de párrafos perteneces al apartado sobre los minerales de su Kitab al-Shifa'. En torno al año 1200 el fragmento fue vertido al latín por Alfred de Sareshel junto a los escritos meteorológicos de Aristóteles (dentro del cuarto y último libro), de ahí su atribución al Estagirita. En muchas ocasiones se cita simplemente por su incipit: "sciant artifices". - WILLIAM R. NEWMAN, (1989), "Technology and Alchemical Debate in the Late Middle Ages", en: «Isis», nº 80, pp. 423-445. - En este caso también pensamos que Centelles no ha tomado la frase directamente del "De conglutinatione..." o de cualquier versión de los "Meteorologicum libri IV" que la incluya, sino que se basa en la segunda parte del "Rosarium" pseudo-Arnaldiano (cap. IV), uno de sus principales libros de cabecera. De hecho Arnau es el único autor recomendado tanto en la carta a Manresa como en las coplas.

94. - Nuremberg, Germanisches Nationalmuseum, ms 80061, f. 26r.

95. - Nos lo aclara el texto que acompaña a la pintura: - Nuremberg, Germanisches Nationalmuseum, ms 80061, f. 20v: "Wye man dy elementa schol wider zu sammen bringer, daz ist hie all vor geleret, zu einem gantzen ede künde wir ez in der gerehtikeit der waren gotheit wol gründen. Amen. Was ist amen?". Sobre este tema consultar: - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", Editions Le Sycomore, París, pp. 165-171.

96. - Nuremberg, Germanisches Nationalmuseum, ms 80061, f. 76r.

97. - E. MÂLE, (1925), "L'Art religieux á la fin du Moyen Age en France", Armand Colin, París, p. 211. Mâle considera que el tema aparece en 1505 en forma de xilografía. Años después Louis Réau indicaría la presencia de numerosas muestras desde mediados del siglo XV y pone como ejemplos la Capilla de Notre Dame en Cahors y un Retablo de Santa Ana conservado en el Museo Histórico de Franckfurt. - LOUIS RÉAU, (1996), "La Iconografía del Arte Cristiano", ed. Del Serval, Barcelona, t. I, vol. 2, pp. 86-88. Sería la profesora Levi D'ancona quien evidenciase que es una composición habitual en los primeros años del siglo XV, es decir, coincidente con los manuscritos alquímicos que proponemos. - M. LEVI, (1957), "The Iconography of the Inmaculate Conception in the Middle Ages and Early Renaissance", New York, p. 26-39, ill. 6, 9 y 7 [esta última ilustración es exactamente igual a la del "Livre de la Sainte Trinité", lo que viene a demostrar nuestra tesis]. En la doctrina cristiana el dogma de la Inmaculada Concepción y el de la Maternidad Virginal van de la mano. Son desarrollados por los primeros teólogos aludiendo a una profecía del Antiguo Testamento: "He aquí que la Virgen grávida dará a luz a un Hijo, y le llama Emanuel" (Is. 7. 14). El concepto religioso de Immaculata Conceptione parte de la definición de Gratia plena referido a María en el "Evangelio" de Lucas (Lc. 1, 28). La saludación angélica, Ave Maria gratia plena, indicaría supuestamente que la Virgen no tiene Pecado Original y por tanto está fuera del alcance de satán. Los exegetas hicieron notar su analogía con la visión de la mujer preñada del "Apocalipsis" que escapa del dragón: "Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer revestida del sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre la cabeza. Estaba encinta..." (Ap. 12, 1-2). Esta es la imagen que se aplicó habitualmente en su iconografía. El dogma es aprobado en 1477 por el Papa franciscano Sixto IV y aceptado por la Facultad de Teología de la Sorbona en 1496. - BERNARDINO DE BUSTIS, (1904), "Officium et Missa de Immaculata Conceptione (1480)," en «Acta Ordinis Fratrum Minorum» 23, fasc. 12. - Sigue presente en el actual credo: - IOANNES PAULUS EPISCOPUS, (1993), "Catecismus Catholicae Eccelsiae", Pars prima professio fidei, Sectio secunda (Caput secundum), Articulus 3 «Iesus Chrustus conceptus est de Spiritu Sancto natus ex Maria Virgine»: "Deus in descendentia Evae Virginem elegit Mariam ut Filii Sui esset Mater. Illa, gratia plena est praecellens Redemptionis fructus: ipsa est a primo instanti conceptionis suae a labe peccati originalis prorsus immunis praeservata et pura ab omni peccato personali toto vitae suae permansit decursu. Maria est vere Mater Dei propterea quod Mater est aeterni Filii Dei, hominis facti, qui est Deus Ipse. Maria permansit Filium suum concipiens Virgo, pariens Virgo, Virgo gravida, Virgo feta, Virgo perpetua: toto esse suo est ancilla Domini...".

98. - Las explicaciones se encuentran en los folios 77v y 105v. - Veasé: - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", (op. cit.), pp. 145-146.

99. - MICHELA PEREIRA; BARBARA SPAGGIARI, (1999), "Il Testamentum Alchemico attributo a Raimondo Lullo: edizione del testo latino e catalano dal manoscritto Oxford, Corpus Christi College, 244", Edizioni del Galluzzo, Tavarnuzze (Florencia), p. 12: "Illa naturam Deus creavit de nichilo in unam puram substanciam, quam vocamus quitam essentiam, in qua tota naturam comprehenditur. De istius substance, divise in tres partes secundum essenciam, parte puriori creavit deus angelos; de secunda creavit celum et planetas et omnes stellas; de tercia parte, que erat minus pura, creavit Deus istum mundum in isto modo".

100. - Ibid., p. 134: "Et ex omnibus istis, verumptamen magis in una re quam in alia, propinquissime reperitur et de maiori abundancia et magis adherens cum propiis substanciis et naturis metallorum, secundum quod magis continetur in se de spiritu quinte essencie...". - En la página 104 el autor expone que es por medio del cierto "mercurio" o "argento vivo" como el alquimista maneja en la práctica esta quintaesencia: "Fili, ista terra est nostra magnesia, in qua stat nostrum secretum; et sine illa numquam potest fieri. Fili, certitudo nostre sciencie est coagulacio nostri argenti vivi; immo nostrum finale secretum est coagulacio nostri argenti vivi in terra magnesie cum ingenio certi regiminis. Fili, spiritus quinte essencie est in nostra magnesia; et nostra magnesia est argentum vivum tale, ut diximus...".

101. - Ibid., p. 160: "Iccirco, fili, necessarium est tibi quod tu custodias bene naturam spiritus quinte essencie, si tu vis aliquid facere, qui descendit a re prima tanquam a forma formarum, que ponitur in supradictis quattor naturis honorabilibus, et ideo vocatur anima quattuor elementorum et lux et claritas et lumen clarum et spiritus quinte essencie".

102. - M. PEREIRA, (2000), "Heaven on Earth: From the Tabula smaragdina to the Alchemical Fifth Essence", en: «Early Science and Medicine», vol 5, nº 2, pp. 131-144, cf. p. 142.

103. - Barbara Obrist aprecia que el Cristo crucificado es sistemáticamente identificado con el argento vivo en todo el "Livre de la Sainte Trinité".

104. - MASILIO FICINO, (1498), "De Vita libri tres", Venecia, libro III [De vita coelitus comparanda], cap III, p. 102: "Talem utique spiritum ex auro vel ex alio rite tractum atque seruatum, elixir Arabes astrologi nominant. Sed ad mundi spiritum redeamus, per quem mundus generat omnia, quandoquidem & per spiritum propium omnia generant, quem tum coelum, tum quintam essentiam possumus appellare". - Este tratado lo redactó orgininalmente entre 1480 y 1489. Conoció una enorme popularidad, al punto de que, solamente en latín, se han cifrado 36 ediciones diferentes durante el siglo XVI. Consultar: - J. R. CLARK, (1986), "Roger Bacon and the Composition of Masilio Ficino's De vita longa", en «Journal of the Warburg and Courtauld Institutes», nº 49, pp. 230-233.

105. - Sobre este tema existe un excelente estudio de Sylvain Matton: - SYLVAIN MATTON, (1991), "Marsilie Ficin et l'alchimie; sa position, son influence", en J. C. Margolin y Sylvain Matton (ed.), «Alchimie et Philosophie à la Renaissance», J. Vrin, París, pp. 123-192.

106. - [Pseudo-]MARSILIUS FICINUS, (1702), "Liber de Arte Chemica", en «Bibliotheca chemica curiosa», Vol 2, Ginebra, pp. 172-183. - Este breve discurso fue compuesto a comienzos del XVI (1518 posiblemente) es, por tanto, anterior al Concilio de Trento en el que se prohibieron explícitamente este tipo de metáforas bíblicas. Posteriormente fue difundido como un texto anónimo ("Liber de arte chymica incertis authoris"). Así aparece en el primer volumen de la colección titulada "Artis Aurifera, quam Chemiam vocat" ( Basilea, 1593, pp. 575-631) varias veces citada por nosotros. Con posterioridad se atribuye ocasionalmente a Ficino partiendo de que Picco della Mirandola es citado como un escritor contemporáneo. Consultar: - P. O. KRISTELLER, (1986), "Marsilio Ficino and His Works after Five Hundred Years", en «Marsilio Ficino e il Ritorno di Platone, Studi Documenti a cura di Gian Carlo Garfagnini», Florencia, t. I, pp. 17-196, cf., pp. 106 y 156.

107. - L. THURNEISSER ZUM THURN, (1570), "Quinta essentia ... Subtilitet, Krafft, und Wirchung, beider ... Könsten der Medicina, und Alchemia Thurneisser zum Thurn, Leonhard Munster, Gedruckt bey Johan Ossenbruck, auff Verlegung Leonhart Thurneyssers zum Thrun...", typud Johann Ossenbruck, Munich. Aunque ya muy mayor aceptase la autoridad de Roma, Thurneisser fue casi toda su vida un autor protestante y es lógico que no reproduzca la imagen de la Inmaculada Concepción típica entre los católicos. Para no perder valor representativo opta por hacer una serie de variaciones. La mujer se muestra desnuda, significando su pureza. La virginidad viene marcada por la luna creciente visible en su zona genital. Esta señal es utilizada en el arte renacentista como evocación de la castidad de la diosa Diana y se extiende a toda figuración de una doncella virgen. Véase: - LOUIS RÉAU, (1996), "La Iconografía del Arte Cristiano", (op. cit), t. I, vol. 2, p. 87.

108. - DAVID DE PLANIS CAMPY, (1979), "L'Ouverture de l'ecolle de philosophie transmutatoire metallique", Gutenberg Reprints, [facsímil de la versión original, chez Charles Sevestre, 1633], p. 79. La descripción que realiza de la doncella celeste está más cargada de elementos complementarios que sus precedentes, cf., p. 76: "...une Vierge toute nüe, belle par excellence, & en la fleur de son Aage, les Cheveux yvoirins, les Yeux noir et blancs, la Bouche coraline, ses Mammelles rondes & polies, faecondes en laict. Elle tient deux flambeaux ardents, un à chasque Main. Sous son Pied droict est une Pierre d'Or, de laquelle sort des flammes tres-claires. Sous son Pied gauche est une Pierre d'Argent, de laquelle sort une Fontaine divisée en plusieurs petits Ruisseaux. Soussa Mammelle droicte est figuré le Soleil; & sous la gauche la Lune: & tout à l'entour d'iceux quantité de petits Oyseaux voletans, les uns montans en haut & les autres descendans en bas". - Según el investigador francés Frank Greiner la inspiración de esta descripción y de algunas otras partes de este libro se encuentra en un tratado medieval llamado "Aurora consurgens" del que también hablaremos. Véase al respecto: - FRANK GREINER, (1998), "Art du feu, art du secret: obscurité et ésotérisme dans les écrits alchimiques de l'âge baroque", en F. Greiner (ed. ), «Aspects de la tradition alchimique au XVIIe siecle», Arché, Milán. p. 216, n. 44. - FRANK GREINER, (2000), "Les métamorphoses d'Hermès: tradition alchimique et esthétique littéraire dans la France de l'âge baroque (1583-1646)", Honoré Champion, París, pp. 307-311.

109. - LUIS DE CENTELLES, (2002), "Carta de Luis de Centelles al Doctor Manresa", texto presentado y editado por Elena Castro Soler, «Azogue», nº 5, URL: http://www.revistaazogue.com

110. - [Pseudo-]TOMAS DE AQUINO, (1488), "Opusculum praeclarum Beati Tomae Aquinatis. Quod esse et essentiis tum realibus tum intentionalibus inscribitur", Johann Lucilius Santtriter, Girolamo de Sanctis et Francesco Bollano, Venecia, cap III [De esse et essentia metallorum, et primo de eorum esse et essentia seu compositione naturali et esse suppositi]. Este tratado de finales del siglo XIII llevaba en principio el título de "De essentiis esentiarum" y fue ofrecido a un "ilustrísimo señor" llamado Roberto. La dedicatoria es de su capellán principal, que firma con el nombre de "Thomas". El original constaba de dos partes o "libros" de los que las ediciones impresas solamente reproducen la primera, en nueve capítulos atribuidos erróneamente al santo aquinate. Lynn Thorndike ya apreció en su momento que este "capellán llamado Tomás" era una figura hoy desconocida, aunque interpretó que la persona a la que iba dirigida el texto era Roberto de Anjou (1275-1343), duque de Calabria y rey de Nápoles. Esta afirmación tampoco parece cierta. La dedicatoria, recogida por Thorndike y conservada solamente en algunos manuscritos define al tal "Roberto" como hijo primogénito, algo que no sucede con Roberto de Anjou, tercer hijo de Carlos II. Véase: - LYNN THORNDIKE, (1992), "A History of Magic and Experimental Sciences", Columbia University Press, New York, 8 vols., Reprint., [Original published 1923-1958], vol III, pp. 136 y ss.

111. El tratado "Aurora consurgens ", vinculado a Tomás de Aquino sin fundamento razonable, es citado generalmente como anónimo o bajo atribuciones muy diversas. Así, por ejemplo, se atribuye a Alphidius en "La Vera Dichiaratione di tutte le Metafore..." del monje agustino Evangelista Quattrami [anno 1587, appresso Vincentio Accolti, in Roma, p. 186]. Las abundantes alegorías bíblicas de su primera parte dificultaron su edición completa, ya que el Concilio de Trento había prohibido explícitamente difundir escritos que utilizasen metáforas bíblicas fuera de las obras teológicas. La edición impresa de Gratarolo de 1593 responde al interés que despertó en ambientes italianos durante el siglo XVI, aunque transcribe solamente la segunda parte para evitar las parábolas religiosas. - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", Editions Le Sycomore, París, pp. 183-246.

112. - La explicación se puede encontrar en la segunda parte del tratado impresa en: - (1593), "Aurora consurgens", en G. Gratarolo (ed.), «Verae alchemiae artisque metallicae», Henricum Petri et Petrum Pernam, Basilea, vol. I, pp. 185-246, cf. p. 212. - La ilustración aparece en: - Zürich, Zentralbibliothek, ms Rh 172, fol. 29v. Es necesario detenernos brevemente sobre la imagen de este códice ya que ha suscitado en Barbara Obrist y Mino Gabriele interpretaciones que consideramos equivocadas. Para la primera se trata de una metáfora basada en una frase contenida en la "Tabula smaragdina" que dice "...pater eius est sol, mater eius luna; portavit illud ventus in ventre suo; nutrix eius terra est..." y entiende que: "Il est possible que le programmateur du cycle ait entendu par magnésie un amalgame de vif-argent et d'étain, car la peau de la vierge est de coleur grise...". - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", (op. cit.), p. 239. Gabriele secunda parcialmente esta tesis indicando que cada color en la viñeta representa un elemento de la sentencia hermética, concretamente la "tierra" sería la dama atezada: "La terra è personificata dalla fanciulla di carnagione grigia...". - M. GABRIELE, (1997), "Alchimia e Iconologia", ed. Forum, Údine, p. 89. Nuestra tesis es diferente. Para empezar la imagen debe contextualizarse en el texto que complementa y que en este caso es el capítulo duodécimo de la primera parte de la "Aurora consurgens", correspondiente a la "Séptima Parábola". El contenido establece una metáfora alquímica basada en el "Cantar de los Cantares" bíblico. Dos amantes conversan y la doncella amada es definida como "virgen púdica", "sin mancha alguna", "la más casta virgen", "elegida como el sol y bella como la luna". Se dice que sube al amado hasta los cielos, con lo que se indica su virtud celeste. Tiene, en fin, los atributos de la "dama celeste". El reconocido iconólogo Louis Réau aclara que desde la Edad Media: "La Virgen Inmaculada está asimilada a la novia del Cantar de los Cantares, la Sulamita del Seudo-Salomón...". - LOUIS RÉAU, (1996), "La Iconografía del Arte Cristiano", (op. cit), t. I, vol. 2, p. 88. - La larga tradición medieval y renacentista que asocia ambas representaciones es recogida en un conocido tratado del siglo XVII: - P. PHILIPPE [de La Très Sainte Trinité], (1667), "Maria sicut aurora consurgens, sive Tractatus de B. Mariae... immaculata conceptione, ubi agitur de hoc mysterio ac de consequentibus modis loquendi... Authore R. P. Philippo a Sanctissima Trinitate,...", sumpt. A. Jullieron, Lyon [ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: D-4740]. Es evidente que la viñeta conservada en Zurich está en consonancia con la disposición habitual de la Inmaculada los ciclos iconográficos cristinanos: la blancura o claridad del vestido indicando su gran pureza, rodeada por los rayos del sol. La luna bajo sus pies hoy se ve negra aunque es resultado de la degradación del pigmento plateado original. Se aprecian novedades, por supuesto. La falta de perspectiva para hacer notar su cualidad celeste es resuelta por el artista por medio de dos alas. La espada desnuda que enseña en su interior señala una cualidad ígnea (característica de la Quintaesencia) pues, de hecho, el "glaudium denudatum" equivale al fuego en el lenguaje cifrado de la alquimia medieval según se aprecia en los tratados "Turba philosophorum" y "Allegoriæ sapientum et distinctiones XXIX super librum Turbae". Véase: - "Allegoriæ sapientum super librum Turbae", en J. J. Manget (ed.), «Bibliotheca chemica curiosa», (op. cit), vol. I, p. 474. Esta actitud de mostrar el contenido del vientre es habitual en las pinturas de la Virgo Gravida. Su fusión con el tema de la Immaculata Conceptione ya se da en otros lugares: - M. LEVI, (1957), "The Iconography of the Inmaculate Conception in the Middle Ages and Early Renaissance", (op. cit), ill. 6 y 9. Así pues, más que desestructurar el icono como hacen Obrist o Gabriele lo indicado es analizarlo en conjunto, ya que es la totalidad de elementos lo que determina el tema final: la Inmaculada Concepción o virgen celeste. Incluso el color grisaceo elegido para la piel de la mujer en esta copia, al que tanta importancia parecen conceder por su rareza cierta, es simplemente una traslación literal del "Cantar de los Cantares" cuando dice: "Nigra sum sed formonsa filiae [...] Nolite me considerare quod fusca sim quia decoloravit me sol..." (Cant. 1, 5-6). Que es una iniciativa particular del pintor se puede comprobar estudiando otras versiones como la de Leiden en la que se opta por dar una tez blanca. Véase: - Leiden, Biblioteca Universitaria, Ms Voss. Chym F. 29, f. 65v. Es evidente que el ilustrador del manuscrito conservado en Zurich busca una reproducción fiel, pero no a una sentencia de la "Tabula smaragdina", sino a la descripción de la sulamita propuesta en el texto bíblico: en los rasgos morenos antedichos, en el visible pelo ondulado, "...capilli tui sicut grex caprarum quae apparuerunt de Galaad" (Cant. 6, 5) y en el fondo rojo, color de la aurora: "...quae est ista quae progreditur quasi aurora consurgens pulchra ut luna electa ut sol terribilis..." (Cant. 6, 10). En definitiva, tomando la representación en su forma total de virgen celeste (sic est: Immaculata Conceptione entre los ilustradores cristianos) podemos deducir su equiparación con la Quintaesencia tal y como sucede en otros tratados alquímicos de su época ya indicados. El mismo texto de la "Séptima Parábola" viene a atribuir a esta mujer las cualidades de la quinta esentia, no sólo la pureza y condición celeste ya observadas, sino también su virtud activa, su acción protectora, y su facultad mediadora sobre los elementos: "Doy y no quito, nutro y nunca pierdo virtud (lat. virtus), protejo y jamás temo. ¿Qué diré a mi bien Amado? Soy mediadora entre los elementos, reconcilio a los contrarios...".

113. - PAUL KRAUS. (1942) "Jabir Ibn Hayyan. Contribution á l'historie des idées scientifiques dans l'islam - Jabir et la science greque", Impresiones de la I. F. A. O., (Mémoires présentés à l'Institut d'Egypte, t. 44), El Cairo, pp. 1-16.

114. - M. PEREIRA, (1995), "Teorie dell'elixir nell'alchimia latina medievale" en, «Micrologus», 3, pp. 103-148.

115. - (1550), "Rosarium philosophorum", en «De alchimia opuscula complura veterum philosophorum. Rosarium Philosophorum. Secunda pars alchimiae de lapide philosophico vero modo praeparando», Cyriacus Jacob, Frankfurt.

116. - CHIARA CRISCIANI (1993), "Il corpo nella tradizione alchemica : teorie, similitudini, immagini", en: «Micrologus», 1, p. 216. - Una primera edición crítica de la "Visio Arislei" se encuentra en: - J. RUSKA, (1931) "Turba Philosophorum. Ein Beitrag zur Geschichte der Alchemie. J. Sprinter, Berlín, pp. 324-328. El estudio de sus figuras metafóricas se encuentra en: - J. RUSKA, (1930), "Die Vision des Arisleus", en «Festgabe G. Sticker», pp. 22-26.

117. - CHIARA CRISCIANI (1993), "Il corpo nella tradizione alchemica : teorie, similitudini, immagini", en: «Micrologus», 1, p. 202.

118. - F. PALACIOS, (1706), "Palestra Pharmacéutica Chymico-Galénica", Ed. Juan García, Madrid, pp. 57-58.

119. - Se incluye como un pequeño anónimo en: - [pseudo-]GEBER, (1531), "De alchimia libri tres. Liber investigationis perfecti magisterii artis achemiae. Liber trium verborum. Epistola Alexandri imperatoris super eadem re", apud Johann Grüninger, Strasbourg, ff. 55r-56v. [Ejemplar consultado: El Escorial, Biblioteca del Real Monasterio, Ms 12-I-18, nº 1], El texto conoció una importante difusión en el siglo XVI aunque con ligeras variaciones en sus transcripciones. Consultar: - DIDIER KAHN, (1995), "Litterature et alchimie au Moyen Age : De quelques textes alchimiques attribues a Arthur et Merlin", en «Micrologus», 3, pp. 227-262.

120. - "Liber Trium Verborum Kallid", en «Artis Aurifera, quam Chemiam vocat», Basilea, 1610, pp. 226-231.

121. - [pseudo-] R. LLULL, "Codicillus", en J. J. Manget, "Bibliotheca chemica curiosa", (op. cit), vol. I, pp. 880-911, cf. cap. LIII, p. 897: "...et sic patet quod per contrarias qualitates reciproce generetur infantulus noster". - [pseudo-] ARNAU DE VILANOVA, "Rosarium philosphorum", en J. J. Manguet, "Bibliotheca chemica curiosa", (op. cit), vol. I, pp. 662-676, cf., cap. XV, : "...sic est videre in infantis educatione". - MICHELA PEREIRA; BARBARA SPAGGIARI, (1999), "Il Testamentum...", (op. cit.), p. 54: "Quando igitur materia tua conceperit, expecta partum ut, postquam peperit, habeas pacieciam, nutriendo infantem, usque poterit sustineri ignem...".

122. - MICHELA PEREIRA; BARBARA SPAGGIARI, (1999), "Il Testamentum...", (op. cit.), la magnesia es citada en pp. 104, 106, 158, 204, 336.

123. - La versión más antigua de este tratado se encuentra en: - Cambrai, Bibliothèque municipale, ms 920, finales del siglo XIV, ff.:28v-29v: "Incipiunt septem operaciones lapidis philosophorum majores secundum Johannem de Vasconia. Vidi senem nimia claritate fulgentem et in manu sua librum clausum et signatum tenentem...". Se difunde en forma manuscrita como obra de Arnau de Vilanova con los títulos de "Visio mystica", "Flos florum", "Rosarius Arnaldi de Vilanova brevissimus", o con el de "Cathena aurea" tal y como figura en la colección de textos arnaldianos impresa en Lyon en 1586 por Antoine Tardif (cf. p. 46). Es posible que esta sea la versión manejada por Centelles. Ya en fechas posteriores se vincula a María la Judía con algunas modificaciones. Esta traducción ha sido editada en: - DIDIER KAHN, (1988), "Les septs visions de Marie la Prophetesse sur l'Ouvre de la Pierre des Philosophes", en «Chrysopoeia», II, fasc 4, pp. 369-384. Una versión italiana de finales del siglo XVI ha sido editada en Internet por Massimo Marra. El original utilizado ha sido: - Nápoles, Biblioteca Nazionale Vittorio Enmanuele III, ms VIII-D-75, finales del siglo XVI, ff. 171r-175r: "Incomincia il libro chiamato Fiore de fiori di Giovanni di Vasconia sopra la Pietra de philosophi et la prattica sua...". Consultar: - MASSIMO MARRA, (2000), "Il Fiore de’ Fiori di Giovanni di Vasconia", en http://www.levity.com/alchemy/vasconia.html

124. - (1622), "Senioris Zadith, filii Hamuelis tabula chimica, marginalibus adaucta", en «Theatrum Chemicum», Vol. 5, Ginebra, pp. 191-239, cf. "magnesia" en pp. 199, 203, 205, 223, 224, 232. - Hay una amplia referencia bibliográfica sobre el origen de este tratado árabe, su difusión europea y sobre la interpretación de la palabra "magnesia" en el siguiente estudio: - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", Editions Le Sycomore, París, pp. 187-196.

125. - BARBARA OBRIST, (1982), "Les débuts de l'imagerie alchimique (XIVe-XVe siècles)", (op. cit.), p. 104.

126. - Se trata de un procedimiento muy habitual en la literatura alquímica desde el Medievo Musulmán. Son gran cantidad los tratados medievales o renacentistas sobre alquimia y mineralogía que hablan de los constituyentes minerales como "alma y cuerpo". El origen de tal manifestación se encuentran en las definiciones sobre la formación de los cuerpos sublunares según el sistema aristotélico, integrado por los alquimistas en sus teorías transmutatorias: - G. FREUDENTAHL, (1999), "Aristotle's Theory of Material Substance. Heat and Pneuma, Form and Soul", Oxford Univ. Press, Oxford.

127. - Para una descripción pausada y matizada del proceso operativo descrito en el "Testamentum" y en el "Codicillus" recomendamos: - MICHELA PEREIRA, (1992), "L'oro dei filosofi. Saggio sulle idee di un alchimista del '300", CISAM, Spoleto.

128. - Para una explicación de los procesos prácticos incluidos en el "Rosarium" véase: - GIULIANA CAMILI, (1995), "Il Rosarius philosophorum attribuito ad Arnaldo da Villanova nella Tradizione Alchemica del Trecento", en «Actes de la I Trobada Internacional d’Estudis sobre Arnau de Vilanova», 2 vols., t. 2, pp. 175-208, cf. pp. 200-204. - ANTOINE CALVET, (1997), "Le Rosier alchimique de Montpellier, Lo Rosari (XIVe siecle)", traduction, notes et commentaires. Paris-Sorbonne U. P. , París, pp. XXV-XXIX .

129. - En el caso del "Testamentum" o del "Rosarium" los regímenes tiene un grado de trascendencia mucho mayor que la multiplicación ya que comprometen varias operaciones y manipulaciones. No obstante la multiplicación es un proceso que va ganando en protagonismo en los tratados desde el siglo XV. Centelles, como vemos, ya lo explica al mismo nivel que las demás operaciones. Véase: - D. GOLTZ et al, (1977), "Der alchemistische Traktat Von der Multiplikation von Pseudo-Thomas von Aquin", F. Steiner, Wiesbaden, pp. 85-86.

130. - Nota nº 106.

131. - Precisamente en España se aplicó este precepto a un caso de alquimia, en concreto se condenó al alquimista Giraldo Paris por utilizar la imagen de la Virgen Inmaculada y otras de origen bíblico en analogías de procedimientos alquímicos y "spagyricos". Véase: - Madrid, Archivo Histórico Nacional, sec. Inquisición, leg. 100-21, f. 18: "Paréceme haber dicho que por otro ejemplo podría probar la virginidad de Nuestra Señora antes del parto, en el parto, y después del parto, y es de esa manera que en el arte spagirica hazemos una materia tan pura y tan perfecta q[ue] no tiene en si macula alguna...". - Sobre las condenas trentinas a este tipo de prácticas: - I. LÓPEZ DE AYALA, (ed.), (1785), "El Sacrosanto y Ecuménico Concilio de Trento", Imprenta Real, Madrid, cf. «Sesión IV: Decreto sobre Edición y Uso de las Sagradas Escrituras»: "...queriendo el sagrado Concilio reprimir la temeridad con que se aplican y tuercen a cualquier asunto profano las palabras y sentencias de la sagrada Escritura; es a saber, a bufonadas, fábulas, vanidades, adulaciones, murmuraciones, supersticiones, impíos y diabólicos encantos, adivinaciones, suertes y libelos infamatorios; ordena y manda para extirpar esta irreverencia y menosprecio, que ninguno en adelante se atreva a valerse de modo alguno de palabras de la sagrada Escritura, para estos, ni semejantes abusos; que todas las personas que profanen y violenten de este modo la palabra divina, sean reprimidas por los Obispos con las penas de derecho, y a su arbitrio".

132. - Madrid, Biblioteca Nacional, Ms. 7443, siglo XVI (1559-1568).

133. - Abreviatura de "filosofía".

134. - JEAN MARC MANDOSIO, (1990-1991), "La place de l'alchimie dans les clasifications des sciences et des arts à la Renaissance", en: «Chrysopoeia», 4, pp. 199-282, cf. pp. 276-281.

135. - Iremos un poco más atrás en el tiempo para encontrar origen a esta opinión. En la Edad Media los preceptistas europeos de la Philosophia Naturalis (dentro de la cual se encuadra el ars alchimia en varios catálogos de las ciencias) reconocía la existencia de causas o virtudes ocultas. Se trataba habitualmente de factores responsables de los fenómenos naturales que no podían ser sometidos a la interacción manifiesta de los cuatro elementos. Era la pars oculta philosophia naturalis, calificada de "oculta" por ser de difícil acceso para la razón y resultar de complicada formulación teórica dentro del cuadro conceptual desarrollado por la Filosofía Natural del aristotelismo medieval. La mayoría de los escolásticos, como Tomás de Aquino en su tratado "De operationibus occultis naturae", calificaban estos fenómenos de praeter naturam, dejando abierta la posibilidad a una explicación por medio de un sistema racional sostenido en la percepción sensible. No obstante, también hay textos opuestos, en los que se impone una definición irracional, dando a entender que las fuerzas ocultas no serían naturales, ni preternaturales, sino supranaturam con lo que se entra en el prodigio sobrenatural. Esta última idea se va imponeniedo en las disciplinas que se estaban mostrando llenas de problemas teórico-prácticos. En el caso de la alquimia los más evidentes son sus naufragios en la realización de transmutaciones verídicas. Los fracasos experimentales no llevaron a los alquimistas hacia una revisión de sus conceptos y a replantear sus objetivos, sino que generaron a un escoramiento progresivo hacia explicaciones basadas en esas "operaciones ocultas", en esa "parte oculta de la filosofía", entendiéndola como factores sobrenaturales inaccesibles a la razón. Tal es el testigo recogido por muchos de los alquimistas en tiempos de Centelles.

136. - Un caso significativo en este sentido es el italiano Pietro di Silento; consultar: - Florencia, Biblioteca Nazionale, Ms. Palat. 885, mediados del siglo XVI, ff. 183-191: "Magister Petrus de Zelento, Liber de Philosophia occulta Operis maioris". - Otras obras de este autor: - Florencia, Biblioteca Nazionale, Ms. Magl. XVI 22, siglo XVI [1528]: Petri de Zelento de consideratione quintae essentiae. - Modena, Biblioteca Estense MS. Latin 357 (Alpha T 4, 8), Siglo XVI, "Magister Petrus de Zelents philosophus excellentissimus super Alkimiae artem".

137. - Sobre este asunto en las ciencias y seudociencias en el Renacimiento, consultar: - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York).

138. - Sobre sus ideas sirva de orientación este párrafo: "Hemos transmitido este arte de tal modo que no permanezca oculta a los hombres inteligentes y prudentes pero también de modo que no admita en sus arcanos a los malvados y a los incrédulos de tal forma que éstos queden con las manos vacías bajo la sombra mezquina de la ignorancia y la desesperación. Solamente para vosotros, hijos de la doctrina y la sabiduría, hemos escrito esta obra. Escrutad el libro, recoged en él el saber que hemos dispersado y colocado en tantos sitios. Lo que hemos ocultado en un lugar, lo hemos manifestado en otro, de tal modo que pueda ser entendido por vuestra sabiduría. No hemos escrito más que para vosotros que tenéis el espíritu puro y adecuado para llevar un recto orden de vida, cuya mente es casta y púdica, cuya fe teme y reverencia a Dios, cuyas manos están limpias de pecados y delitos, cuyas costumbres son íntegras. Sólo vosotros encontraréis la doctrina que sólo a vosotros hemos reservado. Los velados arcanos no pueden hacerse transparentes liberándolos de tantos enigmas sino es con la inteligencia oculta. Si obtenéis esta inteligencia, entonces penetrará en vosotros toda la ciencia mágica y se os manifestarán aquellas virtudes ya adquiridas por Hermes, Zoroastro, Apolonio y los artífices de cosas maravillosas. Nadie se llene de ira si hemos considerado oportuno esconder la verdad de nuestro saber bajo la ambiguedad del enigma y dispersarla aquí y allá a lo largo de la obra. No la hemos escondido a los sabios sino a los espíritus perversos y deshonestos. Por ello hemos usado un estilo apto para confundir al ignorante y llegar facilmente al intelecto iluminado", consultar: - HENRICI CORNELIUS AGRIPPAE AB NETTESHEYM, (ca. 1600), "De occulta philosophia libri tres", III, 65; en «Opera omnia», per Beringos fratres, Lugdum, I, pp. 498-499. [según la edición de 1533].

139. - THEODOR ZWINGER, (1586), " Theatrum humanae vitae Theodori Zvingeri,... tertiatione novem voluminibus locupletatum, interpolatum, renovatum. Cum tergemino elencho, methodi scilicet, titulorum et exemplorum...", Eusebium Episcopium, Basilea, tomo IV, libro XX (De mechanicis habitibus), cap. 3 (de opificibus mechanicis), Chymistae: "...quae aioqui, si theoriam spectes, non modo inter theoricas, verum etiam acroamaticas et epopticas referri mereatur, philosophiae naturalis occultae magistra simul et discipula...", [ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: Z-310].

140. - Donaueschingen, Hofbibliothek, Ms 812, siglo XVI [1590], ff. 64-99: "De occulta philosophia seu de natura planetarum atque illorum mysteriis nunc sequitur".

141. - GERARD DORN, (1583), "Theophrasti Paracelsi Auroram philosophorum, Thesausum, et Mineralem aeconomiam commentaria cum quibus argumentis", C. Rab, Frankfurt, [ejemplar consultado: Dijon, Bibliothèque Municipale, cota: 2868].

142. - B. FIGULUS, (1608), "Pandora magnalium naturalium...", Strassburg, [el volumen incluye tratados de otros autores como Paracelso o Alexander von Suchten. Ejemplar consultado: París, Bibliothèque Nationale de France, cota: 16-R-4581]. Sobre Figulus, consultar: - J. TELLE, (1987), "Benedictus Figulus, zu Leben und Werk eines deutschen Paracelsisten", en: «Medizinhistorisches Journal», nº 22, pp. 303-326. - JEAN-MARC MANDOSIO, (1991), "La place de l'alchimie dans les clasifications des arts et sciences", en J. C. Margolin y Sylvain Matton (ed.), «Alchimie et Philosophie à la Renaissance», J. Vrin, París, pp. 11-42, cf. pp. 39 y 40.

143. - Algunos textos de su tiempo plantean otras dos posturas substancialmente diferentes. Por un lado tendríamos la defensa de una alquimia limitada por las leyes de la naturaleza y donde es definida como generadora de substancias simples y naturales. Tal defensa está basada en la utilidad de sus productos y operaciones. Este utilitarismo, que se mantuvo muy vivo en el medievo, representa una concepción de la alquimia bastante olvidada desde los siglos XVI y XVII, aunque recibe un cierto impulso en Europa central con la difusión de las obras de Pierre de la Ramée (1515-1572). Consultar: - SYLVAIN MATTON, (1991), "L'alchimie chez les ramistes et semi-ramistes", en «Argumentation», pp. 403-446. Una tercera posición viene marcada por la revolución conceptual y experimental iniciada por Paracelso (1493-1541) con la que teoría y práctica alquímica se vuelca plenamente sobre la medicina. Véase: - L. BRAUN, (1991), "Paracelse", Genéve. - A. G. DEBUS, (1973), "The Medico-chemical World of the Paracelsians", en M. Teich & R. Young (eds. ), «Changing Perspectives in the History of Science», Heinemann, London, pp. 85-99. - A. G. DEBUS, (1977), "The Chemical Philosophy", 2 vol., New York. - HERVÉ BAUDRY, (1989), "Contribution à l'étude du paracelsisme en france au XVIe siècle (1560-1580) : de la naissance du mouvement aux années de maturité : le "Demosterion" de Roch Le Baillif (1578) : étude suivie d'une édition critique et annotée", 3 vols., Tesis Doctoral inédita, Université Paris X-Nanterre. - A. G. DEBUS, (1991), "The French Paracelsians: The Chemical Challenge to Medical and Scientific Tradition in Early Modern France", Cambridge. - VOLKER ZIMMERMANN (ed.), (1995), "Paracelsus. Das Werk - die Rezeption", Franz Steiner Verlag, Stuttgart. - I. ZINGUER & H. SCHOTT (eds.), (1998), "Paracelsus und seine internationale Rezeption in der frühen Neuzeit", Brill Academic Publishers, Leiden. - DIDIER KAHN, (1998), "Paracelsisme et alchimie en France à la fin de la Renaissance (1567-1625)", 3 vols., Tesis Doctoral inédita [se prepara edición próximamente: chez Droz, Ginebra], Université Paris-Sorbonne (Paris IV).

144. - Dice Thomas Norton: "De entre todas las ciencias que amparan a nuestro Arte destaca la Magia Naturalis", consultar: - THOMAS NORTON, (1652), "The Ordinal of Achimy. Written by Thomas Norton of Bristoll", en «Theatrum chemicum Britanicum», J. Grismond, Londres, pp. 2-106, cf. cap. 5, p. 61. [Redactado en 1477].

145. - Los primeros textos europeos que plasman esta aspiración radicalmente datan del siglo XIV y se incrementan en la centuria posterior. No obstante será en el siglo XVI cuando se produzca una expansión casi monopolística de este concepto. Consultar: - BARBARA OBRIST, (1991), "Les Rapports d'Analogie entre Philosophie et Alchimie Médiévales", en J. C. Margolin y Sylvain Matton (ed.), «Alchimie et Philosophie à la Renaissance», J. Vrin, París, pp. 43-64. - SYLVAIN MATTON, (1995), "L'Influence de l'humanisme sur la tradition alchimique", en «Micrologus», 3, pp. 279-353.

146. - FRANÇOIS SECRET, (1992) "Hermétisme et Kabbale", Bibliopolis, Nápoles.

147. - ¿Las Coplas tal vez?. Es factible, sin embargo actualmente no podemos asegurarlo ya que como hemos visto en apartados anteriores las primeras copias de las que tenemos noticias son al menos diez años posteriores a esta carta. No obstante también pudiera referirse a otras epístolas intercambiadas con Manresa o con algunos de sus discípulos.

148. - La falta de ensayos consistentes es muy significativa en el mejor conocimiento de personajes y tratados aplicados a la transmutación metálica. Caso diferente es el de los textos con fines terapéuticos, como los pertenecientes a la espagiria, quemiatría o a la Iatroquímica. En estos últimos casos se pueden señalar las investigaciones de autores ya referidos como J. M. López Piñero, Luis S. Granjel, J. Pardo, E. Portela Marco, F. J. Puerto Sarmiento, a los que recientemente hay que añadir destacadas aportaciones de Luz López Terrada , Mar Rey Bueno, Juan Micó Navarro o Miguel López Pérez.

149. - El fructífero negocio entre el sur de Italia y el levante de España, los contactos comerciales con las ciudades del norte de Italia, estimularon los intercambios culturales durante el siglo XVI. El proceso tiene sus precedentes en centurias anteriores. Los reyes de Aragón gobernaron desde el siglo XIV las Islas Baleares, Cerdeña y Sicilia (que se separó en 1458). En 1442 Alfonso V añadió Nápoles a sus dominios. Así pues, las relaciones entre todas estas regiones fueron intensas en el periodo renacentista. "Durante dos siglos (XV y XVI) España e Italia vivieron una vida casi común a causa del dominio territorial y de la hegemonía política española en nuestro país", ése es el cuadro general trazado por Benedetto Croce en su libro "La Spagna nella vita italiana durante la Rinascenza".

150. - Fue fundada en el siglo IX con el título de Santa Coloma de Pujolric, cambió mas tarde por el de Santa Coloma de Vinyoles. En el siglo XIII encontramos ya la Baronía de Centelles, localizada en el castillo de Sant Martí. Al terminar la Edad Media los barones abandonaron el castillo, y se instalaron en la población, razón por la cual se cambió el nombre por el de Santa Coloma de Centelles. Es entonces cuando se convirtió en Condado. La población se extendió fuera de las murallas. Se constituyó el centro del condado y se reunió en él un Consejo General o Baronía. Formaban el Consejo las parroquias de Balenyà, Bertí, Sant Martí y Valldeneu.

151. - Las investigaciones que hemos realizado, con todo tipo de dificultades (todo sea dicho) y por ello extremadamente lentas, se han localizado en archivos y bibliotecas de Madrid, Valencia, Alicante, Gandía, Oliva, Castellón, Centelles y Barcelona.

152. - Al llevarse a cabo la unidad política de Castilla y Aragón el castellano consiguió consolidarse como lengua dominante frente a otros idiomas y dialectos peninsulares. El castellano pasó a ser la lengua de los documentos legales y de la política exterior donde los nombres y apellidos catalanes, valencianos, etc., se castellanizaron sin una regla bien establecida. De ahí las habituales variaciones ortográficas. Solamente a partir de los primeros momentos del siglo XVI comenzó a cuajar lentamente la preocupación de los intelectuales del momento por abordar la enorme tarea de sistematizar, analizar y divulgar la lengua oficial, homogeneizando la gramática. - R. PENNY, (1993), "Gramática Histórica del Español", edición de J. I. Pérez Pascual, Barcelona.

153. - BARÓN DE SAN PETRILLO, (1940), "Las Casonas Solariegas. Discurso leído para su ingreso en la Acad. De Bellas Artes de San Carlos de Valencia, por el Ilmo. Sr..., en Sesión del .... Acad. Bellas Artes", s.l., Valencia, 14 mayo 1940. Incluye gran desplegable con árbol genealógico de las familias Centelles y Carroz.

154. - Sobre la historia de Cerdeña en los siglos XV y XVI consultamos: - G. F. FARA, (1580), "De rebus Sardois", typis Nicolai Cañelles, Calari. - F. VICO, (1639), "Historia General de la Isla y Reyno de Sardeña en Siete Partes", empr. de Lorenço Deu, Barcelona. - S. VIDAL, (1639), "Annales Sardiniae", typ. Sermartelliana, Florencia.

155. - VV.AA., (1999), "Restauració de la torre del carrer Comare, Palau dels Centelles, Oliva", Generalitat Valenciana-Ajuntament d'Oliva. - Sobre la famila Centelles en Cerdeña durante los siglos XV y XVI: - VV.AA., (en presa), "Coloquio Internacional sobre la Historia de los Centelles y el Condado de la Oliva. 19 de abril de 1997", Oliva, España. - FLORIS, (1988), "I Centelles signori del Monteacuto", en: «Quaderni Bolotanesi», XIV, pp. 359- ss. - J. J. CHINER GIMENO, (1991), "Don José Vallés sequestratario regio della contea di Oliva e gli stati sardi della Famiglia Centelles (1570-1594)", en: «Quaderni Bolotanesi», XVII, pp. 333-366 - J. CAMARENA MAHIQUES, (1998), "La storia di Oliva (Spagna). Riusech e Centelles, signori e conti", en «Quaderni Bolotanesi», XXIV, pp. 233-268.

156. - Críticos como Pellicer y Menéndez Pelayo han juzgado duramente su obra, calificándola de impertienente, necia y llegando a tildarlo de poeta incluto. Tales juicios, excesivos en su dureza, se han visto compensados por unos estudios más extensos, ponderados y mejor documentados a cargo de la profesora Roca Mussons: - M. A. ROCA MUSSONS, (1992), "Antonio Lo Frasso, militar de l'Alguer", Istituto sui rapporti italo-iberici, Cagliari, [incluye ed. y est. de Los diez libros de Fortuna d'Amor]. Otros trabajos importantes: - M. A. ROCA MUSSONS, (1988), "Conjeturas sobre un autor, una obra y la enigmática evaluación de Miguel de Cervantes: A. de Lo Frasso y Los diez libros de Fortuna d'Amor", en: «Actas del I° Coloquio internacional de Cervantistas», Ed.Anthropos, Barcelona, pp. 393-407. - M. A. ROCA MUSSONS, (1988), "Considerazioni e contributi documentari su un'opera e un autore: Antonio de Lo Frasso e Los diez Libros de Fortuna d'Amor", en: «Archivio Storico Sardo», XIV, pp. 125-131. - M. A. ROCA MUSSONS, (1990), "Antonio de Lo Frasso: un itinerario tipológico en el Viaje del Parnaso de M. de Cervantes", «Actas del II° Coloquio Internacional de Cervantistas», Ed. Anthropos, Barcelona, pp. 258-273.

157. - A. DE LOFRASSO, (1573), "Los Diez Libros de la Fortuna de Amor, compuestos por Antonio Lo Frasso, militar sardo de la ciudad de l'Alguer", Casa de Pedro Malo, Barcelona. Redactado en castellano, excepto dos poesías en sardo y otras dos en catalán, es una colección de novelas pastoriles con variedad de invenciones poéticas, participaron en la gestación y en el desarrollo del género en España. Cervantes le dedica un elogio muy irónico en "El Quijote". También es autor de otra obra netamente poética: - A. DE LOFRASSO, (1571), "Los Mil y Dozientos Consejos y Avisos Discretos sobre los Siete Grados y Estamentos de nuestra Humana Vida" , Imprenta de P. Cortey y P. Malo, Barcelona. Comienza con la narración de la victoria de Lepanto en octavas rimadas. Los dos libros se caracterizan por sus solecismos y por unas formas poco cuidadas tanto en la prosa como en la rima, lo que recuerda bastante el estilo poco elocuente de Luis de Centelles.

158. - SYLVAIN MATTON, (1995), "L'influence de l'humanisme sur la tradition alchimique", en «Micrologus», 3, pp. 279- 345. - SYLVAIN MATTON, (1987), "L'Egypte chez les philosophes chimiques, de Maier a Pernety", en «Les Ètudes Philosophiques», avril-juillet, pp. 207-226.

159. - VV. AA., (1979), "L'humanisme dans les lettres espagnoles", Librairie Philosophique J. Vrin, París. - JEAN SEZNEC, (1987), "Los Dioses de la Antigüedad, en la Edad Media y el Renacimiento", versión castellana de J. Aranzadi, Ed. Taurus, Madrid. - ÁNGEL ÁLVAREZ DE MIRANDA, (1963), "La Metáfora y el Mito", Ed. Taurus, Madrid. - HELENA BERISTÁIN, (1992), "Diccionario de Retórica y Poética", Ed. Porrúa, México D. F. - P. DEMATS, (1973), "Fabula. Trois études de Mythographie antique et médiévale", Libraire Doz, Genève.

160. - FRANCK GREINER, (1995), "L'initiation alchimique de Giovan Battista Nazari", en «Revue de l’Association d’études sur l’Humanisme, la Réforme et la Renaissance», pp. 9-35. - GILLES POLIZZI, (1995), "Fontaine(s) périlleuse(s): L'allégorie amoureuse dans la glose alchimique chez Gohory et Verville", en «Revue de l’Association d’études sur l’Humanisme, la Réforme et la Renaissance», pp. 37-56. - F. SECRET, (1973), "Littérature et alchimie à la fin du XVIe et au début du XVIIe siècle", en «Bibliothèque d'Humanisme et Renaissance», XXXV, pp. 103-116; 499-531.

161. - BERNARD WEINBERG, (1961), "A History of Literary Criticism in the Italian Renaissance", University of Chicago, Chicago. - KARL KHOUT, (1973), "Las Teorías Literarias en España y Portugal durante los Siglos XV y XVI", CSIC, Madrid. - A. J. CRUZ, (1988), "Imitación y Transformación", John Benjamins Publishing Company, Amsterdam. - VV. AA., (1993), "Estado Actual sobre los Estudios del Siglo de Oro", Universidad de Salamanca, Salamanca.

162. - Venecia, Biblioteca Marciana, Ms. Lat. XIII, 111 (4039), siglo XVI, cpusopoa en ff. 23-25; Vellus aureum en f. 26. Un tratado suyo dedicado a la transmutación de las substancias está en: - Nápoles, Bibliotheca dei Girolamini Ms. S.M. XXVIII, siglo XVI,"L'Interpretatione dell' arca del patto. De transmutatione", otra copia del mismo en: - Dublin, Trinity College Library Ms. 2100, siglo XVI, Delminio Giulio Camillo. L'Interpretatione dell' arca del patto. - Para unas extensas indicaciones bio-bibliográficas sobre Camillo: - LINA BOLZONI, (1984), "Il Teatro della Memoria: studi su Giulio Camillo", Ed. Liviana, Padova. Para sus relaciones con la alquimia, aunque sin analizar los códices citados: - CESARE VASOLI, (1993), "Giulio Camillo Delminio et l'Art Transmutatoire", en J. C. Margolin y Sylvain Matton (eds.), «Alchimie et Philosophie à la Renaissance», Ed. J. Vrin, París, pp. 193-204. - LINA BOLZONI, (1974), "Eloquenza e alchimia in un testo inedito di Giulio Camillo", en «Renascimento», Sec. Serie, XIV, pp. 243-264.

163. - PIERIO VALERIANO, (1509), "Praeludia quaedam...", apud Ioan. Tacuino, Venecia. - FRANÇOIS SECRET, (1995), "Pierio Valeriano et l'alchimie", en Didier Kahn; Sylvain Matton (eds.), «Alchimie, art, histoire et mythes», pp. 429-441.

164. - PIERIO VALERIANO, (1615), "Les Hieroglyphiques", Lyon, p. 284 [Edición original impresa en Basilea en 1556]: "Nam veluti Cygni senio confecti argutioribs, ob gutturis exilitatem, organis effectis suauiorem simul & vocaliorem emittunt vocem, ita etiam boni poetae, quo per aetatem magis profecerum, scribere itidem solent & elegantius & sapientius. [...] Sic Pontanus & Vraniam & meteorica, Syncerus Actius poemata pleraque, Aurelius Augurellus Chrysopoeiam, & alij plerique aetate nostra bene literati viri eo suauius cygneum hoc melos emodulati sunt, quo magis visi consenescere".

165. - Para su obra lírica consultar: - B. VARCHI, (1858-1859), "Rime", en «Opere di Benedetto Varchi», 2 vol., sezione Letterario Artistica del Lloyd Austriaco, Trieste.

166. - Publicado originalmente en: - D. MORENI, (1827), "Questione sull'alchimia", Magheri, Florencia, [no hemos podido consultar ningún ejemplar]. La edición crítica apareció en: A. PERIFANO, (1987), "Benedetto Varchi et l'alchimia. Une analyse de la Questione sull'alchimia", en «Chrysopoeia», I, pp. 181-208.

167. - A. PERIFANO, (1997), "L'Alchimie à la Cour de Côme Ier de Médicis", Honoré Champion, París, pp. 91-100. - WILLIAM C. EAMON, (1996), "Science and the Secrets of Nature", Princeton University Prees, Princeton (New York), p. 159.

168. - L. G. GIRALDI, (1596), "De poetarum historia dialogus", en «Opera omnia», Lugduni, apud Hackium, Boutesteyn, Vivie, Vander A. A. & Luchtmans, p. 538. Sobre las relaciones de este autor con la alquimia: - F. SECRET, (1976), "Gianfrancesco Pico della Mirandola, Lilio Gregorio Giraldi et l'alchimie", en «Bibliothèque d'Humanisme et Renaissance», XXXVIII, pp. 93 y ss.

169. - H. NADER, (1986), "Los Mendoza y el Renacimiento Español", Diputación de Guadalajara.

170. - Sirvió como Gobernador de Siena, embajador en Venecia (1539-1547) y Roma (1547-1552), fue también delegado de la Corona española en la primera sesión del Concilio de Trento. Dice Maravall que fue "...el último de los grandes hombres del Renacimiento español". -J. ANTONIO MARAVALL, (1960), "Carlos V y el pensamiento político del Renacimiento, Madrid, pp. 314-315.

171. - C. GESSNER, (1548), "Pandectarum sive Partitiorum universalium [...] libri XXI", Tiguri, XIII, IX ("De chymia, quam aliqui Alchemiam, alij chemiam, chymistaticam, alchymiam, & artem sacram uel magnam appellant"), f. 174r: "Stephani philosophi & aliorum de arte siue scientia sacra et magna, aliâs perì cumeia?, id est, de arte chymistica, scripta Graece extant in Italia, & alibi, & apud Diegum Hurtatum Hispanum Caesaris hoc tempore apud pont. M. oratorem. Vidi & alias inscriptiones librorum, qui Graece in bibliothecis Italiae aduersarum sine authorum nomine, quales sunt: Liber de mutatione metallorum, quae uulgo cumia dicuntur...". Diego Hurtado cedió su rica colección de impresos al rey Felipe II en 1576, pasando a engrosar los fondos de la biblioteca del Real Monasterio de El Escorial.

172. - ALESSANDRO MARTINENGO, (1967), "Quevedo e il simbolo alchimistico: tre studi", Liviana editrice, Padova. - FRANCISCO QUEVEDO VILLEGAS, "Poesía y Alquimia", poemas editados por Pedro Rojas García., «Azogue», nº 3, (2000), URL: http://www.revistaazogue.com - De igual modo hay alusiones en su obra en prosa, demostrando un sentido negativo en la crítica: - AMÉDÉE MAS, (1956), "Las Zahurdas de Plutón", SFIL, Poitiers. - FRANCISCO QUEVEDO VILLEGAS, "Sueño del Infierno", texto presentado y editado por Pedro Rojas García, «Azogue», nº 2, (1999), URL: http://www.revistaazogue.com

173. - Un caso similar es el del italiano Vincenzio Percolla. Es autor de un tratado titulado "Aurioquio Sottilissimo, et no meno dilettevole, nel quale si tratta dello ascoso secreto dell'Alchimia". Lo redactó en Madrid (entre 1560 y 1562) siendo regente del Supremo Consejo de Italia. Él mismo reconoce que llegó hasta la alquimia por medio de sus estudios de poesía y filosofía. Véase: - VINCENZIO PERCOLA, (1996), "Auriloquio", ed. Archè, París-Milán, p. 6: "...et cosi con principij ch'io hebbi nella mia adolescanza di Poesia, filosofia et astrologia incominciai ad investigar la verità di detta scienzia col mezzo di quanti libri mi capitorno nelle mani...".

174. - LYNN THORNDIKE, (1938), "Alchemy during the first half of the sixteenth century ...", [s. l., s. n.], separata de la revista «Ambix», v. II, n. 1, Junio 1938". - Este interesante artículo de Thorndike se reimprimió de forma ampliada en: - LYNN THORNDIKE, (1992), "A History of Magic and Experimental Sciences" Columbia University Press, New York, 8 vols., Reprint., Original published 1923-1958, vol V, pp. 532-549

175. - LYNN THORNDIKE, (1992), "A History of Magic and Experimental Sciences" Columbia University Press, New York, 8 vols., Reprint., Original published 1923-1958, vol VI, p. 153 y ss.


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