- JOSÉ RODRÍGUEZ GUERRERO, "Los Hijos de Hermes de F. Javier Puerto et al., editado por Corona Borealis", «Azogue», nº 4, 2001, URL: http://www.revistaazogue.com

 

LOS HIJOS DE HERMES

Autores: F. J. Puerto Sarmiento, M. E. Alegre Pérez, M. Rey Bueno, M. López Pérez (Coords).
ISBN: 84-95645-06-8
Editorial: Corona Borealis
Sede de la Editorial: Madrid.
Paginado: 448 pp.
Año: 2001
Precio: 12 Euros.
Contenidos:

- Introducción
- Rafael Folch Andreu, "La Química".
- Ana María Alfonso-Golfarb & María Elena Roxo Beltrán, "La Hermética Dividida. Reflejos del Mundo Árabe en los Hijos de Hermes del Renacimiento".
- Michela Pereira, "Elixir Vitae. Los orígenes de la Farmacología alquímica".
- Miguel López Pérez, "La Influencia de la Alquimia en la Terapéutica Moderna: los Protagonistas".
- Francisco Javier Puerto Sarmiento & María Esther Alegre Pérez, "Terapéutica Conservadora versus Terapéutica Renovadora en el Barroco Español".
- José María López Piñero, "Juan de Cabriada y la Iatroquímica de los Novatores de Finales del Siglo XVII".
- Allen G. Debus, "Paracelso y el Retraso de la Renovación Científica en España: el Legado de Felipe II".
- Juan Esteva de Sagrera, "Alquimia, Espagiria y Farmacia en la España del Siglo XVII".
- Mar Rey Bueno & Miguel López Pérez, "La Instrumentalización de la Espagiria en el Proceso de Renovación : las Polémicas sobre Medicamentos Químicos".
- Francisco Javier Puerto Sarmiento, "Alquimistas, Destiladores y Simplistas en la Corte de Felipe II".
- Mar Rey Bueno, "La Institucionalización de la Espagiria en la Corte de El Hechizado".
- María Luisa de Andrés Turrión & Pilar García de Yébenes Torres, "El Final de Destiladores y Espagíricos en el Reinado de Felipe V: Prácticas Químicas en la Real Botica".

 

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Comentario:

Con "Los Hijos de Hermes" se inaugura una nueva colección, denominada "Biblioteca Rafael y Guillermo Folch" cuyos contenidos estarán destinados a profundizar en la historia de la terapéutica. El tomo inicial que hoy tengo en mis manos pretender ser: "...una aportación más, en lo posible más profunda, al conocimiento de las prácticas alquimistas [sic] asociadas a la terapéutica" (p. 10). En la elaboración de sus argumentos los coordinadores de la edición son conscientes de que la actividad de los alquimistas españoles es poco conocida en todos sus niveles. Desde la introducción advierten que: "...ese mundo de una ciencia rara propia de los alucinados hijos de Hermes y de avispados cortesanos a la conquista de puestos y prebendas ha intentado ser estudiada y, dadas las dificultades de su investigación, no lo ha sido con detenimiento hasta fechas muy recientes" (p. 10). Se manifiesta un talante que quiere ser nuevo, fresco, diferente en el tratamiento de una materia escasamente sondeada por los historiadores de la ciencia en nuestro país.

En el comentario de contenidos del libro no me atendré a la estructura planteada por los editores, sino a otra diferente, en cinco bloques, que me resulta más cómoda a la hora de analizar la tipología de los trabajos que conforman el tomo.

El primer ensayo, "La Química", de Rafael Folch Andreu (1881-1960), debe colocarse al margen del resto. Su inserción parece un gesto de los responsables del libro hacia el que fuera gran experto en la historia de la farmacia española y portuguesa, reconocido tutor de investigadores en la Universidad Complutense de Madrid e impulsor del "Museo de Farmacia Hispana". Vemos un claro signo de fidelidad al haber optado por reproducir el texto respetando su formato original de 1935, fecha en la que se publicó por primera vez (1). La introducción de este antiguo escrito en el libro adquiere sentido dentro de un ambiente de homenaje pues, si bien tiene ganada la condición de "clásico", no es menos cierto que el alcance general de sus contenidos está hoy superado por obras más recientes de línea similar (2).

En un segundo bloque voy a comentar los artículos de autores foráneos.

Ana María Alfonso-Golfarb y María Elena Roxo Beltrán comparan algunas recetas medievales y renacentistas sobre la obtención del hidróxido de sodio, conocidas con el nombre de "Aqua sapius", "Aqua saponis" o "Aqua sapa". Su objetivo es sugerir la fuente de tales fórmulas en un "agua penetrante", elaborada a base de batracios, descrita en el tratado árabe Kitâb dahîrat al-Iskandar (siglos IX-X) (3). Además, en sus primeras páginas las autoras nos dibujan de modo personal detalles asociados al lenguaje codificado de los hermética prácticos de origen árabe. El Kitâb dahîrat al-Iskandar, cuyos contenidos se afiliaron de forma ficticia a los míticos tesoros de Alejandría (ar. kunûz al-Iskandar), es uno de los escritos mágico-farmacológicos de corte taumatúrgico compuestos durante los califatos de los Abasíes. Contiene recetas médicas y alquímicas junto a otras mágicas para la preparación de encantamientos, hechizos, amuletos y talismanes (4).

La italiana Michela Pereira aporta un provechoso estudio sobre la idea de "elixir" que tiene su complemento en entregas precedentes (5). Intenta poner de manifiesto la evolución del concepto en la alquimia del Bajo Medievo Latino, entre los siglos XIII y XIV. La definición árabe de al-iksîr habla de un tipo substancias que actuaban a modo de "fármacos" sobre los metales, armonizando su composición interna. Según la creencia de los alquimistas árabes se fabricaban con materiales tomados de los tres reinos naturales. La acción de un al-iksîr bien preparado permitía transformar un metal desequilibrado (plomo, hierro, cobre) en aquellos que poseían un supuesto equilibrio interno (el oro). Los tratados "De anima in arte alchemiae" y "Epistola ad Hasem regem" son algunas de las primeras traducciones que acercan a Europa el concepto de al-iksîr. Sus doctrinas figuran ya en manuales latinos del siglo XIII atribuidos a Roger Bacon o Miguel Escoto. De acuerdo con Pereira el cambio en la concepción de "elixir" se debe a la "Summa perfectionis magisterii" pseudo-geberiana, cuya teoría desestima la pluralidad de materias, decantándose por una limitación al reino mineral. Esta novedad es reproducida en las principales obras atribuidas a Ramón Llull, John Dastin y Arnau de Vilanova. Así, en el "Testamentum" y en el "Rosarium" se nota su definitivo asentamiento entre las corrientes alquímicas europeas. Para entonces el elixir alquímico es un único fármaco mineral preparado con escasas materias, muy concretas, pero cuya acción, una vez elaborado, se realza haciéndose universal.

El norteamericano Allen Debus colabora con un documento que es la traducción al castellano de una comunicación ya editada en inglés (6). Intenta transmitir la idea de que la escasa implantación del paracelsismo en España durante el siglo XVI se debe a dos razones. La primera sería un agudo retraso científico. A Debus le resulta: "...difícil defender que la ciencia y la medicina peninsulares fueron innovadoras en el mismo sentido que la ciencia inglesa, francesa o alemana de ese período" (p. 244). Un segundo factor sería la actividad del movimiento Contrareformista impidiendo una circulación fluida del Corpus Paracélsico en el ámbito peninsular. La razón esgrimida es que: "...la cosmovisión paracelsista entra de lleno en un contexto místico-religioso que concernía, por completo, a la Iglesia" (p. 245). La supuesta presión anti-paracelsista española estaría orquestada por el monarca Felipe II quien, según se nos dice, veía en Paracelso una amenaza al catolicismo. La prueba de una "asfixiante" persecución sería la introducción de Paracelso en los índices inquisitoriales de 1583 y 1584, publicados por Gaspar de Quiroga, Cardenal Arzobispo de Toledo (7).

En un tercer conjunto voy a agrupar aquellos artículos cuyo contenido puede considerarse una concentración o continuación de hipótesis ya extendidas dentro de la historiografía española.

José María López Piñero participa con un escrito sobre "Juan de Cabriada y la Iatroquímica de los Novatores de Finales del Siglo XVII". Su contenido se puede considerar una revisión, casi cuarenta años después, de una teoría ya expuesta por el autor en numerosas ocasiones (8). Según López Piñero, el reconocimiento sistemático de los medicamentos de manufactura química germina en España durante el último tercio del siglo XVII. Se trata de un impulso progresista de corte académico conocido por el nombre de "movimiento novator" (9). Sus protagonistas buscaron una revitalización de la práctica médica basándose en la denuncia del atraso científico nacional y en un fuerte propósito de enmienda, asimilando datos, ideas y técnicas de otros países europeos (10). Su punta de lanza sería el valenciano Juan de Cabriada (1660?-1730?), redactor de una "Carta Filosófica, Médico-Chymica", publicada 1687, que vendría a ser el "...documento fundacional de la renovación científica española" (11). López Piñero compone el artículo a modo de confirmación de sus propias tesis publicadas en 1963. Juan de Cabriada es aquí el promotor fundamental de la modernización en la medicina española del siglo XVII. Se glosa su carrera universitaria y su papel en el patronato de instituciones oficiales como la Regia Sociedad de Medicina de Sevilla y el Real Laboratorio Químico de Madrid. Cabriada sería el campeón de la enseñanza pública, del método experimental y de la escrupulosidad escolástica. Dentro de este perfil biográfico es llamativa la omisión de sus actividades extraacadémicas relacionadas con la producción de "elixires alquímicos" que, tal vez, nos hubieran proporcionado una visión más clara del eclecticismo propio del personaje (12).

El tema de los novatores es retomado en el trabajo conjunto preparado por Francisco Javier Puerto Sarmiento y María Esther Alegre Pérez. Los autores trazan las líneas elementales del enfrentamiento sostenido por el conservadurismo galenista contra las nuevas corrientes que intentaban organizar la implantación de medicamentos químicos, terapias innovadoras y una materia farmacéutica más amplia (13).

Francisco Javier Puerto Sarmiento, esta vez en solitario, aporta otro documento titulado "Alquimistas, Destiladores y Simplistas en la Corte de Felipe II" que viene ser una nueva exposición de un argumento ya concretado por la misma pluma en otras ocasiones (14).

Un cuarto grupo de artículos está caracterizado por el intento de introducir puntos de vista novedosos dentro de la historiografía de la terapéutica renacentista y barroca.

Miguel López Pérez propone una serie de pautas que permitan catalogar mejor las actividades de aquellas personalidades que fomentaron las relaciones entre alquimia y medicina en los siglos XVI y XVII. La denominación de "iatroquímicos" para estas gentes le parece "...una amalgama confusa y caótica, ajena completamente a nuestras intenciones..." (p. 119). El método seguido consiste en "... clasificarlos, unos respecto de los otros según su grado de acercamiento a la alquimia..." (p. 119). En su proyecto establece cuatro tipos: paracelsistas, espagiristas, médico-químicos y químico-médicos. Están todos concebidos como entidades de las que parten conexiones con las prácticas, las teorías y la situación de los personajes históricos a estudiar. El objetivo es clasificar la actitud particular de cada individuo asociándolo a un colectivo, proporcionar una explicación genérica a sus experiencias y concretar después su valor específico. Se pretende plasmar "...un estudio secuencial y cronológico basado en un proceso según el cual se puede observar cómo se iba desprendiendo la carga mágico-mística en cada uno de los protagonistas y cómo la práctica iba cobrando importancia..." (p. 125). El intento de amarrar grupos más o menos homogéneos resulta difícil en vista de la enorme diferenciación entre autores típica aquel período. En el siglo XVI cada protagonista, al explicar su propia obra, realiza definiciones con una gran carga subjetiva aún empleando una terminología o unas estructuras especulativas similares a las de otros autores coetáneos. Actualmente, en vista de lo mucho que queda por avanzar en el estudio de la alquimia en la Edad Moderna, las investigaciones desarrolladas a nivel internacional suelen optar por un estudio individualizado de cada autor, analizando sus fuentes doctrinales, concretando sus proposiciones generales y mostrando su influencia posterior. Se busca siempre un respeto a la forma mentis original, ya que el exámen histórico sólo será fecundo en la medida que el sujeto sea clasificado de acuerdo a sus propias leyes y no con las impuestas por el investigador. El desarrollo de modelos de operabilidad basados en el preestablecimiento de tipos fijos suele redundar en problemas de concepción y definición. Por citar un ejemplo, al delimitar el grupo llamado "espagiristas" se dice que ".... la espagiria es, ante todo, un método de trabajo cuya parte inicial es la destilación, razón por la que podemos afirmar que todos los espagiristas eran destiladores. Además, en la segunda parte de su método, el espagirista daba un paso más y, con los restos que quedaban tras la destilación, unidos al propio líquido destilado, realizaba una serie de destilaciones, con el fin de purificar el cuerpo todo lo posible. Es decir, la espagiria daba un segundo paso a la labor del destilador. La propia etimología de la palabra, de origen griego, lo dice: span [sic] (unir) y ageiron [sic] (separar)..." (p. 130). Si partimos de un análisis autor por autor veremos que la definición de Spagyria es muy variada. Teofrasto Paracelso (1493-1541), padre de este neologismo, establece en su tratado "De natura rerum" (ca. 1537) que el "médico spagírico" se sirve de "...las operaciones y modalidades del Arte Alquímico, a saber, la destilación, la fermentación, la sublimación, la calcinación, la reverberación, la separación, la coagulación, la tintura, etc., y otras operaciones similares" (15). Lejos, por tanto, de reducir sus manipulaciones a la destilación, asimila todo tipo de usos alquímicos. Pero la Spagyria también tiene para Teofrasto un gran peso teórico. Definida como el arte "...docet purum singulum cujusque substantiae separare ab impuro" (16) tendría su vertiente especulativa, ayudando, desde la experiencia, a descubrir una nueva visión de la naturaleza. En cuanto a "extracción" (al. ausziehen), revela formas ocultas en las substancias naturales y contribuye de forma decisiva al estudio de ciertas causas, cualidades o agentes hasta entonces ignorados en medicina. En consecuencia, la Spagyria no es para Teofrasto un mero conjunto de técnicas para la manufactura de fármacos, sino todo un sistema teórico-práctico basado en conceptos y experiencias alquímicas. Según proclama en su "Opus Paramirum" (ca. 1531): "Aprended, por tanto, la alquimia, también llamada spagyria: ella enseña el modo de discernir lo falso de lo verdadero. De esta forma, ella es la Luz de la Naturaleza, gracias a la cual se pueden ver claramente las pruebas y caminar en la luz. Y es por [medio de] esta Luz de la Naturaleza como nosotros debemos interpretar y discurrir, y no por la fantasía que no es capaz de elaborar nada más que los cuatro humores y su composición, su incremento, su grado, su disminución y otras bagatelas inútiles, impropias de un genio excelente y abundante sino, más bien, de un fundamento imaginario y en absoluto verificado" (17). Tal y como explica Lucien Braun: "...en Paracelso la expresión «ars spagyrica» es indicativa de una ruptura: a la medicina académica, representativa, apoyada en saberes antiguos, se opone con dureza una medicina que reclama la experiencia y una nueva visión de la naturaleza" (18). El grave componente teorizante de la Spagyria es recogido en posteriores clasificaciones de las ciencias. Johann-Heinrich Alsted (1588-1638), uno de los enciclopedistas más reputados de su tiempo reconoce en ella la disciplina que analiza los tres principios hipostáticos (sal, azufre y mercurio) constitutivos de la materia (19).
Empero, se da la circunstancia de que Paracelso también define la Spagyria como "separación" (al. scheiden), y lo hace en términos de gran practicidad. En ocasiones, como en su célebre crítica a los boticarios del "Das buch paragranum" (1529-1530), emplea la expresión "arte separatoria" (al. kunst separandi), lo que indujo a creer que se refería exclusivamente a la destilación, también llamada así en otros importantes textos de su tiempo sobre terapéutica. Por esta razón, ya en el último cuarto del siglo XVI uno de los primeros autores en reducir la Spagyria a la destilación es Jean Brouaut (1541?-1603?) en sus "Trois livres des elemens chymiques et spagyriques". Según Brouaut, el objetivo esencial de los espagiristas sería, en primer lugar, la obtención de una panacea alcohólica de valor incomparable y, en segundo término, la confección de todo tipo de destilados
(20). Esta interpretación, con ligeras variantes, se mostró muy viva en plumas del siglo XVII. Jean Marcé (1600-1671) puede ser una muestra de quienes la introducen en sus clasificaciones de las artes y las ciencias (21).
Podemos ver la frágil e irregular interpretación de los términos que caracteriza a los textos renacentistas y barrocos. La heterogeneidad formal reinante entre los promotores del medicamento (al)químico, típica de estos períodos históricos, es el resultado de una disciplina anárquica en su formulación teórica debida a la carencia de una colección metódica reglamentada. De hecho, ciertas formas fluidas de institucionalización en la enseñanza no cuajaron hasta finales del siglo XVII. Así pues, resulta complicado hablar de grupos de carácter "tremendamente homogéneo" (p. 125). A pesar de estos detalles el artículo de López Pérez resulta innovador si lo circunscribimos al ámbito historiográfico hispano. Su valor reside en que el autor rompe con la monótona y desacertada costumbre de identificar con un mismo apelativo, ora "novatores" ora "espagiristas" o "quemíatras", a todos los defensores del medicamento químico durante la Edad Moderna. Este hábito insólito ha convertido en "paracelsistas" a Leonardo Fioravanti (1517-1588), Diego de Santiago (¿-1599?), Juan Vincenzo Forte (¿-1601?) y tantos otros que poco tienen que ver con la opinión de Teofrasto Paracelso.
No puedo cerrar el comentario a este artículo sin mencionar la variada bibliografía recurrida por López Pérez, la mayoría obras extranjeras. Maneja con fluidez un notable volumen de autores, aunque se han deslizado tres errores. Atribuye a "...Bernardo el Trevisano (1406-1490)..." (p. 120) el tratado "De Chymico miraculo"
(22). Se hace a Martín Ruland "el Viejo" (1532-1602) autor de un "Lexicon alchemiae", obra de su hijo (p. 225) (23). Se dice del francés Alexandre de la Tourrete (1524?-1579?) que era "...todo un alquimista antiparacelsista..." (p. 127) y se le atribuye un "Discours responsif..." contra las doctrinas de Teofrasto (p. 127, n. 23) (24).

En otro artículo, Juan Esteva de Sagrera considera que existe una "confusión" (p. 262) dentro de la historiografía española a la hora de analizar las relaciones entre alquimistas, destiladores, espagiristas y boticarios de la España barroca. En un tono general se cuestiona la tesis, propuesta por López Piñero, según la cual los medicamentos químicos fueron introducidos en nuestro país en la segunda mitad del siglo XVII dentro de un movimiento de renovación científica (movimiento novator) encabezado por el valenciano Juan de Cabriada. Esteva considera que se ha sobrevalorado a Cabriada y a su "Carta philosóphica médico-chymica" de 1687 pues su "...obra no estaba, no podía estar, en el centro del debate que habría de renovar la ciencia española" (p. 268). Para componer su hipótesis, Esteva localiza casos puntuales anteriores a la "Carta philosóphica..." en los que se mencionan los medicamentos químicos sin considerarlos algo excepcional. Las referencias básicas son Diego de Santiago (¿-1599?), fray Esteban Villa (?-1660) y Gaspar Bravo de Sobremonte (1603-1683). Según afirma: "...las dificultades atribuidas a la difusión de los medicamentos químicos en España no encajaban con que varios boticarios evidenciasen que sabían prepararlos, lo que quiere decir que su uso no fue tan raro como se supone, puesto que estaban descritos en los principales textos farmacéuticos y se les dio precio en varias tarifas de la época" (p. 263).

Mar Rey Bueno y Miguel López Pérez completan juntos un texto también dedicado al proceso de renovación científica vivido en la medicina española durante el siglo XVII. El trabajo plantea un discurso diferente al habitual apoyado en nuevos datos históricos que van saliendo a la luz y que, en buena parte, se deben a investigaciones de los dos firmantes. Rey Bueno y López Pérez proponen una revisión historiográfica sobre la base de una relectura de la documentación relacionada con el tema de la producción de medicamentos químicos a nivel oficial. Esta nueva tendencia historiográfica no parte de una revisión directa de otras tesis contemporáneas, sino que intenta remitirse a las fuentes originales del Barroco. No se puede considerar un modelo divergente del patrón tradicional establecido por autores ya clásicos como López Piñero sino que, en líneas generales, parece haber nacido independientemente o, en algunos aspectos, como desarrollo de ciertos proyectos abocetados por Juan Esteva de Ságrera. La idea más recurrida es que "...no fue necesario introducir la terapéutica moderna en España porque, de hecho, parecía circular de forma corriente entre los sectores sanitarios implicados" (p. 280). Las polémicas escenificadas en la segunda mitad del siglo XVII, basadas en el tema de la administración de ciertos medicamentos, no estarían provocadas por a introducción de preparados químicos, al parecer ya conocidos por los boticarios españoles. La causa propuesta es un enfrentamiento profesional entre estamentos médicos que "...envuelve factores sociales, políticos y personales" (p. 286). Los aspirantes a ocupar un papel relevante en la medicina nacional habrían instrumentalizado la "espagiria" en su afán por el acceso a cargos oficiales más importantes. Buscaban erosionar rápidamente la autoridad de la élite institucional de la época, formada en su mayor parte por gentes de tendencia galenista.

Mar Rey Bueno participa con otro documento titulado "La Institucionalización de la Espagiria en la Corte de El Hechizado". El análisis se fija en el reinado de Carlos II, cuya corte es considerada "...un foco de renovación de primera magnitud" (p. 376). La autora refleja la forma en la que se institucionaliza, siempre dentro de la terapéutica cortesana, la labor de ciertos profesionales, llamados "espagíricos", concentrados en la elaboración de medicamentos químicos. Este hecho estaría motivado por los graves episodios febriles sufridos en la década de los noventa por un monarca débil, enfermizo y sin capacidad de proporcionar un heredero al trono. La búsqueda desesperada de una cura a tantos males fue clave en la creación del Real Laboratorio Químico (1693-1700), fugaz establecimiento proyectado por el médico de cámara Dionisio de Cardona.

Cerrando el libro, María Luisa de Andrés Turrión y Pilar García de Yébenes Torres elaboran un texto sobre "El Final de Destiladores y Espagíricos en el Reinado de Felipe V ". El trabajo concreta los detalles sobre el cierre de dos departamentos de la Real Botica dedicados a las prácticas químicas (25). El primero fue la "Oficina de Destilación", en 1721, con lo que quedó extinguido el oficio cortesano de "Destilador Mayor". Una segunda medida terminó con el "Real Oficio de la Química" en julio de 1723. Desde el punto de vista de las autoras, estos puestos habían sido ocupados tradicionalmente por "...unos individuos de dudosa reputación científica" (p. 424). La medida borbónica intentó dar solución esta anomalía agregando los cargos al de boticario mayor.

José Rodríguez Guerrero

 

 

 

 

1. - R. FOLCH ANDREU, (1935), "La Quimica", en: «Estudios sobre la Ciencia Española del Siglo XVII», Gráfica Universal, Madrid, pp. 337-393. - Se imprimió también de forma separada: - R. FOLCH ANDREU, (1935), "La Quimica en España durante el Siglo XVII", Gráfica Universal, Madrid. - Para obtener detalles sobre su vida profesional: - S. MUÑOZ CALVO, (1982), "Rafael Folch Andreu, el Profesor"; en: G. Folch & F. J. Puerto (Coord), «Medicamento, Historia y Sociedad», Ed. Universidad Complutense, Madrid, pp. 87-106. - F. J. PUERTO SARMIENTO, (1982), "Don Rafael Folch, Secretario de la Facultad de Farmacia de Madrid"; en: G. Folch & F. J. Puerto (Coord), «Medicamento, Historia y Sociedad», (op. cit.), pp. 107-137. - Una cronología biográfico-profesional se encuentra en: - F. J. PUERTO SARMIENTO & G. FOLCH, (1982), "Bibliografía y Documentos Relacionados con el Profesor Rafael Folch Andreu", en: «Catálogo de la Exposición Homenaje al Prof. Rafael Folch», s. n., Madrid [edición a ciclostil].

2. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1972), "Química y Medicina en la España de los Siglos XVI y XVII. La Influencia de Paracelso", en: «Cuadernos de Historia de la Medicina Española», nº 11, pp. 17-54. - J. M. LÓPEZ PIÑERO et al., (1976), "Materiales para la Historia de las Ciencias en España: Siglos XVI y XVII", Ed. Pre-Textos, Barcelona. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1979), "Ciencia y Técnica en la Sociedad Española de los Siglos XVI y XVII", Labor, Barcelona. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1983), "Diccionario Histórico de la Ciencia Moderna en España", 2 vols., Ed. Península, Barcelona. - E. PORTELA MARCO & A. SOLER SÁIZ, (1987), "Bibliographia chemica hispanica : 1482-1950", Instituto de Estudios Documentales e Históricos sobre la Ciencia, Valencia. - F. J. PUERTO SARMIENTO, (1995), "La Terapéutica Ilustrada", en: P. Aceves Pastrana (ed.) «Las Ciencias Químicas y Biológicas en la Formación de un Mundo Nuevo», Universidad Autónoma Metropolitana, México, pp. 45-82.

3. - A. M. ALFONSO-GOLFARB & S. A. C. JUBRAN, (1999), "Livro do Tesouro de Alexandre: Um estudo hermética árabe na oficina da história da ciência", Ed. Vozes, Petrópolis.

4. - Junto a la edición de Alonso-Golfard (op. cit., supra, n. 3) puede consultarse: - J. RUSKA, (1926), "Tabula Smaragdina: ein Beitrag zur Geschichte der Hermetischen Literatur", C. Winter, Heidelberg, pp. 68 y ss. - M. PLESSNER, (1927), "Neue Materialen zur Geschichte der Tabula Smaragdina", en: «Der Islam», 16, pp. 77-113. - M. PLESSNER, (1954), "Hermes Trismegistus and Arab Science", en: «Studia lslamica», 2, pp. 45-59.

5. - M. PEREIRA (1993), "Mater medicinarum : la tradizione dell'elixir nella medicina del XV secolo", en: «Annali del dipartimento di filosofia», nº 9 [utilizo una copia dactilografiada]. - M. PEREIRA, (1993), "Un tesoro inestimabile : Elixir e prolongatio vitae nell'alchimia del'300", en: «Micrologus», 1, pp. 161-187. - M. PEREIRA, (1995), "Teorie dell'elixir nell'alchimia latina medievale", en: «Micrologus», 3, pp. 103-148. - M. PEREIRA, (1998), "Mater Medicinarum : English Physicians and the Alchemical Elixir in the Fifteenth Century", en: Roger French et al. (eds.), «Medicine from the Black Death to the French Disease», Ashgate, Aldershot, pp. 26-52.

6. - ALLEN G. DEBUS, (1998), "Paracelsus and the Delayed Scientific Revolution in Spain. A Legacy of Philip II", en: A. G. Debus & M. T. Walton (eds.) «Reading the Book of Nature», Truman State University Press, Kirksville, pp. 147-161.

7. - Es extraño que se dé tanta importancia a la brevísima referencia a Teofrasto en los Índices de Quiroga. De un Corpus Paracélsico formado entonces por más de 150 volúmenes solamente se prohibe una obra y se recomienda expurgar otras dos. ¿Es esto un acoso implacable?. Para Debus, el Índice quiroguiano tiene especial relevancia al hacer de España el primer país en el que una autoridad religiosa condena a Teofrasto, de ahí parte la suposición de una viva actividad anti-paracelsista. Sin embargo, se puede comprobar que ya se oficializaron condenas anteriores en otros países, algunas mucho más crudas, como la establecida por la Facultad de Teología de la Sorbona en 1578. También debe apreciarse la inclusión de Paracelso en el Índice de Parma de 1580, anterior siempre al comentario quiroguiano. Asimismo se puede comprobar que las críticas religiosas contra las ideas paracélsicas fueron mucho más agudas fuera de España. Para todo este tema, véase: - J. RODRIGUEZ, (2001), "Censura y Paracelsismo durante el Reinado de Felipe II", en: «Azogue», nº 4, URL: http://www.revistaazogue.com

8. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1963), "Juan de Cabriada y las Primeras Etapas de la Iatroquímica en la Medicina Moderna en España", en: «Cuadernos de Historia de la Medicina Española», nº 2, pp. 129-154. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1963), "Los Comienzos en España de la Medicina Moderna y de la Iatroquímica", en: «Actas del I Congreso Español de Historia de la Medicina», pp. 143-148. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1965), "La Carta Filosófica-médico-chymica (1687) de Juan de Cabriada, Punto de Partida de la Medicina Moderna en España", en: «Asclepio», 17, pp. 207-214. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1973), "Paracelsus and His Work in 16th and 17th Century Spain", en «Clio Medica», nº 18, pp. 113-141. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1992), "La Carta Filosófica-médico-chymica, de Juan de Cabriada, y su Influencia en el Movimiento Novator", en: «Clásicos Médicos Valencianos del Siglo XVII», Ed. Generalitat Valenciana, Valencia, pp. 37-47 y 145-163. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1993), "Juan de Cabriada y el Movimiento Novator de Finales del Siglo XVII, Reconsideración después de Treinta Años." en: «Asclepio», 45, pp. 3-53. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1994), "Joan de Cabriada i la Introducció de la Ciencia Medica Moderna a Espanya", Ed. Generalitat Valenciana, Valencia. - J. M. LÓPEZ PIÑERO & V. NAVARRO BROTONS, (1995), "La Carta Filosófica-médico-chymica, de Joan de Cabriada, Manifest del Moviment Novator i la Polèmica entre Galenistes i Iatroquímics", en: «Història de la Ciencia el País Valencià», Ed. Generalitat Valenciana, Valencia, pp. 277-288. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1998), "El Manifiesto de Renovación, la Carta Filosófica-médico-chymica, de Juan de Cabriada", en: «La Actividad Científica Valenciana de la Ilustración », Ed. Diputació de Valencia, Valencia, t. I, pp. 39-44.

9. - La palabra "novatores" ya fue utilizado por Johannes Cochlaeus (1479-1555) en la primera mitad del siglo XVI para referirse a Martín Lutero y a sus seguidores. En este contexto religioso suele tener un tono despectivo que repiten autores como, por ejemplo, Domenico Maranta en su "Declamatio adversus nostrorum temporum novatores in pisanis Athenis habita..." de 1588, fray Francisco de Torres en el "Canonum apostolorum et decretalium epistolarum pontificum apostolicorum defensio..." de 1604, Claude de Carnin en su "Apparatus bellicus oppugnationis turris Babel..." de 1620, Agostino Vigiani en el "De Ecclesiastica immunitate disputationes sex" de 1607 y Marco Antonio Alegre de Casanate en en su obra "Paradisus Carmelitici decoris" de 1639. En medicina se adaptó para reprobar ideas nuevas y darles una carga de "heterodoxia infundada". La primera referencia que he encontrado está en la "Osteologia" de Jean Riolan hijo (1580-1657), aunque es posible que haya casos anteriores. - J. RIOLAN, (1614), "Osteologia, ex veterum et recentiorum praeceptis descripta, in qua continentur : Isagogica de ossibus tractatio, cum osteologia infantium usque ad septennium, per Joannem Riolanum. Claudii Galeni liber de Ossibus ad tyrones, et in eundem librum Jacobi Sylvii,... commentarius. Joannis Riolani,... ex planationes apologeticae pro Galeno adversus novitios et novatores anatomicos. Simiae osteologia... Osteologia ex Hippocratis libris eruta, collecta...", ex officina A. Périer, París. - Los historiadores de la ciencia española lo utilizan para referirse a un grupo de personas partidarias de la renovación científica entre los años 1679-1700.

10. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1969), "La Introducción de la Ciencia Moderna en España", ed. Ariel, Barcelona. - J. M. LÓPEZ PIÑERO et al., (1976), "Materiales para la Historia de las Ciencias en España: Siglos XVI y XVII", Ed. Pre-Textos, Barcelona. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1979), "Ciencia y Técnica en la Sociedad Española de los Siglos XVI y XVII", Labor, Barcelona. - J. M. LÓPEZ PIÑERO, (1983), "Diccionario Histórico de la Ciencia Moderna en España", 2 vols., Ed. Península, Barcelona.

11. - No entraré en valoraciones; éstas corresponden a los especialistas en la materia, escasísimos, por cierto, en nuestro país. Sí debo dejar indicado que se han propuesto varias alternativas. Rafael-Ángel Rodríguez Sánchez considera una tesis intermedia que reconoce un cierto progreso a nivel extraoficial e individual, de manera que: "...[la medicina académica], como defendían Marañón y Morejón, no fue en ningún caso brillante, sin embargo, toda una serie de desarrollos se albergaron al amparo de lo oficioso, lo que convirtió a este periodo, como afirman Piñero y Granjel, en una etapa muy importante para la historia de la cultura española". Véase: - R. A. RODRÍGUEZ SÁCHEZ, (1998), "Algunos Aspectos de la Ciencia Universitaria en la Modernidad Española", en: «Actas de las I Jornadas de Filosofía y Medicina», Universidad de Sevilla (Facultad de Filosofía), 1-3 octubre 1998 [en prensa]. - Sin salir del volumen que aquí estoy reseñando, Miguel López Pérez y Mar Rey Bueno defienden la idea de que "...no fue necesario introducir la terapéutica moderna en España porque, de hecho, parecía circular de forma corriente entre los sectores sanitarios implicados". Véase: - M. LÓPEZ PÉREZ & M. REY BUENO, (2001), "La Instrumentalización de la Espagiria en el Proceso de Renovación : las Polémicas sobre Medicamentos Químicos", en: F. J. Puerto et al. (coord.) «Los Hijos de Hermes», Corona Borealis, Madrid, pp. 279-346, cf. p. 280. - Para Juan Esteva de Sagrera: "...la defensa de los remedios químicos no fue excepcional, ni debe sorprender que se aceptase su uso por parte de médicos y boticarios que no habían roto en modo alguno con la tradición". - J. ESTEVA DE SAGRERA, (2001), "Alquimia, Espagiria y Farmacia en la España del Siglo XVII", en: F. J. Puerto et al. (coord.) «Los Hijos de Hermes», Corona Borealis, Madrid, pp. 261-275, cf. p. 262.

12. - Gracias a la investigación de Mar Rey Bueno hoy sabemos que, durante su estancia en la Corte, Cabriada decidió continuar la obra de un alquimista valenciano llamado Roque García contratado en 1698 para elaborar un elixir prodigioso de origen alquímico. El remedio estaba destinado al rey Carlos II. Véase: - MAR REY BUENO, (1994), "Consideraciones sobre un Manuscrito Alquímico de la Real Botica", Tesis de Licenciatura Inédita, Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid. - MAR REY BUENO; MARÍA ESTHER ALEGRE PÉREZ, (1995), "Roque García de la Torre, Alquimista al Servicio de Carlos II", en: «Llull», 18 (35), pp. 545-567. - MAR REY BUENO, (2000), "Alquimia en la Corte de Carlos II (1661-1700)", en: «Azogue», nº 3, URL: http://www.revistaazogue.com . - Resulta sorprendente que, en el libro que ahora reseño, el suceso sea mencionado en todos los artículos sobre terapéutica española del siglo XVII... menos en el de López Piñero. - F. J. PUERTO SARMIENTO at al. (Coord.), (2001), "Los Hijos de Hermes", Corona Borealis, Madrid, pp. 183, 262, 269, 273 y 398-401.

13. - Su descripción sigue la estructura del apartado "terapéutica barroca" perteneciente a: - F. J. PUERTO SARMIENTO, (1997), "El Mito de Panacea. Compendio de Historia de la Terapéutica y de la Farmacia", Doce Calles, Aranjuez, pp. 324-358.

14. - F. J. PUERTO SARMIENTO, (1993), "La Farmacia Renacentista Española y la Botica de El Escorial", en F. J. Campos y Fernández de Sevilla (ed.), «La Ciencia en el Monasterio de El Escorial. Actas del Simposium», Instituto Escurialense de Investigaciones Históricas y Artísiticas, El Escorial, t. I, pp. 73-131, cf. pp. 124-130.- F. J. PUERTO SARMIENTO, (1997), "La Panacea Áurea. Alquimia y Destilación en la Corte de Felipe II (1527-1598)", en «Dynamis», vol. 17. - F. J. PUERTO SARMIENTO, (1999), "Los Destilatorios del Monasterio de El Escorial: Alquimia y Paracelsismo en la Corte de Felipe II", en Martínez Ruíz, E. (dir.) «Felipe II, la Ciencia y la Técnica», pp. 429-446.

15. - PARACELSO, (1922-1933), "Sämtliche Werke herausgegeben von Karl Sudhoff,... [und Wilhelm Matthiessen.] I. Abteilung ; Medizinische naturwissenschaftliche und philosophische Schriften... 1. [-14] Band", 14 vols., W. Barth - R. Oldenbourg, Munich - Berlín, cf. t. XI, p. 369.

16. - PARACELSO, (1922-1933), "Sämtliche Werke... ", (op. cit.), cf. t. IV, p. 93.

17. - PARACELSO, (1922-1933), "Sämtliche Werke... ", (op. cit.), cf. t. IX, p. 55: "Darum so lern Alchimiam, die sonst Spagyria heisset, die lernet zu scheiden das falsch von dem gerechten. Also ist das Liecht der Natur, das man durchaus prob sehe und am liecht wadere. In solchem Liecht der Natur sollen wir kallen und reden, nit aus der fantasei in deren nir mechset dan vier humores und ir compositiones, augmentum, status und decrementum und dergleicher unnüz anders geschweze, die nicht aus praeclaro ingenio gent, das angefüllt ist mit gutem schaz, sonder aus erdichten unbewertem grunt".

18. - PARACELSO, (2000), "De l'alchimie", Presses Universitaires de Strasbourg, Estrasburgo, p. 26.

19. - J. H. ALSTED, (1649), "Ioan. Henrici Alstedii Scientiarvm omnivm encyclopaediae..., Omnia praeceptorvm, regvlarvm, et commentariorvm serie perpetua contexta, insertis passim tabulis, compendiis, lemmatibus marginalibus, lexicis, controuersis, figuris, florilegiis, locis communibus, & indicibus. Opus postrema auctoris manu ita limatum, vt sit instar bibliothecae omnium instructissimae", 4 vols. en 2 t., sumptibus Ioannis Antonii Hvgetan filij & Marci Antonii Ravavd, Lyon, cf. p. 417: "Archelogia spagirica est doctrina de tribus principiis hypostaticis omnium corporum. Estque generalis, vel specialis. Generis praecipit de tribus affectionibus, seu requisitis, principiorum hypostaticum. Prima affectio est, quod principia ista sunt sensibilia: secunda, quod spitiruum proxima domicilia: tertia, quod de se inicem participant. Archelogia spagirica specialis edisserit ipsa principia hypostatica, uti sunt mercurius, sulphur, et sal...".

20. - La obra permanece sin editar. Fue parcialmente plagiada por Clovis Hesteau de Nuysement (1550/60?-1623/24?) y Henry de Rochas (1575?-1654?). Véase: - S. MATTON, (1992-1996), "Henry de Rochas plagiaire des Trois livres des elemens chymiques et spagyriques de Jean Brouaut", en: «Chrysopoeia», nº 5, pp. 703-720. - Tres manuscritos anónimos fueron descritos por Wallace Kirsop en su tesis doctoral. Son los siguientes: - París, Bibliothèque Mazarine Ms. 3678 (2681 B), siglo XVII. - París, Bibliothèque Sainte-Geneviève, Ms. 2245, siglo XVII. - París, Bibliothèque centrale du Muséum national d'histoire naturelle, Ms. 361, siglo XVIII, pp. 31-227. - Didier Kahn ha localizado otras dos transcripciones: - Bolonia, Biblioteca Universitaria (fondo Caprara), Ms. cod. 457, b. XI, fasc. 1, ff. 15r y 146v. - Bolonia, Biblioteca Universitaria (fondo Caprara), Ms. cod. 457, b. XXIII, fasc. 3, ff. 1r y 85r. - Véase: - W. KIRSOP, (1960), "Clovis Hesteau, sieur de Nuysement, et la littérature alchimique de la fin du XVIe siècle et du début du XVIIe siècle", 2 vols., tesis doctoral inédita, Université de Paris-Sorbonne, cf. t. I, pp. 29-31 y 147 [ejemplar utilizado: París, Bibliothèque de la Sorbonne, cota: W. Univ. 1960 (21)]. - D. KAHN, (1994), "Le fonds Caprara de manuscrits alchimiques de la Bibliotheque Universitaire de Bologne", en: «Scriptorium», nº 48, pp. 62-110, cf. p. 96. - Fue Kirsop quien propuso la tesis de Brouaut como posible autor de los "Trois livres...", aunque no llegó a darla por definitiva y planteó la alternativa de Alexandre de la Tourrete. Didier Kahn aportó indicios a favor el primero en: - DIDIER KAHN, (1998), "La Faculté de médecine de Paris en échec face au paracelsisme : enjeux et denouement réels du procès de Roch Le Baillif", en: H. Schott & I. Zinguer (eds.), «Paracelsus und seine internationale Rezeption in der fruehen Neuzeit», Brill, Leiden, pp. 146-226. - Sylvain Matton resume el status quaestionis sobre la atribución de esta obra en: - S. MATTON, (1992-1996), "Alchimie et Stoïcisme. Modèle philosophique de l'alchimie clasique?", en: «Chrysopoeia», nº 5, pp. 5-144, cf. n. 288 y n. 289. Por mi parte puedo añadir que existe una copia en Estrasburgo, ya mencionada por Matton, que da una explicación al origen del plagio de Hesteau de Nuysement y propone dos autorías diferentes, aunque sin base argumental: - Strasbourg, Bibliothèque Nationale et Universitaire, Ms. 368 (Franç. 13), siglo XVIII, cf. p. aiii: "Remarque de Monsieur de la Noüe. il en résulte qu'une partie de l'ouvrage aurait été envoyée par M. de l'Or, médicine de Montpellier, demeurant à Chartres, au sieur de Nuisement [sic], qui l'aurait fait imprimer sans l'aveu de M. de l'Or. L'auteur serait, selon les uns, M. de Candale, mathématicien, selon d'autres, dont le vicomte de Conserans, le médecin Belbrun".

21. - J. MARCÉ, (1657), "Fr. Leonis carmelitae Rhedonensis, studium sapientiae universalis contextus scientiae humanae", apud Jacobum Quesnel, París, cf. vol. II, cap. 2, sec. 51: "Chimiae seu alchimiae, nomen et inventum Arabes perperam creduntur sibi arrogare [...] vocatur passim «spagirica» [...]. Sciencia est corpora mixta naturalia dissolvens ac dissoluta coagulans, ut eorum naturas penitius inspiciat, ex iisque medicamina conficiat jucundiora simul ac salubriora. Ego certe, altiorem quoque aliam ab causam, philosophiam secretam ac vere naturalem soleo appellare".

22. - Esta obra se editó por primera vez en: - GERARD DORN, (1583), "Trevisanus de Chymico miraculo, quod lapidem philosophiae appellant. Dionys. Zecharius,... de Eodem. Auctoritatibus variis principum hujus artis, Democriti, Gebri, Lullii, Villanovani confirmati et illustrati. Per Gerardum Dorneum", ex officina haeredum P. Pernae, Basilea. - Nueva edición en: - GERARD DORN, (1600), "Trevisanus de Chymico miraculo quod lapidem philosophiae appellant. Dionys. Zecharius de eodem. Auctoritatibus variis principum huius artis, Democriti, Gebri, Lullii, Villanovani confirmati et illustrati per Gerardum Dorneum", typis Conradi Waldkirchii, Basilea. - En 1602 se incluyó en el primer tomo del "Theatrum Chemicum", junto con otros escritos originales y traducciones del belga Gerard Dorn. En principio, la figura de un alquimista del siglo XVI denominado "Bernardo el Trevisano" parece, a la luz de los datos históricos, completamente ficticia. La estructura elemental de su leyenda se basa en un personaje alemán de la segunda mitad del siglo XIV llamado Bernard de Trèves. Véase: - CLAUS PRIESNER & KARIN FIGALA (eds.), (1998), "Alchemie: Lexikon einer hermetischen Wissenschaft", C. H. Beck, Munich, item: "Bernardus Trevirensis". - Su biografía se mitifica por primera vez en 1567 en un famoso texto impreso junto al "Opuscule tres-excellent" de Denis Zecaire: - VV. AA., (1567), "Opuscule tres-excellent, de la vraye philosophie naturelle des metaux. Traictant de l'augmentation & perfection d'iceulx. Avec un advertissement d'euiter les folles despences qui se font ordinairement par faulte de vraye science: par Maistre D. Zacaire Gentilhomme & Philosophe Guiennois. Avec le traicté de venerable Docteur Allemand Messiere Bernard Allemand Conte de la Marche Trevisane sur le mesme subgiect", Guillaume Silvius, Anvers. - Este primer tratado pseudo-biográfico del "Trevisano" tiene un origen francés y parece haber sido redactado a finales del siglo XV. - DIDIER KAHN, (1994), "Le fonds Caprara de manuscrits alchimiques de la Bibliothèque Universitaire de Bologne", en: «Scriptorium», 48, pp. 62-110, cf., item 133. - DIDIER KAHN (2003), "Recherches sur le Livre attribué au prétendu Bernard le Trévisan (fin du XVe siècle)", en: C. Crisciani & A. P. Bagliani (eds.) «L'Alchimia Medica» Ed. del Galluzzo, Florencia [en prensa]. - Su argumento es el de un relato ejemplarizante sobre el proceso iniciático necesario hasta alcanzar la Piedra Filosofal. - FRANK GREINER, (2000), "Les métamorphoses d'Hermès: tradition alchimique et esthétique littéraire dans la France de l'âge baroque (1583-1646)", Honoré Champion, París, pp. 231-234. - Montada la fábula, el "Liber de Chymico miraculo" es una herramienta seudoepigráfica posterior que intenta afianzar entre los alquimistas la relevancia de esta personalidad ideal. - El análisis filológico e histórico del texto evidencia que la autobiografía incluida en el tratado le ha sido incrustada por un copista posterior. - LYNN THORNDIKE, (1923-1958), "A History of Magic and Experimental Sciences", 8 vols., Columbia University Press, New York, cf. t. III, pp. 611-627. - Aunque el "Liber de Chymico miraculo" circuló de forma anónima o con otros títulos, se piensa que su autor original pudo ser un alquimista llamado Jean de Berle (siglo XV). Versiones con este nombre fueron registradas por Leglet-Dufresnoy: - LENGLET-DUFRESNOY, (1742), "Histoire de la philosophie hermétique, Accompagnée d'un catalogue raisonné des écrivains de cette science. Avec le véritable Philalèthe, revu sur les originaux", 3 vols., P. Coustelier, París, cf. t. III, p. 120: "Joh. De Berle, Liber de Chimico miraculo, quod lapidem Philosophiae appellat, in «Theatro chimico»". - Sobre Jean de Berle, véase: - D. ZECAIRE, (1999), "Opuscule tres-excellent, de la vraye philosophie naturelle des metaux", SEHA-Archè, París-Milán, pp. 50-55.

23. - La obra en cuestión es: - M. RULAND, (1612), "Lexicon alchemiae, sive dictionarium alchemisticum, cum obscuriorum verborum et rerum hermeticarum, tum Theophrast-Paracelsicarum, phrasium, planam explicationem continens, auctore Martino Rulando,...", cura ac sumtibus Zachariae Palthenii, Frankfurt. - No puede ser obra de Martín Ruland "el Viejo", muerto en 1602, pues la epístola dedicatoria lleva la fecha "Pargere, 20 aprilis 1611". El auténtico redactor es Martín Ruland "el Joven" (1569-1611), fallecido sólo tres días después de rubricar el prólogo. Véase: - CLAUS PRIESNER & KARIN FIGALA (eds.), (1998), "Alchemie: Lexikon einer hermetischen Wissenschaft", (op. cit.), item: "Ruland".

24. - Para una aproximación biográfica al personaje. - D. KAHN, (1995), "Le paracelsisme de Jacques Gohory", en: «Aries», nº 19, pp. 81-130, cf. n. 112. - A comienzos de 1575, Alexandre de la Tourrete publicó en Lyon dos obras reunidas en un mismo tomo. - A. DE LA TOURRETE, (1575), "Bref discours des admirables vertus de l'or potable : auquel sont traictéz les principaux fondemens de la médecine, l'origine et cause de toutes maladies, et quels sont les médicaments plus propre à leur guérison, et à la conservation de la santé humaine : composé par le Sr. Alexandre de la Tourrete", Pierre Roussin, Lyon. - La primera parte (cf., ff. 1r-24r) lleva el título "Bref discours des admirables vertus de l'or potable". En ella, intercede en favor de varias tesis paracélsicas. Declina la teoría humoral del galenismo y opta por estudiar la patología de las enfermedades en función de los tres principios, sal, azufre y mercurio, propuestos por Teofrasto. Califica a éste de "gran filósofo" que merece ser colocado en el "primer rango" de la práctica médica por haber conseguido tratar "todas las enfermedades que los médicos académicos de su tiempo estimaron incurables". A continuación expone la forma de elaborar un oro potable de virtudes especiales y lo hace citando escritos del Corpus Paracélsico como el "De tinctura philosophorum", "De spiritibus planetarum", "De vita longa", "Pyrophilia" y el "De contracturis". La segunda obra (cf. ff. 24r-47r) es una "Apologie de la noble et tres utile science d'alchimie", repleta de alabanzas a la doctrina de Paracelso, a quien considera "el más grande alquimista después de Hermes". Su exposición suscitó notables controversias, tantas que ese mismo año recibió una detallada réplica, en 27 folios, publicada en París por Jean de l'Astre - J. GOHORY, (1575), "Discours responsif à celui d'Alexandre de la Tourrete sur les secrets de l'art chymique et confection de l'orpotable faict en la défense de la philosophie et médecine antique contre la nouvelle paracelsique, par L[eo]. S[uavius]. S[olitarius].", J. de l'Astre, París. - Este "Discours responsif..." es el que erróneamente atribuye López Pérez a Alexandre de la Tourrete. Su verdadero autor, el polifacético Jacques Gohory (1520-1576), firma con su clásico seudónimo Leo Suavius Solitarius. Tal y como explica Didier Kahn, la cuestión no deja lugar a dudas: - D. KAHN, (1995), "Le paracelsisme de Jacques Gohory", (op. cit.), p. 98: "L'authenticité de ce texte signé L. S. S. ne fait pas de doude: le style elliptique et les sources caractéristiques des göuts si particuliers de Gohory s'y reconnaissent à chaque page; les «Bibliotheques françoises» de La Croix Du Maine et de Du Verdier l'attestent; mais surtout l'auteur, sans se nommer, cite comme sienne sa propre traduction de Levinus Leminus". - Podría sorprender que Gohory, todo un traductor al francés del "Theophrasti Paracelsi Philosophiae et medicinae, utriusque universae, compendium", se dedique a componer un ataque: "...en la défense de la philosophie et médecine antique contre la nouvelle paracelsique". Sin embargo, él entiende que se estaban malinterpretando una serie de conceptos paracélsicos, de ahí que decida replicar con dureza. No está de más recordar que Jacques Gohory mantuvo polémicas con Gerard Dorn, Pietro Perna, Pierre Hassard, Adam von Bodenstein y otros célebres impulsores del sistema paracélsico. Por terminar con el comentario, debo añadir que la disputa Gohory-Tourrete culminó en 1579 con dos declaraciones de este último dirigidas al rey y a la reina de Francia bajo el título "Vériffication de l'Or Potable". Ambas fueron reproducidas en 1611 por el teólogo y alquimista Gabriel de la Castaigne (1562?-1630?). - G. DE LA CASTAIGNE, (1615), "[Le ]Paradis Terrestre... auquel l'on trouuera la Pierre Philosophale, et le vray Or Potable, pour guarir toutes maladies incurables. Par le R. P. Gab[riel] de Castaigne...", Chez Charles Sevestre, París, cf. verficación al rey: pp. 79-83; a la reina: pp. 84-88. - Sobre este personaje: - J. SAVARE, (1975), "Le R. P. Gabriel de la Castaigne et L'Or potable", en: «Revue d'Histoire de a Pharmacie», XXVV, nº 226, pp. 515-521. - F. SECRET, (1989), "De quelques traités d'alchimie au temps de la régence de Marie de Médicis", en: «Chrysopoeia», nº 3, fasc. 4, pp. 305-402, cf. pp. 328-350.

25. - Las autoras ya han completado otros trabajos obre las actividades de la Real Botica. Algunas muestras serían: - M. L. DE ANDRÉS TURRIÓN & M. P. GARCÍA DE YÉBENES TORRES, (1998), "Una Institución Sanitaria al Servicio de la Corona Española: la Real Botica (1594-1931)", en: Juan Luis García Hourcade; Juan M. Moreno Yuste y Gloria Ruiz Hernández (Coord.), «VI Congreso de la Sociedad Española de Historia de las Ciencias y de las Técnicas», t. II, pp. 495-503. - PILAR GARCÍA DE YÉBENES & Mª LUISA DE ANDRÉS, (1998), "La Introducción de la Práctica Química en la Real Botica Española", en «Asclepio», 50, pp. 165-183. - Y sobre todo: - PILAR GARCÍA DE YÉBENES, (1994), "La Real Botica en el Reinado de Felipe V", tesis doctoral inédita, Universidad Complutense de Madrid [ejemplar consultado: U. Bibl. de Tesis-Inéditas, sig. T-19684].

 

 

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